13 feb 2022

¿Qué se juega la OTAN en Ucrania?

¿Qué se juega la OTAN en Ucrania?/Luis Simón es director de la oficina de Bruselas del Real Instituto Elcano y profesor de Relaciones Internacionales en la Vrije Universiteit Brussel.

El. Mundo, Miércoles, 09/Feb/2022;

La crisis de Ucrania ha vuelto a poner a Rusia en el punto de mira de Occidente. El Kremlin mantiene a más de 100.000 efectivos militares en la frontera de Ucrania desde hace meses y ha venido aumentando la presión recientemente, llevando al presidente de Estados Unidos Joe Biden a afirmar que cree que «Putin hará algo».

Si bien el demócrata ha advertido de que no enviaría tropas unilateralmente para defender a Ucrania ante una posible invasión rusa, Washington ha redoblado sus esfuerzos de suministro de armas a Kiev y ha avisado al Kremlin de que una acción militar no sólo acarrearía nuevas sanciones diplomáticas y económicas, sino que además llevaría a EEUU a reforzar su presencia militar en Polonia, Rumanía y otros países aliados del Este, cada vez más alarmados por el revisionismo ruso.

Otros miembros de la OTAN (entre ellos Reino Unido, Países Bajos, España o Francia) han anunciado también en las últimas semanas despliegues militares adicionales en Rumanía, Bulgaria y el mar Negro. Además, Reino Unido, Polonia y Ucrania están negociando un partenariado trilateral de seguridad. Por su parte, la Alianza Atlántica ha tendido la mano a Rusia e insistido en la importancia de una salida a la crisis basada en el diálogo y la diplomacia, llegando a poner sobre la mesa una oferta de negociación a Rusia en materia de desarme. La esperanza es que esta estrategia de palo y zanahoria (basada, por un lado, en la amenaza de sanciones y despliegues militares aliados en Europa del Este y, por otro lado, en el diálogo y la distensión) disuada a Putin de intervenir militarmente en Ucrania.

La principal duda a día de hoy es si ese «hacer algo» de Putin seguirá limitándose al uso de la amenaza militar y los ataques híbridos (ciberataques, desinformación, chantaje energético, etcétera) como elementos de presión política y diplomática sobre Kiev (se supone que el escenario óptimo para el Kremlin es controlar Ucrania sin recurrir al uso de la fuerza); si dará el paso hacia una incursión militar limitada geográficamente al este del país; o si incluso iría al extremo de una invasión en toda regla. Diversos expertos especulan sobre las probabilidades de cada uno de esos escenarios y sus posibles implicaciones para la OTAN y la seguridad europea. Además, se abre un debate más amplio sobre el futuro de la relación de la organización con Rusia (y con Ucrania), que deberá abordarse con mayor perspectiva en la cumbre que la Alianza Atlántica celebrará en Madrid a finales de junio de este año. Más allá de esas cuestiones, de rabiosa actualidad, cabe abordar la pregunta de fondo que planea sobre todas ellas: ¿qué se juega Occidente en Ucrania?

El relato de que hay cierta asimetría de intereses entre Rusia y EEUU/Occidente parece estar relativamente extendido. El propio Obama ya indicó hace unos años que Rusia tenía un interés «central» en Ucrania, y EEUU un interés más bien «periférico». Ciertas voces en EEUU y Europa Occidental advierten también de que cualquier acción militar por parte de Occidente en Ucrania no haría sino echar leña al fuego, e insisten en que cualquier sentimiento de solidaridad democrática con Ucrania no debe comprometer el interés material de estadounidenses y europeos en la estabilidad del viejo continente. Esto, sin embargo, implicaría confiar en que tras una hipotética victoria en Ucrania, Rusia se daría por satisfecha, lo cual a su vez revertiría en una relación predecible (e incluso amigable) entre Moscú y la OTAN, lo cual no deja de ser una apuesta aventurada.

Independientemente de que uno se acoja al relato de la asimetría de intereses o al de que el realismo debe pasar por encima de cualquier ilusión, la conclusión parecería ser la misma: la seguridad e independencia de Ucrania no constituyen un interés fundamental para Occidente. Pero, ¿hasta qué punto es esto cierto?

Desde una perspectiva geoestratégica, una Ucrania independiente actuaría como una suerte de escudo para el perímetro defensivo de la OTAN en Europa, separando a Rusia de Europa Central (Eslovaquia, Hungría y sur de Polonia) y de la península balcánica (en combinación con Moldavia). Si Kiev cayese en la órbita geopolítica rusa, no digamos ya si avanzase eventualmente hacia una alianza estratégica con Moscú (al margen las posibles modalidades), la disuasión y la defensa en el flanco este de la OTAN devendrían considerablemente más complicadas y costosas. De repente, todo el espacio continental que va del mar Báltico al Negro quedaría expuesto, requiriendo una importante inversión adicional y sostenida en el tiempo de recursos militares aliados en aras de garantizar la disuasión frente a la amenaza rusa en Europa del Este. El progresivo alineamiento de Lukashenko con Putin y el espectro del despliegue de fuerzas rusas en Bielorrusia no harían sino agravar este problema. El propio Biden parece haber interiorizado esta lógica, si bien implícitamente, al advertir que una invasión rusa de Ucrania llevaría a EEUU a desplegar fuerzas adicionales en Europa del Este.

La existencia de una Ucrania independiente es de hecho uno de los fundamentos de la arquitectura de seguridad europea de la posguerra fría. Dejar a Ucrania caer implicaría abrir en canal el flanco oriental europeo, dejando a Occidente en peores condiciones a la hora de lidiar con el revisionismo geopolítico ruso. Esto no debe preocupar sólo a los países aliados en Europa Central y del Este, que se verían afectados de forma más directa, sino también a aquellos aliados que tienen otras prioridades (como EEUU, que mira a China, o España, Italia y Francia, que miran al sur), que podrían verse relativamente comprometidas por la exigencia de defender una frontera considerablemente más grande y compleja en el Este. En última instancia, una Ucrania independiente es una de las formas más eficientes y económicas de garantizar la seguridad europea.


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