Gana 'Reina' amparo contra extradición

Gana 'Reina' amparo contra extradición

Considera juez que EU pretende iniciarle un proceso que es prácticamente el que se le siguió en México por el buque Macel

Nota de Abel Barajas

Reforma on line12 enero 2012.- Un juez federal de esta ciudad otorgó un amparo a Sandra Ávila Beltrán, "La Reina del Pacífico", contra su extradición a Estados Unidos, la cual parece cada vez más lejos de lograr para las autoridades.

Jesús Alberto Chávez Hernández, juez décimo tercero de Distrito de amparo en materia penal del Distrito Federal, concedió la protección de la justicia a Ávila, tras concluir que los estadounidenses pretenden juzgarla por hechos por los cuales ya fue procesada e incluso absuelta en México.

El juez refirió que el proceso que le pretenden iniciar en Estados Unidos es prácticamente el mismo que tuvo en México por el caso del buque Macel, asegurado en diciembre de 2001 frente a las costas de Colima, con 9.5 toneladas de cocaína.

En su fallo, que Hernández dio a conocer en una tarjeta informativa, precisó que la Secretaría de Relaciones Exteriores debe emitir una nueva resolución sobre esta extradición, pero esta vez debe establecer que "La Reina" no puede ser juzgada dos veces por los mismos hechos, lo que prácticamente obliga a la Cancillería a negar su entrega al vecino país.

La determinación del juzgador todavía es recurrible por la Procuraduría General de la República (PGR) ante un tribunal colegiado penal y, hasta en tanto esa autoridad no se pronuncie, el fallo no surtirá efectos.

El juez explicó que Ávila Beltrán es reclamada por la Corte Federal para el Distrito Sur de Florida para juzgarla por asociación delictuosa, conspiración para poseer 100 kilos de cocaína con intención de distribuirlos, e importar diversos cargamentos de dicha sustancia a Estados Unidos.

Los hechos de esa acusación ocurrieron de enero de 1999 a marzo de 2004, periodo en el que la mujer formó parte de una organización dedicada a la adquisición y transporte de grandes cantidades de cocaína desde Colombia a Estados Unidos.

Entre las pruebas que presume tener el Departamento de Justicia de Estados Unidos, está el testimonio de uno de los integrantes de esa banda criminal, quien señaló que Ávila Beltrán coordinaba la distribución de cocaína en México para luego llevarla a ese país.

El 14 de septiembre de 2001 la Agencia Antidrogas estadounidense (DEA, por sus siglas en inglés) interceptó una llamada telefónica en la que Ávila Beltrán y su entonces pareja sentimental, el colombiano Juan Diego Espinoza, "El Tigre", cobraban un adeudo por los 100 kilos de cocaína que habían suministrado en Chicago, Illinois, a un traficante que luego se hizo colaborador de esa dependencia.

Los estadounidenses afirman en su petición de extradición que en ese mismo año "La Reina" viajó a Colombia para negociar, junto con otros cómplices, el embarque de más de 9 mil kilos de cocaína a México, con la intención de introducirlos a Estados Unidos, que fueron encontrados el 21 de diciembre de 2001 en el buque Macel.

El juez Chávez Hernández expuso que amparó a "La Reina" porque el artículo 6 del Tratado de Extradición con Estados Unidos prohíbe conceder la entrega de quien haya sido sometido a proceso por los mismos hechos en el país requerido, en concordancia con el Artículo 23 Constitucional que establece que: "Nadie puede ser juzgado dos veces por el mismo delito", un principio que en latín se conoce como non bis in indem.

"Contrario a lo sostenido por la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), resulta imposible afirmar que los hechos relacionados con las más de 9 toneladas de cocaína (...) no serían materia del juicio extranjero por el que las autoridades estadounidenses reclaman a la quejosa en extradición, al ser evidente que el transporte de ese cargamento es el centro de la acusación formal (indictment) que existe en la Unión Americana contra Ávila Beltrán", sentenció el juez.

"No puede sostenerse válidamente que los hechos relacionados con esa cantidad de narcótico no son objeto de la causa penal instruida en México contra aquélla, cuando prácticamente la totalidad de las pruebas en que se sustentaron tanto la orden de aprehensión como el auto de formal prisión dictados contra la quejosa en este último proceso se refieren indudablemente a tales acontecimientos".

Chávez Hernández agregó que por tratarse de un tema de tráfico de drogas, el acuerdo de extradición firmado por la Cancillería tiene un error, pues es un delito que México debe considerar como delincuencia organizada y no como asociación delictuosa, como lo transcribió la autoridad al trasladar a nuestra legislación la figura delictiva estadounidense.

La Cancillería explicó en su acuerdo que Ávila Beltrán no sería juzgada por los mismos hechos, pero el juez sostuvo que la extradición claramente especifica que la acusación contra ella abarca de 1999 al 2004, periodo en el que ocurre el aseguramiento del Macel, la compra de bienes y los depósitos bancarios que fueron materia del juicio en nuestro país.

Sin embargo, el impartidor de justicia estimó que la SRE incorrectamente identificó estos hechos como la "participación" por la que "específicamente" se le sometió a proceso en México, cuando en realidad en ambos países los delitos en cuestión se consideran de consumación permanente.

"Al final, la imposibilidad para conceder la extradición de la quejosa se determina en la medida que en nuestro país no podría instaurarse contra la quejosa un proceso distinto por el delito de delincuencia organizada, con base en el 'acuerdo ocurrido en junio de 2001', dado que se trata de la misma conducta materia de la referida causa penal", concluyó el juzgador.

Con base en estos argumentos, el juez concedió la protección constitucional "de manera lisa y llana" a "La Reina", por lo que la SRE deberá dejar insubsistente la resolución dictada el 12 de agosto de 2011, en la que se acordó extraditar a la reclamada.

Al mismo tiempo, Chávez Hernández ordenó a la dependencia a cargo de Patricia Espinosa emitir otra resolución ciñéndose a los lineamientos precisados, en relación al principio de que nadie puede ser juzgado dos veces por el mismo delito.

De cuatro litigios que tenía pendientes Ávila, desde su captura en 2007, hoy sólo le restan esta extradición y un juicio en México por lavado de dinero que, según sus abogados, está basado en los mismos hechos por los cuales ya fue absuelta en el caso del buque Macel.

"La Reina" está recluida en el penal federal de El Rincón, en el Estado de Nayarit.

Hora de publicación: 12:12 hrs.