Noche
del viernes 17 de junio de 2016-
Intervención
al Jefe de Gobierno de la Ciudad de México, doctor Miguel Ángel Mancera
Espinosa.
Muy
buenas noches a todas y a todos.
Se
trata, sin duda, de un hecho histórico.
Todos
los representantes de los gobiernos estatales y del Federal, en cumplimiento al
Mandato Constitucional emprendimos juntos la misión de transitar hacia una
nueva manera de procurar y de impartir justicia en la materia penal.
Fueron
ocho años para armonizar cientos de instrumentos normativos, capacitar a miles
de personas, invertir millones de pesos en infraestructura y, por supuesto,
provocar un cambio en la mentalidad de todos los involucrados en y con el
sistema penal mexicano.
Hoy,
se cumplirá ese plazo constitucional en nuestro país. Hoy, debemos iniciar con
la tarea de aplicar esta reforma de manera plena, de forma total para todos los
delitos y en todo nuestro territorio.
Hoy,
México iniciará con el archivo gradual, pero definitivo de su anterior forma de
impartir justicia penal.
Por
todo este esfuerzo nacional, mi reconocimiento a todos y cada uno de los
estados y sus gobiernos que, con gran voluntad y suma de esfuerzos, cumplieron
la meta. Sin duda, no fue sencillo.
También,
debemos agradecer a aquellos que abrieron brecha y nos fueron apoyando y
orientando a los demás.
Por
supuesto a Legisladores, a juzgadores, abogados, peritos, a policías, a la
sociedad civil, a académicos, a medios de comunicación y, de igual manera, a
usted, señor Presidente de la República, por el seguimiento que se ha dado al
Mandato Constitucional por parte de su Gobierno.
Y
una mención especial al Secretario de Gobernación y a la SETEC por todo el
apoyo permanente para las entidades federativas.
Está
claro que todo cambio tiene su proceso de adaptación y, desde luego, de
correcciones y, por qué no, de mejoras, por ello también sé que todos nosotros
participaremos en el seguimiento puntual de la consolidación para lograr un
nuevo sistema penal fuerte, eficaz, eficiente, un sistema que verdaderamente
resulte ser una manera más sencilla, transparente, justa y expedita de acceder
a la justicia.
Una
justicia que con la oralidad pueda dotar al sistema penal de mayor
transparencia, agilidad y certeza en el ejercicio de juzgadores y servidores
públicos.
Que
ocupe y se preocupe por las víctimas, de la protección de sus derechos en todas
las etapas del procedimiento.
Una
justicia que anteponga la presunción de inocencia, el respeto estricto al
debido proceso y a los derechos humanos como parte de sus pilares.
Señoras
y señores:
Está
claro que para alcanzar esto será necesario continuar trabajando juntos, de
manera coordinada para lograr un modelo de sistema penal que verdaderamente sea
útil para la gente, que realmente le sirva a los más vulnerables, que pueda dar
respuesta a los más enojados por la impunidad, por la corrupción, una
corrupción que logra quitar la venda a quienes sostienen la balanza de la
justicia.
En
suma. Trabajemos para consolidar un sistema penal que dote a México de una
justicia a la que la gente, a la que nuestra gente se pueda acercar con
confianza plena.
Muchas
gracias.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario