Moneyval:
la Santa Sede ha colmado las lagunas en la vigilancia; ahora los procesos
Aumenta
el número de señalizaciones sospechosas: fueron 329 de enero a septiembre de
2015. Cierran 4800 cuentas irregulares en el IOR; ahora hay claridad sobre la
clientela. Es necesario hacer más a nivel judicial y procesal, por lo que se
esperan resultados concretos. Bien las leyes y reglamentos; antes de que
termine el año concluirá la inspección de la APSA
Vatican Insider, 15/12/2015/
FRANCESCO
PELOSO
«La
Santa Sede ha afrontado la mayor parte de las propias carencias técnicas» en
materia de lucha contra el reciclaje y financiamiento al terrorismo, mediante
las diferentes «disposiciones legislativas reglamentarias» que ha puesto en
marcha. Sin embargo, sigue siendo necesario «producir resultados concretos en
términos de acciones penales, condenas y confiscaciones» de capitales. Este es,
en síntesis, el juicio que ha dado Moneyval (el órgano del Consejo de Europa
que se ocupa de la lucha contra el reciclaje de dinero y contra el
financiamiento al terrorismo) en su segundo ‘progress report’ sobre la Santa
Sede. Un juicio positivo, mientras la atención se dirige ahora hacia el frente
más judicial, en donde se pide una mayor eficacia. El primer informe de conjunto
fue de julio de 2012; a finales de 2013 fue redactado un primer informe sobre
los pasos que había dado la Santa Sede; el que acaba de ser publicado, en
cambio, es el segundo ‘progress report’, y después de él habrá un tercer
informe, previsto para 2017.
En
la evaluación Moneyval se pueden identificar algunos aspectos de carácter
general: la parte de la vigilancia, del funcionamiento de los nuevos organismos
y de las normativas con ellos relacionadas, comienza a funcionar (la AIF,
Autoridad de Información Financiera, las nuevas reglas para el IOR); al mismo
tiempo se subraya que a la justicia vaticana le cuesta más mantener el ritmo,
o, como sea, se observa que en el frente judicial todavía hay que llegar a
resultados concretos.
Por
otra parte, los informes redactados por Moneyval (con base en criterios
establecidos a nivel internacional por el Gafi, Grupo de acción financiera, un
ente intergubernamental) prevén desde el principio que la adecuación a los
estándares reconocidos a nivel global siga dos vías: una más técnica, que se
relaciona con la transparencia de las transacciones de dinero (claridad sobre
los titulares de las cuentas y de las transacciones), con la vigilancia de las
inversiones y sobre la clientela s riesgo; y otra relacionada, en cambio, con
la legislación general y el aspecto judicial. En general, las recomendaciones
de Moneyval y del Gafi, fueron bien recibidas por la Santa Sede y el proceso va
por la dirección correcta.
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