Lombardi: Primer año del Papa Francisco es un gran impulso para una Iglesia en
camino
VATICANO,
12 Mar. 14 / 10:42 am (ACI).- Se cumple mañana, 13 de marzo, el primer
aniversario de la elección del Papa Francisco. En estos doce intensos meses, el
Papa venido del fin del mundo y que pide que recen por él, comenzó un nuevo
método de trabajo, que con paso lento pero firme, atrajo una renovada atención
hacia los temas eclesiales, también de parte de quienes no están cerca de la
Iglesia.
Una
de las personas más allegadas al Pontífice, en el trabajo cotidiano, es el
director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, padre Federico Lombardi SJ,
quien en una entrevista a Radio Vaticano reflexionó sobre este año de “gran
impulso para una Iglesia en camino”.
“Lo
principal de este primer año es ciertamente la gran atención, la gran atracción
de la gente -digo la gente, por no decir solamente los católicos practicantes,
sino todas las personas del mundo– la gran atención por este Papa, por su
mensaje. Es algo que pienso y espero que se haya arraigado muy profundamente en
el corazón de las personas, que se sintieron tocadas por una palabra de amor,
de atención, de misericordia, de cercanía, de proximidad, gestos mediante los
cuales, el amor de Dios llega a través del hombre, el Papa”, expresó.
“Mencionaría
-agregó- algunos episodios, que son para mí particularmente tocantes a lo largo
de este año. Naturalmente la primera aparición en el balcón de la basílica de
San Pedro, con todo aquello que recordamos y que representó, es inolvidable.
Después, recuerdo el lavatorio de los pies a los jóvenes en la cárcel de
menores, la tarde del Jueves Santo.
“Recuerdo
el viaje a Lampedusa, con su gran intensidad de cercanía a las personas más
olvidadas y abandonadas y a aquellos que murieron en el viaje de la esperanza y
del dolor hacia un futuro mejor.
“Recuerdo
la Jornada Mundial de la Juventud en Río, el gran encuentro de la juventud
mundial, en particular latinoamericana, con el Papa en su continente. Recuerdo
Asís.
Recuerdo
el documento programático –digamos así– la Exhortación apostólica, Evangelii
Gaudium, en la que verdaderamente percibimos el corazón del Papa, articulado de
una manera muy clara, muy amplia, como programa de su Pontificado. Y luego el
Consistorio del mes de febrero. Estas etapas nos dicen cuán intenso fue este
año y cuántos aspectos fueron tocados, cuántos encuentros se realizaron”.
-El
Papa quiere una Iglesia que salga a las calles, habla de reformas estructurales
necesarias. ¿Cómo está cambiando la Iglesia?
-Veo
a la Iglesia verdaderamente como un pueblo en camino. Ésta es la cosa más
característica: un sentido de gran dinamismo. El Papa dio un gran impulso y
camina con una Iglesia que busca la voluntad de Dios, que busca su misión en el
mundo de hoy por el bien de todos, yendo verdaderamente hacia las periferias,
hacia los confines del mundo. El Papa habla a menudo de los pastores que están
adelante, dentro, detrás del rebaño, para ayudarlo a caminar, a encontrar su
camino.
Me
parece que él es verdaderamente así e invita también a toda la Iglesia a
ponerse en camino. Hay un sentido fuerte de dinamismo, que se percibe en
particular en el itinerario sinodal, este largo camino de algunos años, en los
que la Iglesia reflexiona sobre un punto central de la experiencia humana y
cristiana, que es justamente la familia”.
-El
Papa Francisco mira hacia los que están lejos y sacude mucho a los cercanos...
-Ciertamente,
porque Dios mira a todos. Así logró hacer comprender que el interés de Dios, su
mirada, es para todas sus criaturas, para todas las personas del mundo y no
olvida a nadie. Éste es un punto muy importante y -evidentemente- no lo inventó
el Papa Francisco. Sin embargo, él logró darle un sentido muy fuerte y
muchísimas personas lo comprendieron.
Por
lo tanto, las manifestaciones de atención, que provienen de sedes no
habituales, de la prensa, significan que su mensaje ha llegado. Y por supuesto,
todos tenemos que estar en camino, incluso las personas que tal vez se sentían
más tranquilas o más estables, estabilizadas en su estado, se sienten
implicadas en esta gran misión. Ciertamente, ello también tiene un aspecto
positivo”.
-¿Qué
imágenes significativas recuerda del primer año de Pontificado?
-Sobre
todo pienso en las audiencias generales de los miércoles: el Papa que pasa en
medio de las personas, el Papa que saluda, sonríe, encuentra y, en particular,
que se detiene con los enfermos. Me parece muy significativa esta opción
especifica suya, la de saludar en primer lugar a los enfermos, después de
terminar su catequesis, bajando del atrio y yendo hacia ellos. Los que sufren y
los más débiles tienen una prioridad en el corazón del Papa y de la Iglesia,
porque tienen una prioridad en el Evangelio”.
-¿Qué
significa ser el portavoz del Papa Francisco?
-Me
parece muy hermoso el hecho de que el protagonista es el Papa mismo, es decir,
el que habla y despierta el interés de la gente con sus palabras, el que
impacta con sus formulaciones. Es él mismo, por lo tanto no necesita una mediación
particular. Ésta me parece una experiencia muy positiva. Es lo que siempre
desee un poco: que el Papa llegue directamente sin distancias y sin obstáculos
al corazón de la gente, con sus palabras.
El
portavoz -llamémoslo así- el director de la Oficina de Prensa, da las
informaciones, que sin embargo, son más informaciones de complemento, de
carácter organizativo, de decisiones que se toman y que son también
importantes, pero la que es la palabra del Papa para la gente, para el mundo,
para la Iglesia llega directamente. Esto me parece muy hermoso y fundamental”.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario