Cuarto Consistorio de Benedicto XVI /FA
¿Prepara su sucesión?
Antes de su visita a México y Cuba:
En el curso del Ángelus de este viernes seis de enero -festividad de la Epifanía- el Papa Benedicto XVI anunció para el próximo 18 de febrero su cuarto consistorio de su Pontificado en el que procederá a nombrar a veintidós nuevos cardenales; "y ahora, con gran alegría, anuncio que el próximo 18 de febrero tendré un consistorio en el que nombraré a veintidós nuevos miembros del colegio cardenalicio”, dijo.
Con estos nombramientos, el Colegio Cardenalicio o sea “los grandes electores” pasará a tener 214 miembros, 125 electores y 89 con más de 80 años, por lo que no podrán elegir en un posible cónclave.
El Papa precisó también que “los nuevos cardenales provienen de diversas partes del mundo y desempeñan diversos ministerios al servicio de la Santa Sede o en contacto directo con los fieles como padres y pastores de Iglesias particulares”.
Los nuevos cardenales son: Fernando Filoni, prefecto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, Manuel Monteiro de Castro, penitenciario mayor; Santos Abril y Castelló, arcipreste de la basílica papal de Santa María la Mayor; Antonio María Vegliò, presidente del Consejo Pontificio de la Pastoral para los Migrantes e Itinerantes; Giuseppe Bertello, desde octubre de 2011 es presidente de la Comisión Pontificia para el Estado de la Ciudad del Vaticano y presidente del Gobernatorado del mismo Estado (fue nuncio apostólico en México del año 2000 al 2006, justo en la alternancia); Francesco Coccopalmerio, presidente del Consejo Pontificio para los Textos Legislativos; João Braz de Aviz, prefecto de la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica; Edwin Frederick O'Brien, pro-gran maestre de la orden Ecuestre del Santo Sepulcro de Jerusalén; Domenico Calcagno, presidente de la Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica; Giuseppe Versaldi, presidente de la prefectura de los Asuntos Económicos de la Santa Sede; George Alencherry, arzobispo mayor de Ernakulam-Angamaly de los siromalabares, India; Thomas Christopher Collins, arzobispo de Toronto, Canadá; Dominik Duka, arzobispo de Praga, República Checa; Willem Jacobus Eijk, arzobispo de Utrecht, Países Bajos; Giuseppe Betori, arzobispo de Florencia, Italia; Timothy Michael Dolan, arzobispo de Nueva York, EU; Rainer María Woelki, arzobispo de Berlín, República Federal de Alemania; John Tong Hon, obispo de Hong Kong, República Popular China.
“He decidido --prosiguió Benedicto XVI- elevar a la dignidad cardenalicia a un venerado prelado, que desempeña su ministerio de pastor y padre de una Iglesia, y a tres beneméritos eclesiásticos, que se han distinguido por su empeño en el servicio de la Iglesia”. Estos son: su beatitud Lucian Mureşan, arzobispo mayor de Făgăraş y Alba Iulia de los rumanos, Rumanía; Julien Ries, sacerdote de la diócesis de Namur y profesor emérito de historia de las religiones de la Universidad Católica de Lovaina; Prosper Grech OSA, docente emérito de varias universidades romanas y consultor de la Congregación para la Doctrina de la Fe; Karl Becker SJ, docente emérito de la Universidad Pontificia Gregoriana, y durante largos años consultor de la Congregación para la Doctrina de la Fe.
¿Qué dice la Constitución apostólica Universi Dominici Gregis (El pastor de todo el rebaño del Señor)?
Esta fue publicada en 1996 y regula la vacante y la elección del pontífice romano mediante el cónclave -es decir una elección a puerta cerrada.
El documento de 60 páginas, que contiene siete capítulos y 92 artículos, señala claramente las reglas que se deberán observar en el cónclave (con llave), a saber;
i) en primer lugar queda clarísimo que los “grandes electores” reunidos en el Colegio Cardenalicio son 120: ¡No más! Además, éstos no deberán haber sobrepasado los 80 años como había ordenado Pablo VI en 1975;
ii) Se suprimen dos formas de elección hasta antes establecidas; el método "por aclamación": cuando los cardenales electores, "inspirados por el Espíritu Santo", anunciaban unánimemente el nuevo Papa, y el método "por compromiso", cuando los cardenales "por circunstancias especiales" confiaban a un grupo restringido la elección;
iii) Ahora existe únicamente un procedimiento por escrutinio, es decir, el de la votación regular: dos tercios de los votos más uno, calculados sobre la totalidad de los electores presentes: ¡120 máximo!; (hoy hay 125 electores)
iv) Hay otras reglas no menos importantes que la Universi reafirma; como la de prohibir a los cardenales ingresar con equipo electrónico; mantener el más estricto secreto todo lo que concierne directamente al "proceso electoral" y evitar contacto con el exterior, salvo en casos de emergencia.
El Colegio Cardenalicio es una institución milenaria que data de 1150 es la única responsable de la sucesión; quien controla el Colegio gobierna.
El 20 de febrero el Colegio Cardenalicio contará con un total de 214 miembros, de los cuales 125 serán electores (por tener menos de 80 años) y 89 quedarían afuera de un posible Cónclave. Es interesante observar que por primera vez en el actual pontificado los purpurados electores designados por Benedicto XVI, 63 en total, superará los elevados a esa dignidad por su antecesor, Juan Pablo II que sumaran 62.
¿Cómo queda la correlación de fuerzas en términos geográficos?
Europa pasa a ser la zona geográfica más representada, con 119 cardenales:
América Latina sólo tendrá 32 cardenales, 22 electores y 10 no electores; con Brasil a la cabeza, con 10 purpurados, seguido de México y Argentina (4 cada uno); Colombia y Chile (2) y Venezuela, Honduras, Guatemala, República Dominicana, Cuba, Perú, Bolivia, Ecuador, Nicaragua y Puerto Rico, con 1 cada uno.
Entre los nuevos cardenales que serán nombrados el próximo mes hay siete italianos, dos alemanes, un portugués y un maltés, además de los estadounidenses Timothy Michael Dola, arzobispo de Nueva York, y Edwin Frederik O'Brien, pro-gran maestro de la Orden Ecuestre del Santo Sepulcro de Jerusalén.
Los cuatro nuevos cardenales que superan los 80 años de edad son el rumano Lucian Muresan, el belga Julien Ries, el maltés Prosper Grech y el alemán Karl Becker.
Otros consistorio de Benedicto XVI fueron los de marzo de 2006, noviembre de 2007 y 2010 y este de febrero de 2012; se llevan a cabo durante dos días y concluyen con un servicio religioso solemne.
Al margen:
¿Estará pensando en abdicar como ha dicho el vaticanista Marco Politi, y este consistorio es una señal?
Hace unos días Salió a la venta en Italia el libro Crisis de un Papado, escritos por el experto vaticanista Marco Politi; y ahí señala como una posibilidad real la dimisión de Benedicto XXI. Recordemos que Joseph Ratzinger le dijo en una entrevista a su biógrafo oficial, el alemán Peter Seewald, que un Papa tiene "el derecho y, según las circunstancias, el deber de retirarse" si siente que pierde las fuerzas "físicas, psicológicas y espirituales"
No es un secreto el estado de salud del papa alemán: padece problemas cardiacos. El tema de la enfermedad del pontífice ha sido siempre un asunto ha evadir en los círculos vaticanos.
En lo personal no creo que abdique como dice el vaticanista pero es una posibilidad; incluso está prevista en la legislación eclesiástica. El cano 332.2 del código de derecho canónico. “Si el Romano Pontífice renunciase a su oficio, se requiere para la validez que la renuncia sea libre y se manifieste formalmente, pero que no sea aceptada por nadie”.
Es decir, la renuncia deber ser libre tal y como lo señala el canon 188, debidamente manifestada y no aceptada por alguien; sencillo el Papa sólo necesita manifestarlo y nadie le puede decir que no. En tono de broma una vez Karol Wotyla dijo: “¿Y a quien le presentaría mi dimisión?” Se comenta que Pablo VI llegó a redactar una carta de dimisión que debería hacerse pública en caso de imposibilidades físicas de dirigir la iglesia. Como sabemos no fue necesaria.
En noviembre de año 2000 el diario alemán Bild, habían planteado el tema de la abdicación; el periódico mexicano La Jornada reprodujo la nota fechada en 4 de noviembre en Berlín y con respaldo de las agencias DPA, AFP y PI; en ella se daba como un hecho que Juan Pablo anunciaría su abdicación en la navidad del año 2000 debido a su estado de salud. Es más, se comentó que tras su renuncia, “se retiraría a un claustro de la orden de los camaldulenses en Wigry, ubicado al este de Polonia, sitió que visito en 1999.
Y es que la abdicación no es bien vista en Roma. Esa especie de jubilación que sólo ha consumado el Papa Celestino V, en 1294, apenas cinco meses de haber sido nombrado Papa. Su dimisión fue mal vista:
Pero hay que recordar que el entonces cardenal Joseph Ratzinger, prefecto de la Congregación de la Doctrina de la Fe, y Oscar Andrés Rodríguez Madariaga, señalaron la posibilidad de que Juan Pablo II abdicará; “ si el papa viese que no es capaz de seguir adelante, seguramente dimitiría”, dijo Ratzinger, entonces
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