Revista Proceso 1985, 15 de noviembre de 2014
La fructífera amistad Higa-Los Pinos/
ARTURO RODRÍGUEZ GARCÍA
Lejos de los contratos federales
durante los dos sexenios panistas, a Juan Armando Hinojosa Cantú le volvió a
sonreír la fortuna al llegar Enrique Peña Nieto a la Presidencia. Y no es que
le hubiera ido mal antes: sus empresas fueron favorecidas con obras de
infraestructura en el Estado de México cuando el actual jefe del Ejecutivo era
gobernador. Esto es resultado de una sólida y larga amistad entre el empresario
tamaulipeco y el político mexiquense.
El presidente Enrique Peña Nieto y Juan
Armando Hinojosa Cantú tienen una relación de amistad, de proveeduría gubernamental
y hasta de financiamiento hipotecario que, a menos de dos años de la presente
administración federal y sin transparentar la totalidad de los contratos
obtenidos por las empresas del segundo, se traduce en más de 22 mil millones de
pesos.
En el intento de justificar una
presunta propiedad de Peña Nieto en las Lomas de Chapultepec, el vocero
presidencial, Eduardo Sánchez Hernández aseguró que la residencia de Sierra
Gorda 150 es propiedad de la primera dama, Angélica Rivera, y que aún la está
pagando… a la empresa Ingeniería Inmobiliaria del Centro, propiedad de Juan
Armando Hinojosa Cantú.
Alejado de los negocios con el gobierno
federal durante los gobiernos panistas de Vicente Fox y Felipe Calderón, el
tamaulipeco Hinojosa –avecindado en el Estado de México– ha obtenido ahora
contratos de obra que podrían considerarse entre los más cuantiosos de la
administración peñanietista.
El empresario preside el Grupo Higa,
corporativo que agrupa, según su página de internet, a Constructora Teya,
Mezcla Asfáltica de Alta Calidad, Publicidad y Artículos Creativos y Señales y
Mantenimiento.
Pero hay otras razones sociales que
también han obtenido contratos y son del empresario. Es el caso de la empresa
de taxis aéreos Eolo Plus y de las contratistas de obra Controladora de
Operaciones de Infraestructura, Consorcio Integrador del Ramo de la
Construcción y Autopistas de Vanguardia.
Los contratos asignados a las empresas
de Hinojosa Cantú en lo que va del actual sexenio se documentaron a partir de
un seguimiento realizado por Proceso en distintos portales digitales
gubernamentales, pues aunque se supone que la información debe colocarse por
completo en el Portal de Obligaciones de Transparencia (POT), una
característica de la administración peñanietista es la tardía o insuficiente
actualización de datos.
Entre las obras localizadas figura la
ampliación del hangar presidencial en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad
de México, localizable en los registros públicos de la Secretaría de
Comunicaciones y Transportes (SCT), donde se describe que el contrato fue
asignado a Constructora Teya por un monto de 100 millones de pesos (mdp).
En algunos casos Teya participa con
otras empresas. Como en el contrato por 2 mil 556 mdp para la construcción del
túnel Churubusco-Xochiaca en los límites del Distrito Federal y el Estado de
México, otorgado por la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
Otro contrato con la Conagua –éste en
asociación con Ingenieros Civiles Asociados (ICA)– es el proyecto del acueducto
Monterrey VI, el cual pretende trasvasar agua del río Pánuco, desde la Huasteca
Tamaulipeca, hacia la capital nuevoleonesa. La obra se calcula en 47 mil mdp,
de los cuales el gobierno federal aportará 18 mil 283, según el Programa
Nacional de Infraestructura.
De los 47 mil mdp del Monterrey VI, a
la empresa Controladora de Operaciones de Infraestructura –de Hinojosa–
corresponderían 17 mil 625, cifra cercana a lo que aportará el gobierno federal
para su realización, la cual por otra parte será solventada con una deuda del
gobierno estatal por 25 años.
Teya obtuvo también, en febrero de
2013, el contrato para la ampliación de dos a cuatro carriles en 400 kilómetros
de la carretera Guadalajara-Colima. El contrato se asignó por conducto de
Banobras por 417 mdp.
Además su razón social Autopistas de
Vanguardia consiguió en julio de 2013 la construcción de la autopista
Toluca-Naucalpan, por 2 mil 200 mdp con financiamiento de Banobras.
Información obtenida por Proceso indica
que las empresas de Hinojosa Cantú participan también –en asociación– en la
construcción de cuatro penales de alta seguridad, un rubro iniciado durante el
gobierno de Felipe Calderón en el cual destacan como constructores Tradeco,
Homex, Prodemex, Arendal, GIA+A e ICA.
Esta última información no pudo ser
corroborada en los portales de acceso a la información. No obstante, además de
su ya mencionada asociación con ICA en diferentes proyectos, son Prodemex,
Arendal y GIA+A las empresas con las cuales iba en asociación para el contrato
cancelado de construcción del tren rápido México-Querétaro.
En los boletines 190 y 193 –de los días
22 y 25 de agosto de ese año–, la SCT informó de “las actividades de la gira de
trabajo” de Ruiz Esparza. En ambos destacó que el secretario promovía proyectos
estratégicos en materia ferroviaria y portuaria, y que había viajado en un tren
de alta velocidad de Beijing a Tianjín, un recorrido de 180 kilómetros, en
apenas 40 minutos, a 300 kilómetros por hora, “para conocer su funcionamiento,
tecnología y capacidad de transporte”.
El 28 de agosto siguiente Darío Celis
escribió en su columna Dinero, de Excélsior: “Un dato interesante fueron las
constructoras que fueron invitadas y que pudieran perfilarse para las próximas
licitaciones de puertos y trenes rápidos de pasajeros. Considere primeramente a
Grupo Higa de Juan Armando Hinojosa, GIA de Hipólito Gerard, Prodemex de
Olegario Vázquez Aldir y Pierdant Group del empresario avecindado en Miami
Ricardo Pierdant”.
Los nombres son reveladores pues Gerard
es cuñado del expresidente Carlos Salinas de Gortari, y Vázquez Aldir es hijo
del empresario Olegario Vázquez Raña.
Días después, el 2 de septiembre, Ruiz
Esparza fue entrevistado por Carlos Zúñiga en Milenio Noticias. Le preguntó qué
tenía que ver el país con China. Entre otras cosas el titular de la SCT dijo:
“Tenemos mucho que aprenderles. Y en trenes de alta velocidad, sin duda trenes
de altísima calidad, que es algo que comparto con el auditorio, el haber ido de
Beijing a Tianjín, que es una provincia de Beijing, distancia más o menos
similar a la de México-Querétaro, en 35 minutos. Es como haber ido de México a
Querétaro en 35 minutos”.
Las empresas que fueron a la gira de
2013 ganarían, el 3 de noviembre de 2014, junto con China Railway Construction
Corporation y China South Locomotive & Rolling Stock Corporation, la licitación
para el tren México-Querétaro, la misma cancelada el jueves 6, con un costo
para el erario de unos 500 millones de pesos.
De acuerdo con los mencionados
boletines de la SCT, la comitiva de Ruiz Esparza en China estuvo compuesta por
los directores generales de los bancos de Comercio Exterior (Bancomext),
Enrique de la Madrid Cordero; de Obras y Servicios Públicos (Banobras), Alfredo
del Mazo; el titular de Nacional Financiera, Jacques Rogozinski, y el embajador
de México en China, Julián Ventura, entre otros.
Se trata de las dependencias y
entidades gubernamentales que coincidentemente han contratado en este sexenio a
Eolo Plus, la empresa de transportación aérea de Hinojosa.
El 1 de septiembre el Bancomext
contrató a Eolo por 1.4 mdp. Nafin la contrató el 9 de septiembre de 2013 por
2.6 mdp. Banobras lo hizo también ese mes por 10.7 mdp.
Además la Secretaría de Economía le
contrató sólo 141 mil pesos; Sociedad Hipotecaria Federal lo hizo por seis mdp
el 19 de septiembre de 2013, en tanto la SCT le concedió el 6 de junio de 2014
un contrato por 5.5 mdp. Entre los beneficios obtenidos por Eolo Plus destaca
también que la Dirección de Aeronáutica Civil, de la SCT, le otorgó una
concesión de escuela aeronáutica el 23 de marzo de 2013.
En total Eolo Plus, según lo
transparentado, acumula 20.8 mdp en contratos de transporte aéreo, la mayoría
asignados días después del viaje a China. En el sexenio de Calderón consiguió
poco más de 11 millones de pesos en contratos, la mayoría asignados por Pemex,
donde, por cierto, era gerente de Administración Antonio Murrieta Cummings,
hermano de Rafael, en esos días director de Operaciones de la paraestatal, y
Raúl, secretario de Finanzas en la administración peñanitetista mexiquense.
Respecto a China, Ruiz Esparza debió
viajar una vez más el martes 11, coincidiendo con la participación de Peña
Nieto en una cumbre económica y su visita de Estado a China. Pero no lo
llevaron en la delegación; debió transportarse aparte para ofrecer una
explicación sobre la cancelación del proyecto a la empresa oriental, que sin
embargo no dejó de reclamar a Peña Nieto lo ocurrido.
“Cuentan que ya le saca la vuelta a las
visitas de aquel lado del río Bravo porque cada vez que lo hace son tantas las
atenciones que recibe, lo mismo por Mission que por McAllen, que lo regresan a
Toluca con los ojos en blanco. Lo agobian entre carnes asadas y torneos de
golf.”
Y es que su afición al golf es
conocida, lo mismo en los exclusivos campos del Valle de Texas que en el Bosque
Real Country Club, en Huixquilucan, y el Club de Golf San Carlos, en Toluca.
Es en esos últimos dos campos donde
suele vérsele jugando con el coordinador de Comunicación Social de la
Presidencia, David López; con el secretario de Medio Ambiente, Juan José Guerra
Abud –quien le ha autorizado numerosos permisos para manejo de residuos
peligrosos– y con hombres influyentes en el Estado de México: Heberto Barrera,
Pedro Chuayffet Chemor, Franklin Libien, Octavio Olivares, José Antonio Yamín y
Héctor Mena Abascal, entre otros.
La cercanía personal con Peña Nieto es
innegable. En un trágico accidente quedó de manifiesto su amistad, cuando el
hijo del empresario, Juan Armando Hinojosa García, murió, el 28 de julio de
2012, al regresar de la fiesta de cumpleaños del mexiquense en una hacienda de
Michoacán.
Peña Nieto, quien había sido testigo de
la boda de Hinojosa García con una hija del exgobernador veracruzano Fidel
Herrera, inclusive emitió sus condolencias en Twitter por “la pérdida de Juan
Armando” y acudió al sepelio del joven.
Para entonces Hinojosa acumulaba
contratos como el de construcción y operación del Distribuidor Vial Naucalpan,
Par Vial Metepec; había construido puentes y ampliaciones de carriles en el
Bulevar Aeropuerto de Toluca y la autopista Toluca-Naucalpan.
Además el Viaducto Elevado
Bicentenario; obras complementarias del Libramiento Acambay; la construcción
del Hospital de Alta Especialidad de Zumpango, donde cobrará una renta anual de
300 millones de pesos al gobierno del estado durante 25 años, así como la
Construcción y Operación de la autopista Toluca-Atlacomulco.
Además en su sitio en internet Grupo
Higa reivindica los proyectos Estadio y Gimnasio Universitario de la
Universidad Autónoma del Estado de México, la construcción de 58 caminos en esa
entidad, el Distribuidor Vial Naucalpan-Metepec, construcción y rehabilitación
de unidades médicas en diferentes municipios, rehabilitación de jardín de
niños, “limpieza y mantenimiento del IPN” (sic), el Centro Médico del gobierno
del estado y el hospital mexiquense Adolfo López Mateos.
En 1999 Grupo Higa consiguió formar
parte del grupo de empresas que contrató la Comisión Federal de Electricidad
para el desarrollo de un proyecto identificado como LT 70 Riviera Maya, por 35
millones de dólares. Desde entonces Grupo Higa abandonó la proveeduría federal
hasta el arribo de Peña Nieto a la Presidencia.
La suma aproximada de ganancias
obtenidas durante el sexenio de Peña Nieto en el Estado de México fue de 35 mil
668 mdp.
No parece ser todo, pues los beneficios
se amplían a sus familiares. Es el caso de Transportaciones y Construcciones
Tamaulipecas, propiedad de Rolando Cantú, a quien el columnista Darío Celis y
diferentes publicaciones tamaulipecas han identificado como primo de Juan Armando,
sin que esa versión se haya desmentido.
La suerte de Rolando Cantú mejoró a
partir del 6 de mayo de 2013, con la firma en un mismo día de cuatro contratos
carreteros por 254 mdp. Un día después se le contrató por 26 mdp más, y de ahí
hasta el cierre de año consiguió más de la SCT hasta acumular un total de 591
mdp.
Los contratos y montos fueron
localizados en el POT, por lo que esa cifra corresponde a lo transparentado
hasta ahora. Sin embargo, entre los contratos no transparentes destaca la mayor
obra de infraestructura para Tamaulipas y, coincidentemente, un asunto de
interés durante el viaje a China de 2013: La construcción del puerto de
Matamoros, con una inversión estimada en mil 664 mdp, que fue asignada a la
empresa de Rolando Cantú. l
No hay comentarios.:
Publicar un comentario