El 2012 y Francia: implicaciones para México

El 2012 y Francia: implicaciones para México/Más de Susana Chacón, Secretaria general del Club de Roma en México.
El Universal, 17 de febrero de 2011;
En 2012 Francia, al igual que México, tendrá elecciones presidenciales. Sarkozy termina su primer periodo presidencial. A diferencia de México, desde el 2000 los periodos duran cinco años y pueden reelegirse por uno adicional. Nicolas Sarkozy ha tenido muy mala popularidad casi desde el comienzo de su presidencia.
En 2008, al cumplir el primer año en el cargo, tenía tan sólo 40% de aceptación de la población francesa. Un año antes ganó la presidencia con 53.6%. Hoy, su popularidad ha caído hasta 36%. Esto sin duda pone en entredicho su reelección. Nunca antes un presidente francés había tenido tan poca aceptación salvo en el periodo de la presidencia de transición entre la Tercera y la Cuarta República, entre los años de 1944 a 1945, en los que Charles de Gaulle fungió como presidente provisional, bajo la ocupación de los nazis en Francia.

Hoy, Francia vive un descontento aún mayor que el de 1945. De ahí que Sarkozy desde 2008 haya instrumentado una política para recuperar su popularidad. Parte sustancial de su estrategia radica en repatriar a los ciudadanos franceses que cumplen condenas en el extranjero. Busca acercarse a la población en su aspecto sentimental, desde lo que implica la violación de los derechos humanos. Como lo cuestionó un académico francés: ¿Será Cassez una secuestradora secuestrada por el gobierno mexicano? ¿Su caso se puede asimilar al de Íngrid Betancourt? Aquí está una explicación de su apoyo sin restricción al caso de Florence. ¿De qué otra manera se puede comprender el que el presidente haya recibido en 10 ocasiones a los padres de la acusada?
Actualmente la política francesa vive el momento en el que los posibles candidatos presidenciales buscan posicionarse ante el público francés para ser electos. Además de Sarkozy, otros como la ministra de Relaciones Exteriores, Michelle Alliot-Marie (MAM), han hecho declaraciones muy fuertes sobre las decisiones de México ante el caso. De ella, basta retomar sus comentarios ante la decisión mexicana del pasado jueves 10 de febrero o su participación en la Asamblea Nacional de este día 15 en la que ante el pleno de la Asamblea mostró su apoyo a Florence estando sus padres en el recinto. El pleno de la Asamblea Nacional, con sus diversos representantes políticos, aplaudió los planteamientos sobre Cassez y en contra de México.
En el caso de MAM, además, ella puede ser un contrapeso importante para la candidatura de Sarkozy debido a su trayectoria política. Ha sido ministra de Defensa y de Justicia y responsable del partido en el poder.
Por su parte, la izquierda francesa, también busca recuperar la presidencia. Martine Aubry, presidenta del Partido Socialista, ha comulgado desde el principio con la causa de Cassez. Aubry es también alcaldesa de Lille, lugar de nacimiento de Florence, por lo que quiere ganar el voto de su electorado. Fue ahí que se hizo una de las primeras cancelaciones del festival de Año de México en Francia: la inauguración de la magnífica exposición de José Guadalupe Posada.
Con estos tres ejemplos menciono tan sólo a los más importantes contendientes para el 2012, pero sin duda no son los únicos que refieren el caso, como lo ha hecho Sarkozy, con una enorme mediatización sobre el respeto a los derechos humanos y al cumplimiento del derecho internacional.
Independientemente del Año de México en Francia, la prioridad para el gobierno francés se centra hoy en las elecciones del 2012. Poco importan las relaciones exteriores, pareciera ser que se carece con una estrategia clara de política exterior por parte de la administración Sarkozy. Todo lo contrario. Es mucho más importante el protagonismo presidencial o individual.
Ante esta actitud y al cancelar el evento por parte del gobierno de México, dadas las presiones de Sarkozy y su falta de visión estratégica en el futuro de las relaciones México-Francia, debemos valorar qué se pierde y qué se gana con la decisión mexicana y con la presión francesa.
Francia pierde. El público francés pierde la posibilidad de acercarse a un México distinto al del narcotráfico. Acercarse al México siempre rico en cultura, arte, literatura, gastronomía, historia y artesanía. Al México moderno. Los diplomáticos franceses también pierden. Demostraron de nuevo su incompetencia como la de casos anteriores: Túnez, Egipto, Afganistán o el conflicto Israel-Palestina. Se demostró la incapacidad de Sarkozy en el manejo diplomático bilateral con México.
México también pierde. Pierde un espacio temporal y real de cambiar su cara frente al mundo. Cambiar su imagen en un escenario idóneo como el del público francés que en mucho aprecia lo que viene de nuestro país. Perdió también la posibilidad de desactivar el problema desde el marco de la UNESCO desde hace más de un año, al haber cerrado su representación en París.
El gobierno mexicano gana al evitar que sus más de 320 representaciones sean boicoteadas por un homenaje de un año a favor de la acusada. Gana el que no se demerite la cultura mexicana en todas sus expresiones. Francia cree ganar al cuestionar el sistema de justicia mexicano. Sobre todo, busca ganar espacios en sus elecciones del año próximo.
Los franceses han ganado al cuestionar el protagonismo sin rumbo del presidente Sarkozy. A todo esto, la que menos importa es Florence Cassez, quien no ha sido más que “un peón sacrificado” dentro del tablero completo. Sin duda, México debe hacer mucho en cuanto a su sistema de justicia, pero sin presiones externas. ¡Cuánto queda por aprender del manejo de este caso! La falta de visión bilateral y de política exterior, pero sobre todo, el exceso de protagonismo individual, mediático y sin rumbo resulta en escenarios de perder-perder para todos. ¡Qué desafortunado!