10 jun 2020

Nuevo escándalo en el Vaticano/ Fred Alvarez

Nuevo escándalo en el Vaticano/ Fred Alvarez
@fredalvarez
En la tarde- noche del viernes 5 de junio  la justicia vaticana arrestó y encarceló en el cuartel del Cuerpo de Gendarmería, al financiero italiano Gianluigi Torzi quién está acusado de "extorsión, apropiación indebida, estafa agravada y autoblanqueo de dinero, delitos para los que la Ley vaticana prevé hasta doce años de reclusión”. 
El agente inmobiliario había sido convocado a una cita a la Oficina del Promotor de Justicia del Tribunal Vaticano y, después de un largo interrogatorio -asistido en todo momento por sus abogados de confianza., se le mostró orden de arresto en su contra.
"La medida firmada por el Promotor de Justicia Gian Piero Milano y su Adjunto Alessandro Diddi - continúa el comunicado - ha sido emitida en relación con los conocidos acontecimientos relacionados con la compraventa de la propiedad londinense en Sloane Avenue, que han involucrado a una red de empresas en las que estaban presentes algunos funcionarios de la Secretaría de Estado”.

El escándalo de la compra de un inmueble de lujo en Londres con fondos reservados de la secretaría de Estado llevó a la suspensión de cinco funcionarios del Vaticano -incluido el jefe de la Autoridad de Información Financiera (AIF) Tommaso di Ruzza, y, de rebote el cese por dimisión forzada del jefe de la Gendarmería Vaticana: Domenico Giani.
Giani se vio obligado a renunciar luego de la filtración a la prensa de un comunicado interno firmado por él, con las fotos de las personas suspendidas. Entre estas, además de Di Ruzza, se encontraban otros tres laicos y un monseñor, Mauro Carlino, jefe de la oficina de información y documentación de la Secretaría de Estado, que fue durante años secretario personal del cardenal Angelo Becciu. (Véase: Se queda el Papa Francisco sin su Ángel de la Guarda. 
El caso salió a la luz pública el año pasado cuando la Secretaría de Estado intentó arrancar un crédito puente del Instituto de Obras de la Religión (IOR) para remediar uno de sus errores en Londres, sin pensar que sería el mismo IOR quien denunciaría la maniobra a la justicia vaticana, quien de inmediato ordenó un cateo en un departamento "intocable"hasta ese momento, 1 de octubre de 2019. 
La inversión de 277 millones de euros en el antiguo edificio construido para los almacenes Harrods en el número 60 de Sloane Avenue en un barrio muy elegante de Londres, comenzó en 2013 a través de Raffaele Mincione, quien lucró con la operación en la que intervinieron varias de sus sociedades. 
En sucesivos pasos, Mincione vendió su parte al Vaticano, representado por Gianluigi Torzi, quien pasó a la secretaría de Estado 30 mil de las 31 mil  acciones del proyecto, pero quedándose justamente mil acciones de voto preferente.
Según medios italianoss la supuesta extorsión de Torzi consiste en haber exigido al Vaticano 20 millones de euros por la entrega de ese paquete, imprescindible para que el Vaticano pudiese tomar el control de la transformación del inmueble de Harrods en apartamentos de lujo; empero, Torzi no obtuvo los 20 millones, pero sí una “comisión" de diez a quince millones de euros.
La acusación presentada por la fiscalía Vaticana es muy grave, y el proceso se prevé complicado.
El nuevo presidente del Tribunal del Vaticano, es un magistrado siciliano que se ha distinguido en la lucha contra las dos principales mafias -Cosa Nostra y la Ndrangheta-, y contra la gran criminalidad como fiscal jefe de Roma hasta su jubilación en mayo de 2019.
El acusado Gianluigi Torzi es un hombre de negocios italiano residente en Londres, quien fue contratado por la Secretaría de Estado para operar como intermediario financiero.
Debemos precisar que Torzi ya había sido procesado por fraude comercial por la justicia británica, que congeló sus cuentas, pero su arresto la semana pasada nadie se lo esperaba y cayó como una bomba en la Santa Sede.
Primeras reacciones....
"Creemos que esta medida es el resultado de un gran malentendido causado por declaraciones interesadas que pueden haber desviado una correcta interpretación del caso por parte de los investigadores", comentó la defensa.
"No hay duda, de hecho, de que Gianluigi Torzi permitió a la Secretaría de Estado del Vaticano recuperar una prestigiosa propiedad londinense cuyo enorme valor corría el riesgo de perderse y, posteriormente, evitó que la misma tomara caminos poco claros. Torzi nunca tuvo la intención de actuar en contra de los intereses de la Santa Sede y desde el principio de esta indagación, a través de sus defensores, ha mostrado una constante disposición hacia los investigadores para reconstruir los hechos mediante la producción de decenas de documentos, memorias y, finalmente, con el interrogatorio de ayer -el viernes 5 de junio-, que duró no menos de ocho horas, al que nuestro cliente vino especialmente desde el extranjero. Estamos seguros de que la posición de Gianluigi Torzi se aclarará pronto con el reconocimiento de su lejanía de los cargos impugnados”, dijeron loas abogados Ambra Giovene y Marco Franco.
¿Que dice el Cardenal Angelo Becciu?
Se lava las manos...
Dijo a una agencia de noticias que no conocía al acusado Gianluigi Torzi, ya que argumenta que "no era sustituto cuando sucedieron los hechos que se atribuyen (a Torzi)”.
Además, rechazó la idea de que el arresto de Torzi causaría un “terremoto” de más alcance en la curia, calificándolo de “una fantasía periodística”.
CNA, agencia en inglés del Grupo ACI-prensa ( Aciprensa.com) recuerda que el 4 de noviembre de 2019 informaron que en 2015 el Cardenal Becciu parece haber intentado ocultar en los balances del Vaticano casi 200 millones en préstamos relacionados con la transacción, al cancelarlos en contra del valor de la propiedad en Londres, una maniobra contable prohibida por políticas financieras aprobadas por el Papa Francisco en 2014.
“Ese aparente intento de ocultar los préstamos fue detectado por la Prefectura para la Economía, en ese entonces dirigida por el Cardenal George Pell. Altos funcionarios de la Prefectura de Economía le dijeron a CNA en 2019 que el Cardenal Becciu le había dicho al Cardenal Pell que estaba “interfiriendo en los negocios soberanos” al investigar los tratos de la Secretaría con el banco suizo BSI.
BSI fue cerrado por las autoridades bancarias suizas en 2017, luego de una investigación que encontró violaciones sistemáticas de las protecciones contra el lavado de dinero.
Y como sabemos hubo una maniobra para quitar al Cardenal Pell quien tuvo acusaciones severas que lo obligaron a dimitir en el cargo, al final fue exonerado..
(El caso de George Pell, para un filme de Netflix..
Hay muchas cosas que serán ventiladas..., daremos seguimiento....




No hay comentarios.:

César Huerta, de la revista Polemón.

27 de diciembre César Huerta, de la revista Polemón.  Y Presidenta, es diciembre y yo sé que estamos en un modo como “navideño”, con amor y ...