Gobierno de Quirino Ordaz, sin proyectos de obra pública

Gobierno de Quirino Ordaz, sin proyectos de obra pública y con trabajos inconclusos

Miriam Ramírez/

Rio Doce.., 13 marzo, 2017

Han transcurrido dos meses y medio del gobierno de Quirino Ordaz Coppel y en el despacho de la Secretaría de Obras Públicas no hay grandes proyectos de infraestructura. O por lo menos, aún no se mencionan.

Sin dar cifras, sin proporcionar datos relevantes, Osvaldo López Angulo, titular de la Secretaría, se muestra sigiloso, titubea de vez en cuando, pero se mantiene firme en no hablar de más.

El nuevo funcionario responsable de la infraestructura en Sinaloa asegura que los próximos meses se podría concluir un banco de proyectos para entonces gestionar recursos públicos y comenzar la obra pública, por allá a mediados de mayo.

Lo que sí tiene la Secretaría de Obras Públicas es una amplia lista de obras inconclusas y entrampadas que le heredó la administración de Mario López Valdez, pero López Angulo tampoco se atreve a profundizar en esos temas.

El ex director del Desarrollo Urbano Tres Ríos durante los últimos tres años de López Valdez, parece minimizar los proyectos pendientes, las obras a medias y principalmente, las revelaciones de corrupción en la obra pública que admitió su antecesor, José Luis Sevilla Suárez.

Días antes de irse, Sevilla Suárez, ex secretario de Obra Pública, reveló ante diputados del Congreso local que la asignación de obras se dio por compadrazgos, los proyectos de construcción no tenían planeación, las empresas ganaban obras vía telefonazo y predominaba una deficiente supervisión en la calidad de la obra pública. Pero para López Angulo estos temas son cosa del pasado.

La indicación, dice, es apegarse a la ley.

—¿Cómo le van a garantizar a la ciudadanía que no se cometerán actos de corrupción?

—Las instrucciones que nos han dado han sido tajantes, trabajar apegados a ley y evitar todo tipo de prácticas de corrupción. Nos van a estar midiendo nuestro trabajo, yo creo que apegados a la ley nos vamos a evitar todo tipo de actos de corrupción y la misma sociedad será quien mida ese actuar. Ya el actuar de la administración pasada fue el pasado, nosotros tenemos la instrucción de que la obra sea repartida con todo el ramo constructor de todo el estado.

—¿Qué hará diferente para no caer en los mismos vicios?

—La transparencia en el reparto, la supervisión y la calidad en obra, vamos a estar muy al tanto. Ahorita la instrucción es repartir la obra en todo el estado y donde sean licitaciones que gane el mejor, como lo marca la ley, la ley es muy clara en ese sentido.

 La obra inconclusa

López Angulo no lo menciona pero sí lo admite. La administración de López Valdez le heredó obras inconclusas, retrasadas y en pleitos legales.

Incluso, sobre su escritorio hay una tarjeta informativa con datos precisos de cada una de estas obras, pero el secretario no las enlista a menos que se le pregunte.

Por ejemplo, destaca el caso de la Biblioteca Pública Gilberto Owen, que debió estar terminada en septiembre de 2016, según marcaba el contrato, o el bulevar Miguel Tamayo, que conectaría un tramo desde la Unidad de Servicios Estatales hasta la carretera Culiacancito y que actualmente enfrenta un proceso legal por la propiedad de una parte del terreno que cruzaría.

También sigue pendiente el Hospital de la Mujer en Guasave y la Unidad Oncológica del Hospital Pediátrico de Sinaloa, ésta última inaugurada hace casi cuatro años pero que no se logró concluir, entre otras obras.

En cada caso, López Angulo asegura que se ha puesto atención y defiende que los proyectos no serán abandonados.

“Ha sido algo largo el proceso de revisión y seguimos en la integración de documentación. Estamos pugnando porque las obras se finiquiten y que trabajen para el objeto que fueron solicitadas. En algunos casos son temas de adeudos, otras son detalles de los contratistas, que se los estamos exigiendo”, señaló.

Y defendió: “En términos generales no la encontramos (la Secretaría) tan mal pero sí hay detalles que tenemos que revisar”.

—¿No se dejarán abandonadas las obras inconclusas?

—Definitivamente no, vamos a darles seguimiento. Es una cuestión de que el recurso público que se invirtió se convierta en el objetivo para el cual se solicitó.

 Inician bacheando

Contrario a los arranques de otros gobiernos, el de Ordaz Coppel comenzó con trabajos de “embellecimiento” en las sindicaturas: barrer, pintar y bachear.

Así cada sábado, el gobernador ha visitado sindicaturas del Estado arrancando los programas de “embellecimiento”, que según se han informado se realizan con maquinaria prestada y mano de obra de empleados de la Secretaría.

—¿Está paralizada la obra pública?

—Más que paralizada pues es el inicio de la administración, créame que pronto se reactivará esto, pero seguramente de aquí a principios de mayo quiero pensar que la construcción va a estar ya trabajando en la obra del estado.

—¿Cuáles son los grandes proyectos de este gobierno?

—Estamos en eso, formando un banco de proyectos, formalizando ese banco, una vez que estén sujetos a gestión de recursos tener los proyectos más formalizados posible para empezar. Ahorita estamos trabajando con un programa de conservación de carreteras para acceso a playas, es un programa de bacheo, de conservación y mantenimiento, principalmente en los acceso a centros recreacionales, playas, ríos, donde consideramos lo más crítico en cuestión de tránsito de carreteras.

—¿Y qué grandes proyectos nos puede adelantar?

—La rehabilitación de carreteras en todo el Estado, ejecución de vialidades en cabeceras municipales y sindicaturas. Tenemos 4 mil kilómetros de carreteras, recibimos un 85 por ciento en buenas condiciones y 15 por ciento en malas, estamos en ese 15 por ciento y tratando de que el 85 por ciento continúe bien.

Osvaldo López Angulo es contador público de profesión pero dice tener experiencia en la Obra Pública, ya que desde 1999 ha trabajado en el servicio público en áreas relacionadas. Su último cargo fue como director del Desarrollo Urbano Tres Ríos, de 2013 a 2016.

—¿Usted tiene conflicto de interés para desempeñar este cargo?

—Para nada, casi gran  parte de mi vida he sido empleado público.