Clama
inocencia General Ángeles/ entrevista
Ángeles,
actualmente arraigado, dice que la carrera militar es de mucho sacrificio, pero
que le ha traído grandes satisfaccionesAnabel Hernández, reportera.
Reforma, 23 mayo 201).- "Si hay un proceso transparente y se investiga a fondo, saldré libre", asegura con voz pausada el General de División Diplomado del Estado Mayor en situación de retiro Tomás Ángeles Dauahare, señalado por la Procuraduría General de la República (PGR) de presuntamente haber colaborado para el Cártel de los Beltrán Leyva y Édgar Valdez Villarreal, "La Barbie".
El militar aceptó dar una entrevista telefónica desde el Centro Federal de Investigaciones de la Procuraduría, donde se encuentra bajo arraigo.
Es la primera vez que Ángeles Dauahare habla públicamente desde que fue detenido el 15 de mayo pasado por la Policía Militar para cumplir una orden de presentación girada por la Coordinación A de Delitos contra la Salud de la PGR. El 16 de mayo, la PGR solicitó a un juez dictar su arraigo por 40 días.
"Soy totalmente inocente", afirma el militar que por formación y disciplina está más acostumbrado a guardar silencio que a romperlo. Hoy la circunstancia por la que atraviesa lo hace salir públicamente para defender el principal patrimonio que tiene un militar en cualquier rincón del mundo: el honor.
La semana pasada fueron detenidos cuatro militares acusados de presuntamente colaborar con el crimen organizado: Ángeles Dauahare y el General Brigadier Roberto Dawe, presentados ante la PGR el mismo día. El General de División Ricardo Escorcia Vargas y el Teniente Coronel de Caballería retirado Silvio Isidro de Jesús Hernández Soto fueron detenidos el 18 de mayo.
Ángeles Dauahare es el militar de más alto nivel en el Ejército mexicano acusado de supuestos vínculos con la delincuencia organizada en la historia reciente. Al día de su detención, no existían pruebas suficientes para sujetarlo a proceso ante un Juez Penal, razón por la cual la PGR solicitó su arraigo, figura prevista por la ley para que el Ministerio Público pueda corroborar o no la presunta culpabilidad de persona alguna.
Hasta el día de hoy, no hay un juez que haya librado orden de aprehensión en su contra. Ni se ha girado una orden de cateo a sus propiedades.
Al momento de conceder esta entrevista, del otro lado del auricular, el General de División viste de manera obligatoria con camiseta amarilla, pants y alpargatas azules. Ningún juez le ha dictado el auto de formal prisión, pero Ángeles Dauahare ya fue marcado como si fuera un criminal. El color amarillo en el centro de arraigo es el que la PGR impone a aquellos acusados de delitos contra la salud.
Ángeles Dauahare asegura que no cree tener enemigos: "No los he procurado. He procurado no hacerle daño a nadie".
Dice que la carrera militar es de mucho sacrificio, pero que le ha dado muchas satisfacciones.
"Del deber cumplido, del éxito de cada una de las tareas que enfrentamos, en fin, situaciones de ésas. Ascensos por méritos, carrera de competencia, y siempre da gusto sobresalir".
Y, pese a su actual circunstancia, dice que se encuentra con buen estado de ánimo, "con la seguridad de que el que nada debe nada teme".
Asegura que el Ejército mexicano fue y es su pasión, y que ha mantenido el honor de la Institución y de la larga estirpe de militares a la que pertenece.
Su tío abuelo Felipe Ángeles peleó con Francisco Villa y es considerado un héroe de la Revolución.
"...Mucho le debo al Ejército, mucho le debo al Estado mexicano".
Sobre su relación con Estados Unidos, Ángeles Dauahare señaló en la entrevista que durante sus dos estancias en la Agregaduría Militar en la Embajada de México en Estados Unidos, de 1984 a 1986 y de 1992 a 1994, su relación con el Ejército de EU y las agencias de inteligencia de ese país fue respetuosa.
Señaló que no hubo dudas hacia su persona por parte del Gobierno de Estados Unidos.
Al preguntarle por su seguridad dentro del centro de arraigo, Ángeles Dauahare comentó que se siente seguro porque dentro del lugar hay mucha vigilancia, aunque él no cuenta con seguridad especial pese al rango de servidor público que ocupó en la Sedena.
Afirma que lo tienen apartado del resto de la población del centro de arraigo. Se recabó la información de que actualmente comparte un dormitorio con el General Dawe.
Durante sus 44 años de carrera militar, Ángeles Dauahare ha ocupado las posiciones más importantes en la Secretaría de la Defensa Nacional, la última de ellas como Subsecretario de la Sedena por designación del Presidente Felipe Calderón, bajo las órdenes del Secretario de la Defensa Nacional, Guillermo Galván.
El lunes pasado, el Presidente Felipe Calderón, desde Barbados, se refirió por primera vez, después de seis días de ocurridas las detenciones, al tema de los militares detenidos por presuntos nexos con el crimen organizado.
"... Lamento y condeno el que algunos, y muy individualmente señalados, algunos miembros de las mismas, según las evidencias encontradas tanto por la PGR como por la Procuraduría Militar, hayan incurrido en actos ilícitos y lo único que queda claro aquí es que mi Gobierno no tolerará actos contrarios a la ley, vengan de donde vengan".
"...El hecho de que sea el Ejército mexicano mismo el que haya impulsado tanto las investigaciones en apoyo a la PGR para fincar responsabilidades contra los miembros que hayan incurrido en actos ilícitos es una prueba de la solidez, patriotismo y lealtad del Ejército mismo", dijo el Mandatario.
De acuerdo con la información obtenida, durante su cargo como segundo de a bordo de la Defensa Nacional, Ángeles Dauahare fue un hombre muy cercano a Los Pinos. Se reunía con el entonces Jefe de la Oficina de la Presidencia de la República, Juan Camilo Mouriño, y el Presidente Calderón.
Ángeles Dauahare agradeció las muestras de apoyo que ha recibido y pidió a su familia que no desmayen.
"Que la tranquilidad y fortaleza de ellos es la mía", dijo tranquilo.
Fuentes del Gobierno de Estados Unidos han señalado que hay gran sorpresa y descontrol dentro del Gobierno de EU porque dicen no sabían que iban a ocurrir las aprehensiones de los militares. Señalan no entender lo que ocurre, ni conocer las acusaciones contra los militares bajo investigación.
La entrevista
-El 15 de mayo fue detenido con una orden de presentación, lo acusan de presuntamente haber colaborado con el Cártel de los Beltrán Leyva, ¿Es inocente de estos cargos?
-Inocente.
¿Totalmente?
-Totalmente.
-Para usted, ¿qué ha significado los más de 40 años de servicio en el Ejército mexicano?
-Amar a México, servir a mi País y mantener el honor de la Institución.
-¿Qué significa ser militar en México?
-Requiere muchos sacrificios, pero es muy bonito, se recompensa con muchas satisfacciones.
-¿Cómo cuales?
-Del deber cumplido, del éxito de cada una de las tareas que enfrentamos, en fin, situaciones de ésas. Ascensos por méritos, es una carrera de competencia y siempre da gusto sobresalir.
-¿Para usted qué representa, qué significa en su vida el Ejército?
-Fue mi pasión, ha sido mi pasión todavía. Eso significa. Mucho le debo al Ejército, mucho le debo al Estado mexicano, me dio mucho.
-Viene de una larga estirpe de militares. ¿Se siente usted orgulloso de eso? ¿Ha hecho honor a esa estirpe?
-Por supuesto que sí, por supuesto.
-Para usted, ¿qué significa México?
-Pues es el lugar donde nací, el lugar donde he vivido, el lugar que me ha dado mucho, el lugar que le ha dado mucho a mi esposa, a mis hijas, a mis nietos. Es todo para mí este País.
-¿Qué estaría dispuesto a hacer por este País?
-Todo, todo por el bienestar de su sociedad y por el prestigio y seguridad de este País.
-De su carrera militar en todos estos cargos tan importantes que ha ocupado en México y el extranjero ¿hay algún episodio que recuerde con más satisfacción?
-Son muchas las satisfacciones. Ser jefe de Batallón, ser secretario particular de un Secretario de la Defensa muy puntual (Enrique Cervantes Aguirre), ser director del Colegio Militar, ser agregado de México en Estados Unidos; en fin, son muchas las satisfacciones.
-¿Cómo fue su estancia en Estados Unidos? Usted estuvo en dos momentos de su carrera, primero como agregado alterno creo de la Embajada de México en Estados Unidos y luego como agregado titular militar en la Embajada de México en Estados Unidos. ¿Cómo fue y cómo siguió siendo su relación con el Gobierno de Estados Unidos, con las agencias de inteligencia?
-Fue buena, fue buena la relación con el Gobierno de Estados Unidos en la parte de la defensa y las demás, fue buena la relación
-¿Fue respetuosa?
-Sí, de respeto, de mucho respeto.
-¿Usted sintió en algún momento que de aquel lado de ese Gobierno de Estados Unidos hubieran dudas hacia su persona?
-Nada, nada -responde y señala que le dicen que está por acabarse el tiempo de la llamada telefónica.
-General, ¿tiene usted enemigos?
-La verdad no sé, no los he procurado, he procurado no hacerle daño a nadie. No sé, no sé la verdad si tengo enemigos.
-¿Es inocente, General Tomás Ángeles Dauahare?
-Totalmente inocente de lo que se me acusa, total absolutamente -dice sereno, pero firme.
-¿Espera poder conseguir su libertad General?
-Eso espero, espero que éste sea un juicio transparente y que se investigue a fondo. Sé que es un juicio transparente, eso es lo que deseo.
-¿Le han mostrado muestras de apoyo de sus compañeros militares?
-Muchas muestras de apoyo de mucha gente en realidad.
-¿De salud se encuentra bien?
-Bien, absolutamente bien, bien tratado.
-¿De estado de ánimo?
-Bien, con la seguridad de que el que nada debe nada teme.
-¿Cómo fue su día de hoy, General?
-Bien atendido en comida, en servicio médico, en caminar, bien, bien, bien.
-¿Ya pudo reunirse con sus abogados?
-Todavía no, espero hacerlo pronto.
-¿Estás contando con alguna seguridad especial?
-No ninguna, hay mucha seguridad aquí.
-¿General, teme por su vida?
-No
-En este lugar se encuentran presos de otras índoles, ¿no se siente bajo riesgo?
-No, estamos muy aislados, muy separados, vamos a todas nuestras actividades muy independientes.
-¿Ha recibido alguna información más respecto a los cargos de los que lo acusan?
-No, ninguna más, ninguna.
¿Qué mensaje le ha dado a su familia General?
-Que muchísimas gracias por su apoyo, que no desmayen, que sigan en pie. Que la tranquilidad y fortaleza de ellos es la mía.
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