"Quiero despedirme aquí, entre estas columnas que respiran cultura, antes que en una sala de juicios". El exmagistrado de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón se dirigió así a la audiencia que le ha acompañado este lunes en el Círculo de Bellas Artes de Madrid durante la presentación del libro La fuerza de la Razón, una entrevista que le hizo el escritor Manuel Rivas. El Tribunal Supremo juzgará a Garzón por un presunto delito de prevaricación en la investigación de los crímenes del franquismo.
El juez se siente condenado aunque, preguntado por esta cuestión respondió: "No depende de mí, ni siquiera de quienes lo van a decidir en primera instancia". Sin embargo, no considera que si situación sea injusta. "Injusticia es lo que ocurre ahora en Japón o en Libia. El que se me juzgue a mí es un síntoma de que soy un ciudadano más", dijo.
En un acto muy emotivo, al que han acudido unas 500 personas, Garzón estuvo arropado por varios magistrados de la Audiencia Nacional como Teresa Palacios, Javier Martínez Lázaro, Ángela Murillo, José Ricardo de Prada, Clara Bayarri o Santiago Pedraz. También acudieron fiscales como José Gringa y Lola Delgado, y el juez del Supremo José Antonio Martín Pallín, que pertenece a la sala que lo va a juzgar. Entre los asistentes figuraban además el diputado de IU, Gaspar Llamazares, y el exdirigente comunista Santiago Carrillo.
En su despedida, Garzón recordó el final de su libro y dedicó sus "últimas palabras" a la "justicia, la verdad y la reparación de la víctimas, que a veces son denostadas, culpabilizadas o tratadas selectivamente". Para el ex magistrado de la Audiencia Nacional, "todo esfuerzo es poco para conseguir una verdadera reparación". Y apostilló: "Las víctimas no muestran el camino que debemos seguir si queremos recuperar nuestra dignidad porque ellas nunca la perdieron".
Fuente El País:
En un acto muy emotivo, al que han acudido unas 500 personas, Garzón estuvo arropado por varios magistrados de la Audiencia Nacional como Teresa Palacios, Javier Martínez Lázaro, Ángela Murillo, José Ricardo de Prada, Clara Bayarri o Santiago Pedraz. También acudieron fiscales como José Gringa y Lola Delgado, y el juez del Supremo José Antonio Martín Pallín, que pertenece a la sala que lo va a juzgar. Entre los asistentes figuraban además el diputado de IU, Gaspar Llamazares, y el exdirigente comunista Santiago Carrillo.
En su despedida, Garzón recordó el final de su libro y dedicó sus "últimas palabras" a la "justicia, la verdad y la reparación de la víctimas, que a veces son denostadas, culpabilizadas o tratadas selectivamente". Para el ex magistrado de la Audiencia Nacional, "todo esfuerzo es poco para conseguir una verdadera reparación". Y apostilló: "Las víctimas no muestran el camino que debemos seguir si queremos recuperar nuestra dignidad porque ellas nunca la perdieron".
Fuente El País:
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