Un pacto secreto

México sí solicitó a EU los sobrevuelos de los aviones espía

El diario The New York Times señala que fue a través de un ‘pacto secreto’ como el gobierno mexicano pidió la operación aérea

Redacción Excélsior, WASHINGTON, 21 de marzo.- México pidió a Estados Unidos el uso de aviones espías dentro de su espacio aéreo para recabar datos que ayudaran a localizar y golpear las estructuras financieras de las redes de narcotraficantes que operan en el país, así lo detalla The New York Times.

De acuerdo con la información en la que se cita a fuentes mexicanas y estadunidenses -sin precisarlas, fue a través de un "pacto" que el gobierno mexicano solicitó y acordó el sobrevuelo.

Asimismo, señala que Estados Unidos ha enviado aviones no tripulados a México desde febrero pasado dentro de la cooperación nilateral en la lucha contra el narcotráfico.

El diario estadunidense refiere que los vuelos son realizados por los drones, aviones no tripulados Global Hawk —los mismos que se utilizan para el espionaje en la guerra de Afganistán—.

Estas unidades vuelan a más de 10 mil metros de altitud  y son invisibles desde tierra. Su objetivo es seguir al minuto los movimientos de los sospechosos implicados en el narcotráfico con el fin de localizar sus centros de operaciones.

El texto explica que dicha operación aportó datos para detectar a personas vinculadas con el asesinato, ocurrido el mes pasado, del agente estadunidense Jaime Zapata, de la Agencia de Migración.

El acuerdo se había mantenido hasta ahora en secreto debido a restricciones legales y a la sensibilidad política mexicana sobre el tema por cuestiones de soberanía territorial, añade el diario.

Según The New York Times, los vuelos autorizados por el Departamento de Seguridad Nacional de EU son fruto de varios acuerdos bilaterales alcanzados entre los mandatarios de ambos países, Barak Obama y Felipe Calderón.

.S. Ambassador Resigns After Calling Mexico's Army "Fractured, Ad Hoc And Reliant On U.S. Support"

Grace Wyler | Mar. 21, 2011, 2:15 PM |

The U.S. Ambassador to Mexico has resigned his post over a series of Wikileaks cables that criticize President Felipe Calderon's drug war strategy, the New York Times reports.

The ambassador, Carlos Pascual, appears to be one of the first high-level Wikileaks casualties in the U.S. diplomatic corps.

Tensions between Pascual and Calderon escalated last week after Wikileaks released yet another U.S. diplomatic cable from Pascual, this one highlighting major "inefficiencies and deficiencies" in Mexico's fight against the drug cartels. 

From the cable, dated November 11, 2009:

"President Calderon's security strategy lacks an effective intelligence apparatus to produce high quality information and targeted operations. Embassy officers working with the GOM report that Mexico's use of strategic and tactical intelligence is fractured, ad hoc, and reliant on U.S. support….

Recent criticism of President Calderon's security strategy cites a poorly utilized and underdeveloped intelligence apparatus as a key obstacle to greater improvements in the country's security environment. Calderon's political opponents from both the Institutional Revolutionary Party (PRI) and the Revolutionary Democratic Party (PRD) have told Poloff that large-scale joint military-police counterdrug deployments, notably Joint Operation Chihuahua, have failed to make real gains in the war against organized crime due to a reliance on overwhelming numerical superiority of troops absent the strategic and operational use of intelligence."

Although Pascual's remarks didn't come as a surprise given the escalating violence of the drug war, the Mexican government expressed outrage over the revelations. President Felipe Calderon called for Pascual's resignation, accusing the diplomat of exaggerating Mexico's security problems and fueling animosity between the country's disparate security agencies.

Pascual's resignation is unlikely to have any major effect on Calderon's popularity, the Financial Times reports. Polls indicate most Mexicans are increasingly unconvinced that Calderon's forceful approach to fighting the drug cartels is working.