5 de junio: siete empates, tres definidas, dos en duda…(de 12)/Salvador
García Soto
El Universal, 26 de mayo de 2016
A
una semana de que concluyan las campañas electorales en 12 estados que
renovarán gubernaturas, caracterizadas por una alta competencia y un tono
elevado de descalificación entre candidatos y partidos, hay incertidumbre sobre
los resultados por lo cerrada que se percibe la contienda en la mayoría de las
entidades a sólo nueve días de las votaciones. Así, según sondeos internos de
los principales partidos y de varias encuestadoras, siete estados están en
estos momentos en “empate técnico”: Veracruz, Oaxaca, Tlaxcala (a tercios),
Quintana Roo, Tamaulipas, Durango y Zacatecas; dos están en duda por la ligera
ventaja de un partido, Aguascalientes y Chihuahua, y sólo tres entidades,
Hidalgo, Sinaloa y Puebla, aparecen decididas por la amplia ventaja del
candidato puntero.
En
todas las entidades, incluida Baja California que sólo renueva alcaldías y
diputados locales, hay una constante en los sondeos: un alto nivel de
“indecisos” (de entre 20 y 30%) conformado por personas que al ser encuestadas
no quisieron revelar el sentido de su voto bajo el argumento de que aún no
sabían por qué partido o candidato votarían.
Los
siete comicios que aparecen empatados registran diferencias de 2 a 3 puntos en
las encuestas (dentro del margen de error), por lo que todo se definiría el día
de los comicios, de acuerdo a dos factores que pueden resultar decisivos: el
nivel de participación de los votantes (que si es alto suele beneficiar a la
oposición y si es bajo favorece al PRI) y la capacidad de movilización de las
estructuras partidistas durante la jornada de votación. En ese sentido, en tres
de los estados mencionados la disputa es entre PRI y la alianza PAN-PRD
(Veracruz, Oaxaca y Quintana Roo), en dos entidades la contienda se cierra
entre PRI y PAN (Durango y Tamaulipas), mientras que en Zacatecas la disputa es
entre PRI y Morena, y en Tlaxcala el empate es a tercias entre PRI, PAN y PRD.
Los
dos estados que aparecen como “cerrados” o en “duda” manejan distintas
diferencias, según el partido que ordenó la encuesta. En Chihuahua, por
ejemplo, el PRI y algunos sondeos, como el de EL UNIVERSAL, manejan una ventaja
de hasta nueve puntos a favor del abanderado priísta, Enrique Serrano, que
llevaría 44% contra 35.6% del candidato panista, Javier Corral. Sin embargo, en
los sondeos internos del CEN del PAN, se afirma que la “elección se cerró” y se
reconoce sólo una ventaja de cinco puntos del PRI con un alto porcentaje de
indecisos en las encuestas.
Aguascalientes
es otro estado donde prevalece la guerra de encuestas que adelanta una votación
muy apretada. Mientras el PRI asegura que la ventaja de su candidata Lorena
Martínez es de hasta cinco puntos, en el PAN, según sus encuestas, la ventaja
de su candidato, Martín Orozco, es de tres puntos arriba de la priísta.
En
ese escenario de incertidumbre, donde todo parece que se definirá hasta el
último momento y en donde los últimos siete días que le restan a las campañas
pueden resultar decisivos —sobre todo porque arrecia el golpeteo y la guerra
sucia para tratar de desacreditar al adversario y darle la vuelta al apretado
marcador—, sólo tres entidades se reconocen definidas por los mismos partidos:
en Sinaloa la ventaja del PRI parece irreversible con su candidato Quirino
Ordaz, al igual que en Hidalgo, donde aventaja cómodamente Omar Fayad, mientras
en Puebla el candidato del PAN, Antonio Gali, se ve como el puntero
indiscutible.
Así
que, dirían los clásicos, en más de la mitad de las gubernaturas en disputa el
próximo 5 de junio la moneda está en el aire; como puede ocurrir que las
alianzas opositoras se alcen con el triunfo en varios estados, también puede
ser que el PRI termine ganando la mayoría de entidades; veremos a quién
favorece el duelo de estructuras partidistas y si, en la semana que resta para
los comicios, no ocurren situaciones extraordinarias que modifiquen lo cerrado
de esas contiendas. Por lo pronto, hay dos signos que marcan el desarrollo de
las últimas elecciones antes de la sucesión presidencial de 2018: la fuerte
competencia y el tono sucio de las campañas.
NOTAS
INDISCRETAS… En Baja California el PRI encabeza las preferencias en las
principales alcaldías en disputa. En Tijuana, con René Mendivil, y en Mexicali
con Antonio Magaña. Se aproxima un revés para el gobernador panista, Francisco
vega, en los comicios locales… La versión cobra fuerza en los altos círculos
del gabinete: que en junio, pasando las elecciones, habría relevo en la
Coordinación de Comunicación Social de la Presidencia. Eduardo Sánchez, dice la
versión, dejaría el cargo y la vocería a Otto Granados, actual subsecretario de
Educación. Y a Sánchez lo ubican en un área importante del sector turismo.
¿Será?.. Los dados mandan Serpiente. Caída libre.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario