México:
Así es el “camarín” de la Virgen de Guadalupe donde rezará el Papa Francisco
El
sábado 13 de febrero el Papa Francisco rezará a los pies de la Virgen de
Guadalupe en la Basílica dedicada a la Madre de Dios en la Ciudad de México. Elpapa ingresará al “camarín” o bóveda donde se conserva la tilma original
de San Juan Diego. El
camarín es un lugar en la Basílica de Guadalupe al que solo algunas personas
pueden acceder. Fue construido como una bóveda para custodiar allí la imagen, el lugar lo diseñó el arquitecto Oscar Jiménez
Gerard.
Desde
la Fe explica que el camarín o bóveda está entre el altar y la escalera que
asciende entre los ocho pisos de la Basílica de Guadalupe, su planta mide 4.15
por 2.55 metros y tiene una altura de unos 5 metros.
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El
Papa, cara a cara con la Gudalupana/ Desde la fe…, 31 de enero de 2016
El
sábado 13 de febrero el Papa Francisco se encontrará cara a cara con la Virgen
de Guadalupe, cuando ingrese al camarín donde se halla la tilma de san Juan
Diego, donde quedó estampada su sagrada imagen.
Pero, ¿qué es el camarín?
Se
trata de un espacio donde puede ser contemplada de cerca Santa María de
Guadalupe. Un espacio creado expresamente durante la construcción del templo
para acercarse a Ella con fines de culto, conservación y seguridad, ya que es
una bóveda que podría resguardar la imagen en caso de siniestro.
En
el año de 1976, al concluir la construcción del nuevo templo de adoración a la
Virgen de Guadalupe se encargaron tres proyectos para la instalación de un
mecanismo retroactor que, sin necesidad de tocarla, moviera a la Imagen, siendo
elegido el proyecto del arquitecto Oscar Jiménez Gerard, que destaca por su
simplicidad y eficiencia. Es un mecanismo
con piezas como de relojería, que han funcionado con precisión a través
de los años y con mínimo mantenimiento sigue brindando la funcionalidad
necesaria.
La
bóveda se encuentra entre el altar y la escalera que asciende entre los ocho
pisos de la Basílica de Guadalupe, su planta mide 4.15 por 2.55 metros, y tiene
una altura de 5 metros aproximadamente. A pesar que las condiciones ambientales
deben ser especiales para conservar la sagrada tilma, el camarín no cuenta con
aire acondicionado ni otro aparato que regule la temperatura en el interior. Y
es que, al estudiar las variaciones de temperatura de la bóveda, se concluyó
que, prodigiosamente, en el más crudo invierno la temperatura bajaba a 19°
centígrados y en las fechas de calor apenas subía a 22°. Por lo que se decidió
no meter aparatos de regulación climática.
La
ventilación del espacio se lleva a cabo automáticamente al funcionar el elevador
sur que actúa como un fuelle, moviendo el aire del camarín a través de una
ventila situada en uno de los muros de la bóveda.
El
camarín está protegido por una puerta de seguridad de doble combinación, a la
cual le sigue una reja con cerradura, lo que convierte a este espacio en el más
protegido del recinto mariano.
Aunque
el camarín tiene una instalación eléctrica y tres tipos de iluminación –uno que
ilumina la imagen cuando se retrae y dos para trabajo–, sólo son funcionales
cuando se ingresa y se conecta a la energía que se obtiene de un contacto de
servicio en el exterior.
Un
dato que le sorprende: las luces de alógeno que fueron instaladas para iluminar
la imagen 15 años atrás aún no se funden, señal del poco uso de las mismas.
Cuando
la Virgen cambia de posición en su sitio habitual del altar mayor de la
Basílica de Guadalupe, se acciona un pasador y el mecanismo comienza a
retrotraer la Imagen de la Virgen de Guadalupe, moviéndola de su posición al
oriente y colocándola en posición hacia el sur. De esa manera es posible verla
de cerca, como lo hará el Santo Padre Francisco.
La
Imagen no puede ser tocada ya que se encuentra protegida por un cristal dentro
de un estuche metálico. Entre quienes han tenido el privilegio de estar en el
Camarín se encuentra S. S. Juan Pablo II quien, durante su penúltima visita a
México, se manifestó profundamente conmovido y reconfortado por tener la
oportunidad de orar un instante frente a la Madre de todos los mexicanos. Al
concluir una visita, nuevamente se hace funcionar un pasador y la Imagen
regresa a su sitio en el altar -donde hay un segundo cristal- mirando al
oriente, hacia la feligresía.
En
su próxima visita a nuestro país, el Papa Francisco estará frente a frente a la
Virgen de Guadalupe, de la que es muy devoto, y a Ella le encomendará el Año
Jubilar de la Misericordia.
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