El Presidente de la Republica de El Salvador Elías Antonio Saca inauguró este martes 4 de abril la II Convención Antipandillas; participaron representantes todo Centroamérica, México, Colombia, República Dominicana, además de Canadá y EE UU.
El motivo de la participación de funcionarios de Canadá y EEE UU se debe a que dentro de su territorio, especialmente en el estadounidense, hay alrededor de 800 mil “delincuentes” de origen latinoamericano.
Trabajaron en seis mesas denominadas: i)Sistema Carcelario, ii)Inteligencia, iii)Migración, iv)Prevención, v)Intervención y vi) Leyes.
Esta vez los participantes buscaron mecanismos que permitan enfrentar el fenómeno de las maras como estructuras de crimen organizado y no sólo el Súper Mando Dura, impuesto por Honduras y El Salvador que han demostrado ser ineficaces para solucionar la situación.
De entrada, se reconoce que “maras” tienen origen en la pobreza, la marginación y la desintegración familiar, para cuyas soluciones se requieren acciones globales.
De acuerdo con estudios de expertos, estos jóvenes son utilizados por el crimen organizado y el narcotráfico en la venta ilegal de armas de fuego y en la ejecución de secuestros y homicidios; también son señalados de cometer femicidios, de extorsionar a los comercios, a los ciudadanos y al transporte urbano. Y no se descarta que incursionen en el terrorismo a través de células como Al Qaeda.
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