El empresario Carlos Slim criticó la postura de EE UU ante el problema del narcotráfico, rechazó que el conflicto central esté en México y que en aquel país sólo haya narcomenudeo, y aseguró que gran parte de la violencia desatada por el crimen organizado es producto de los estadunidenses: “están armando a todo el mundo con artefactos muy sofisticados”.
En el encuentro que duró alrededor de tres horas, Slim Helú señaló que el gobierno del presidente Felipe Calderón está atendiendo “adecuadamente” la lucha contra el crimen organizado, y consideró que muchos de los problemas que hay “pueden ser coyunturales”.
Criticó que las instituciones de seguridad pública mexicana hayan combatido un tiempo el secuestro y luego lo hayan descuidado, aunque reconoció que “ahora existe nuevamente el compromiso de volverlo a atender”.
Sin embargo, las observaciones más agudas del presidente de Grupo Carso fueron en contra del gobierno de Washington y la postura marginal que ha adoptado frente al grave problema que representa esa actividad. “Preocupa mucho la postura estadunidense, cuando ese país está armando a todo el mundo y con armas muy sofisticadas”.
Consideró “inexplicable” que la delincuencia atraviese la frontera con EE UU “y allí no pase nada”, a pesar de que la droga mueve más de mil millones de dólares diarios.
Criticó que las instituciones de seguridad pública mexicana hayan combatido un tiempo el secuestro y luego lo hayan descuidado, aunque reconoció que “ahora existe nuevamente el compromiso de volverlo a atender”.
Sin embargo, las observaciones más agudas del presidente de Grupo Carso fueron en contra del gobierno de Washington y la postura marginal que ha adoptado frente al grave problema que representa esa actividad. “Preocupa mucho la postura estadunidense, cuando ese país está armando a todo el mundo y con armas muy sofisticadas”.
Consideró “inexplicable” que la delincuencia atraviese la frontera con EE UU “y allí no pase nada”, a pesar de que la droga mueve más de mil millones de dólares diarios.
Subrayó que EE UU es el mayor mercado consumidor, por lo que es inconcebible que el problema del narcotráfico a gran escala esté en México y en EE UU sólo haya narcomenudeo; dijo que el problema de seguridad es “coyuntural” y que el gobierno “lo atiende adecuadamente”.
Sobre el tema de los secuestros, dijo que el problema se había atendido muy bien hace unos años, pero se “había descuidado últimamente”. Pero que “ahora existe nuevamente el compromiso del gobierno de volverlo a atender”.
Destacó el hecho de que la sociedad civil pusiera en marcha un observatorio ciudadano para dar seguimiento a las acciones.
Respecto de su opinión en cuanto a una posible legalización de las drogas, aseguró que esa será una decisión que deberán tomar países con altos consumos, refiriéndose nuevamente a EE UU.
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