21 abr 2011

Listo el proyecto de código procesal penal

Plantea FCH modificaciones a Código Penal
" En breve será enviado al Poder Legislativo para su revisión, dictamen y votación." Poiré
Alista Ejecutivo envío del proyecto al Congreso para su votación
Nota de Antonio Baranda
Reforma 21 abril 2011.- Alejandro Poiré, secretario técnico del Consejo de Seguridad Nacional, adelantó que en breve será enviado al Congreso el proyecto de Código "tipo" de Procedimientos Penales Federales, norma clave para aterrizar la reforma de juicios orales.
"Lo más importante es que ya se cuenta con el proyecto (...) que es la columna vertebral y que no sólo es vanguardista y preciso en términos jurídicos, sino que se ha desarrollado dentro de un amplio proceso de participación de instancias de la sociedad civil y representantes de los tres Poderes de la Unión.
"En breve será enviado al Poder Legislativo para su revisión, dictamen y votación", anunció Poiré en un artículo titulado "Democracia y Sistema de Justicia Penal", subido al nuevo blog de la Presidencia de la República.
El documento, elaborado por la Secretaría Técnica del Consejo Coordinador para la Implementación de la Reforma Penal, servirá de modelo a entidades que aún no han adecuado sus normas a la reforma constitucional de 2008.
Según documentos oficiales, sólo nueve estados han reformado sus códigos y leyes secundarias para adoptar el nuevo modelo de justicia: Baja California, Chihuahua, Durango, Estado de México, Morelos, Nuevo León, Oaxaca, Yucatán y Zacatecas.
Desde julio de 2010, representantes de los Poderes de la Unión y organismos civiles impulsores de los juicios orales recibieron de la Secretaría un primer anteproyecto de Código, que constaba de 581 artículos y dividía el proceso penal en un total de cinco etapas.
Sin embargo, no generó ningún consenso.
Poiré reconoció la necesidad de acelerar la implementación de la reforma integral para dejar "todo listo" en el 2016, año límite para echar a andar el sistema acusatorio-oral en todo el País.
"Los avances al día de hoy indican que se debe acelerar (la instauración) para que el nuevo sistema de justicia penal sea implementado en tiempo y forma", planteó.
El nuevo modelo de justicia, sostuvo, permitirá acabar con aquellas situaciones "indignantes" como la que plasmaron los abogados Layda Negrete y Roberto Hernández en el documental "Presunto Culpable", pues los ciudadanos tendrán mayor certidumbre sobre los procesos, y los servidores públicos más facultades y atribuciones.
Presumió que la Federación mantiene un "paso firme" en esa materia, aunque lamentó que las entidades avancen a ritmos diferentes. Tan solo la PGR, dijo, lleva un avance de 65 por ciento en la normatividad; 70 por ciento en planeación; 40 por ciento en capacitación y 60 por ciento en infraestructura y tecnología.
Consideró que para poner en funcionamiento "total" el nuevo sistema, que se basa en la oralidad de los juicios y el uso métodos alternos de solución de conflictos, se requiere de nueva infraestructura, una intensa y profunda capacitación, pero sobre todo el fortalecimiento de la cultura de la legalidad.
Grupo Reforma publicó en marzo que a 32 meses de la publicación de la reforma, sólo 7 entidades operan el nuevo modelo; 4, están en la etapa previa a la "entrada en vigor"; 14, en "planeación", y 7 más, en "fase inicial".
Así lo dijo
"Los avances al día de hoy indican que se debe acelerar (la instauración) para que el nuevo sistema de justicia penal sea implementado en tiempo y forma".
Alejandro Poiré
Secretario técnico del Consejo de Seguridad Nacional
El texto  en el Blog de Los ¨Pinos.
Democracia y Sistema de Justicia Penal/Alejandro Poiré Romero
Durante la transición a la democracia en México el énfasis se puso en las instituciones electorales. Faltó una reforma estructural, es decir, profunda e integral, a otras instancias que están lejos del terreno de los votos pero que inciden directamente en la vida de los ciudadanos. Me refiero a las instituciones encargadas de la seguridad pública y la procuración y administración de justicia.
Al inicio de la administración del Presidente Calderón se emprende un esfuerzo integral por reformar estructuralmente el sistema de seguridad y de justicia de nuestro país. Un paso decisivo en este sentido es la reforma al sistema de justicia penal publicada en el Diario Oficial de la Federación el 18 de junio de 2008. Es una reforma que nos permitirá acabar con las situaciones que nos indignan como sociedad y que plasmaron claramente Layda Negrete y Roberto Hernández en “Presunto Culpable”. Con este nuevo sistema de justicia los ciudadanos tendrán mayor certidumbre sobre los procesos, facultades y atribuciones de los distintos servidores pues los juicios son orales y públicos. Para poner en funcionamiento total este nuevo sistema de justicia se requerirá de nueva infraestructura, una intensa y profunda capacitación, pero sobre todo el fortalecimiento de la cultura de la legalidad.
Tenemos hasta el 2016 para dejar todo listo y los avances al día de hoy indican que se debe acelerar para que el nuevo sistema de justicia penal sea implementado en tiempo y forma. Las entidades federativas van avanzando a diferentes ritmos y el Gobierno Federal mantiene un paso firme en el cumplimiento de las metas institucionales. La Procuraduría General de la República lleva un avance del 65% en la normatividad, 70% en planeación, 40% en capacitación y 60% en infraestructura y tecnología. Sin embargo, lo más importante es que ya se cuenta con un Proyecto de Código Federal de Procedimientos Penales, que es la columna vertebral y que no sólo es vanguardista y preciso en términos jurídicos sino que se ha desarrollado dentro de un amplio proceso de participación de instancias de la sociedad civil y representantes de los tres Poderes. En breve será enviado al Poder Legislativo para su revisión, dictamen y votación.
En definitiva, la transformación del sistema de justicia es la inversión más importante a largo plazo. El día que en cada rincón del país la gente sepa que la aplicación de la ley no se negocia, ni la justicia es selectiva o azarosa, todos nos sentiremos mucho más seguros. Es una inversión de la cual todos, como sociedad, saldremos ganando en el futuro.

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