'Beatriz' sobrevive a una cesárea en la que el bebé murió horas después
Había recibido una negativa de la Justicia para abortar, pese a estar enferma
La joven de El Salvador con lupus y una enfermedad renal fue operada tras registrar dolores por su embarazo, según autoridades sanitarias
El
caso propició un debate entre abortistas y defensores de la vida a nivel
internacional
Beatriz, la joven salvadoreña que padece lupus y una enfermedad renal a la que la Corte Suprema del país negó la posibilidad de abortar, fue sometida a una cesárea tras sufrir dolores por su embarazo, informaron las autoridades sanitarias del país centroamericano. La mujer se recupera, pero su bebé, una niña, nació sin cerebro y murió horas después.
Había recibido una negativa de la Justicia para abortar, pese a estar enferma
La joven de El Salvador con lupus y una enfermedad renal fue operada tras registrar dolores por su embarazo, según autoridades sanitarias
Beatriz, la joven salvadoreña que padece lupus y una enfermedad renal a la que la Corte Suprema del país negó la posibilidad de abortar, fue sometida a una cesárea tras sufrir dolores por su embarazo, informaron las autoridades sanitarias del país centroamericano. La mujer se recupera, pero su bebé, una niña, nació sin cerebro y murió horas después.
Beatriz
—un nombre ficticio para resguardar su identidad— joven de 22 años, comenzó a sentir dolores
durante el fin de semana, por lo que las autoridades decidieron aplicarle el
procedimiento autorizado por el Ministerio de Salud para cuidar su integridad,
informó la titular de la dependencia, María Isabel Rodríguez.
"Ya la
operaron, fue una operación limpia", dijo a EFE la presidenta de la
Agrupación Ciudadana por la Despenalización del Aborto, Terapéutico, Ético y
Eugenésico, Morena Herrera.
La
bebé murió unas cincos horas después del alumbramiento debido a que, como se
había detectado en exámenes médicos, carecía de cerebro, una situación que en
términos médicos es conocida como anencefalia, informó la ministra de Salud. La
operación fue realizada en el Hospital de Maternidad de San Salvador, donde se
encuentra desde hace varias semanas.
Beatriz
recibió a fines de mayo la negativa de la Suprema Corte a una petición hecha
para sometrse a un aborto terapéutico. La máxima instancia judicial del país
determinó que “los derechos de la madre no pueden privilegiarse sobre los del
nasciturus (el que ha de nacer) ni viceversa”.
La
Corte fue criticada por emitir su resolución casi un mes y medio después de
recibir la solicitud de Beatriz, presentada el 11 de abril. Sin embargo, la
joven de 22 años recibió un día después del fallo medidas provisionales
dictadas por la Corte Interamericana de Derechos Humanos. El tribunal con sede
en Costa Rica pidió al Estado salvadoreño acciones para proteger la salud de
Beatriz, entre ellas un aborto terapéutico.
El
Ministerio de Salud determinó después que Beatriz podría ser sometida a un
“parto inducido”, debido a que ya había superado las 20 semanas de embarazo y,
por tanto, también el periodo para abortar.
Un
detonante del debate
El
aborto está prohibido en todas sus formas por las leyes salvadoreñas desde
1998. El país centroamericano es uno de los cinco en América Latina que
prohíben el aborto en todas sus formas.
El
caso de Beatriz reavivó el debate entre abortistas y activistas provida en El
Salvador y en países de la región. Grupos a favor del aborto se congregaron
durante mayo en las afueras de la Suprema Corte para pedir al tribunal que aprobara
la solicitud de la joven. “Mi cuerpo es mi protesta”, gritaron algunas mujeres
durante la manifestación.
En
tanto, ciudadanos consultados por CNN aplaudieron la negativa de la Corte como
una medida que beneficiaría la defensa de la vida. “La Constitución establece
con claridad que existe vida desde el momento de la concepción y por tanto
cualquier cosa que atente contra la vida es asesinato”, dijo a fines de mayo el
diputado del Partido Demócrata Cristiano, Rodolfo Parker.
El
abogado de la joven, Víctor Mata, consideró que la petición de aborto de su
cliente “es un procedimiento normal que se hace en los tribunales, que es un
tanto inusitado porque en materia constitucional hasta ahora se está haciendo”
en El Salvador.
En
Nicaragua, un país vecino, manifestantes se reunieron afuera de la embajada
salvadoreña en Managua para apoyar a la peticionaria de aborto terapéutico.
“Puede ser una buena señal para miles de mujeres que como Beatriz hay en
Centroamérica”, dijo Patricia Orozco, una manifestante, sobre la posibilidad de
que la Corte autorizara la solicitud de la chica salvadoreña.
La
esposa del presidente salvadoreño, Vanda Pignato, pidió este martes dejar “en
paz” a Beatriz, tras conocerse la cesárea a la que fue sometida. “A los medios
de comunicación, a la sociedad, a las activistas de los derechos de las
mujeres, a las que dicen que son activistas por defender a las mujeres (…) que
por favor dejen de utilizar el caso de la señora Beatriz, dejémosla en paz”,
dijo Pignato, esposa de Mauricio Funes.
(Nota de CNN, con
información de Merlín Delcid).
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El
Salvador: "Beatriz" no abortó y dio a luz a su hija con anencefalia
SAN
SALVADOR, 04 Jun. 13 / 12:15 pm (ACI/EWTN Noticias).- "Beatriz"
-nombre ficticio- una joven de 22 años que padece lupus y estaba embarazada de
una niña con anencefalia, no se sometió a un aborto y dio a luz a través de una
cesárea ayer, alrededor del mediodía (hora de El Salvador), pero la bebé
falleció de causas naturales debido a su condición, cerca de cinco horas
después del parto.
En
un comunicado remitido hoy a ACI Prensa, el movimiento pro-vida salvadoreño
VIDA SV confirmó que "‘Beatriz’ ha dado a luz a su hija por medio de un
parto por cesárea y la bebé tuvo 5 horas de vida".
"La
vida le ganó a la muerte aún por unas horas. Nos manifestamos alegres de que la
sentencia dada por la CSJ (Corte Suprema de Justicia) buscó y logró proteger
ambas vidas", expresó.
El
caso de "Beatriz" fue manipulado con mentiras por organizaciones que
buscan la legalización del aborto en El Salvador, entre las que se encuentran
Amnistía Internacional (AI), Human Rights Watch y Women’s Link, la misma que
lideró la legalización del aborto en Colombia.
El
lobby abortista difundió en la opinión pública la idea de que la vida de la
joven salvadoreña corría grave peligro si no se sometía a un aborto y, según
AI, mantener con vida en el vientre a la bebé con anencefalia podía "ser a
futuro la causa de complicaciones obstétricas".
En
un intento de legalizar el mal llamado aborto "terapéutico" en El
Salvador, dos abogados miembros de la "Agrupación Ciudadana por la
despenalización del aborto Terapéutico, Ético y Eugénesico", Víctor Hugo
Mata Tobar y Dennis Estanley Muñoz Rosa presentaron, en
"representación" de la joven, una acción de amparo ante la Sala de lo
Constitucional de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), asegurando que era
"necesario interrumpir la gestación de manera inmediata, para evitar
colocar a la peticionaria en peligro inminente de muerte".
Sin
embargo, tras evaluar a "Beatriz", a petición de la Sala de lo
Constitucional, los expertos del Instituto de Medicina Legal (IML) de El
Salvador, determinaron de forma unánime que no existía "una razón médica
para suspender el embarazo".
El
director del IML, Dr. José Miguel Fortín, denunció ante un medio televisivo
local que "se ha estado manipulando a la muchacha desde el principio y se
están diciendo cosas que no son verdad y que Medicina Legal no puede
acompañar", y aseguró que era falso "que esté en riesgo inminente, no
es cierto que vaya a mejorar si se le saca al niño y no es cierto que El
Salvador es un estado talibán".
Ante
la contundente evidencia médica, la Sala de lo Constitucional de la CSJ
determinó el 29 de mayo rechazar la acción de amparo que buscaba que se le
practique un aborto a "Beatriz" y subrayó en su sentencia que
"existe un impedimento absoluto para autorizar la práctica de un aborto
por contrariar la protección constitucional que se otorga a la persona humana
desde el momento de la concepción".
Aún
más reveladora es la página 41 del fallo de la instancia judicial salvadoreña,
en la que los magistrados aseguran que, durante una audiencia con ellos,
"Beatriz" manifestó que no quería que se le practique un aborto.
A
pesar de esto, la sentencia de la Sala de lo Constitucional fue catalogada por
la ONG abortista Amnistía Internacional como "vergonzosa y
discriminatoria", pues no haberle realizado el aborto a la joven
salvadoreña "es algo cruel, inhumano y degradante".
En
su comunicado el movimiento VIDA SV, conformado por jóvenes pro-vida de El
Salvador, reiteró su denuncia que "el caso ‘Beatriz’ fue un caso fabricado
con el único propósito de legalizar el aborto en nuestro país" y calificó
el resultado, con el nacimiento por cesárea de la hija de la joven como
"un fracaso de quienes manipularon la opinión pública en base a falsos
diagnósticos, el temor y la instrumentalización de una persona humana en
vulnerabilidad".
"El
aborto no es médicamente necesario para salvar la vida de una mujer. Llevar a
cabo un aborto durante un embarazo conflictivo solamente aumenta los riesgos en
la salud de la madre, por lo tanto ‘Beatriz’ nunca necesito un aborto, su
enfermedad (LES) nunca estuvo activa, por lo que nunca estuvo en peligro
inminente de muerte".
VIDA
SV indicó además que "‘Beatriz’ nunca tuvo insuficiencia renal y ‘Beatriz’
nunca quiso abortar a su hija".
Además,
desde que se solicitó el amparo ante la Sala de lo Constitucional,
"siempre existió otra alternativa médica totalmente ética y lícita: el
parto inducido".
El
movimiento pro-vida salvadoreño destacó que la bebé de "Beatriz"
"murió por razones naturales y no por un aborto" y saludó que
"nuestra legislación salvadoreña, además de proteger la integridad física
de la madre ha garantizado una muerte digna para su hija y forzado a las
autoridades de salud a buscar soluciones reales que conserven la ética
profesional".
Por
su parte, en declaraciones para ACI Prensa el 4 de junio, la directora
ejecutiva de la Fundación Sí a la Vida, Georgina de Rivas, indicó que
"‘Beatriz’ se encuentra bien, recibiendo las atenciones debidas por lo que
manifiestan tenerla en cuidados intensivos".
La
líder pro-vida señaló que "en sus 5 horas de vida, esta bebé deja
constancia de que todo ser humano tiene derecho a morir dignamente en brazos de
su madre".
"Elevemos
nuestras oraciones para pedir consuelo para sus padres y abuela y una pronta
recuperación para ‘Beatriz’", expresó.
Según
revelaron en conferencia de prensa esta mañana las autoridades del Ministerio
de Salud de El Salvador, junto a médicos del Hospital de la Maternidad,
aseguraron que la cesárea se realizó sin complicaciones y que la salud de
"Beatriz", quien permanece en la Unidad de Cuidados Intensivos, evoluciona
favorablemente.
Ayer
la plataforma Derecho a Vivir lanzó una campaña recolección de firmas para
pedirle al presidente de El Salvador, Mauricio Funes, que "resista a la
campaña de intimidación del lobby abortista", subrayando que
"‘Beatriz’ quiere vivir, no quiere abortar", la que en menos de 24
horas recogió más de 12 400 rúbricas.
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Caso “Beatriz” demostró que no se necesita aborto para salvar vida de la madre
MADRID,
04 Jun. 13 / 01:58 pm (ACI/EWTN Noticias).- La portavoz de la plataforma
Derecho a Vivir, la doctora en medicina y pediatra Gádor Joya, aseguró que el
caso de “Beatriz”, a quien se le realizó una cesárea ayer que permitió el
nacimiento de su niña, “ha demostrado que no es necesario el aborto para salvar
la vida de la madre”.
En
una misiva remitida a los miles de socios y suscriptores de la organización
pro-vida, la Dra. Gádor Joya aseguró que “hoy estamos de enhorabuena. ¡Muchas
felicidades! ‘Beatriz’, la madre salvadoreña a la que se ha tratado de imponer
un aborto, ha dado a luz sin ningún riesgo para su vida”.
“Beatriz”
es una joven de 22 años que padece lupus y se encontraba embarazada de su
segundo hijo, una niña con anencefalia que nació ayer alrededor del mediodía,
luego de una cesárea. La niña, debido a su condición, falleció cinco horas
después del parto.
“Como
sabes, esta criatura venía con anencefalia, una enfermedad que reduce
drásticamente la vida”, explicó Joya, asegurando que en su corta vida, la
pequeña “ha hecho algo grandísimo: Ha demostrado que no es necesario el aborto
para salvar la vida de la madre”.
La
líder pro-vida denunció que, en su intento de legalizar el aborto en El
Salvador, ONGs como Amnistía Internacional, Human Rights Watch y Women’s Link,
“repitieron machaconamente a la opinión pública que si ‘Beatriz’ no abortaba,
morirían ella y su hija. Incluso presentaron supuestos argumentos médicos para
defender esta ejecución”.
“Intentaron
aislar a Beatriz para que no tuviera acceso a más información que la
proporcionada por quienes querían matar a su hija. Manipularon un video con
supuestas declaraciones de la madre. Movilizaron sus inmensos recursos para
obligar al Gobierno de El Salvador a ejecutar este aborto”, señaló.
Gádor
Joya criticó que “organizaciones de apariencia pacífica y fines supuestamente
buenos, como la mencionada Amnistía Internacional, se lanzaron a reclamar la
ejecución inmediata del bebé de ‘Beatriz’ con la falsa excusa de que la madre
moriría si no abortaba”.
Joya
señaló que los “defensores del derecho a vivir” se movilizaron ante las
mentiras de los abortistas, escribiendo al Gobierno de El Salvador, “mandamos
correos electrónicos a su presidente, les animamos a resistir las presiones del
lobby abortista internacional, recogimos firmas, generamos argumentos”.
Como
resultado de la movilización de todas las organizaciones pro-vida, indicó Gádor
Joya, “‘Beatriz’ ha dado a luz y su salud no se ha resentido. Hemos impedido un
aborto. No se ha descuartizado, ni quemado al bebé, que ha fallecido de muerte
natural”.
“Aunque
los abortistas anden insinuando por ahí que es lo mismo cesárea que aborto,
cualquier persona medianamente informada conoce la diferencia abismal entre
ambos”, señaló.
Con
este caso, subrayó la portavoz de Derecho a Vivir, “se ha demostrado una vez
más que los abortistas usan mentira para difundir su ideología promuerte”.
La
Dra. Joya solicitó “que pidan perdón quienes han mentido, si es que queda algo
de decencia en quienes han manipulado esta historia. Ahora nosotros reclamamos
que el lobby del aborto se disculpe por mentir, que Amnistía Internacional pida
perdón por querer ejecutar a un ser humano”.
“En
cambio hay que felicitar calurosamente al Gobierno de El Salvador por su valor
y coraje a la hora de defender la vida y por tener una legislación que la
protege de injerencias abortistas”, concluyó
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