La masacre en Ayotzinapa visto
por los columnistas/FA
Publicado en La Otra Opinión, 7 de octubre de 2014.
Publicado en La Otra Opinión, 7 de octubre de 2014.
La pregunta sin respuesta es
¿Por qué?
Estamos ante un crimen de Lesa
humanidad.
Los días
del gobernador Ángel Aguirre Rivero se agotan. Nadie lo duda.
Este
martes los diputados avalan la creación de una comisión especial para el caso:
será presidida por el PAN...
Por lo
pronto mal inicio del proceso electoral e Guerrero. Las cosas cambiaron..
Todo se resumen a una pregunta
¿Por qué?
Y
por ultimo una pregunta que hice ayer en este espacio ¿Tendrá alguna relación
el caso de Ayotzinapa con Tlatlaya?
Curiosamente
en ambas masacres estarían involucrados el grupo delincuencial “Guerreros
Unidos“. En el primer caso fueron
victimas en el segundo victimarios.
Compartimos lo que
publicaron las principales y columnistas hoy, martes 7 de octubre de 2014, algunos ni siquiera abordaron
el tema. Lástima
II. Con
qué cara. Carlos Navarrete, nuevo
presidente nacional del PRD, informó que la dirigencia de ese partido
sesionará en Iguala. Acudirán el comité estatal, legisladores locales,
senadores y diputados federales del sol azteca. Anunciarán la expulsión de sus
filas de José Luis Abarca, edil de
Iguala en fuga. ¿Ya para qué? ¿No sería mejor que reconocieran ante las
familias de las víctimas que fue ese partido quien cobijó a Abarca; que fueron
justo ellos quienes lo propusieron como alcalde y disimularon ignorar sus
actividades junto a la organización criminal los Guerreros Unidos. Y que fue en
el estado que gobiernan donde lo dejaron escapar, pese a las evidencias? ¿Por qué no dicen que el PRD le falló a
Guerrero? ¿Por qué?
III. Coludidos. En el
multihomicidio y desaparición de normalistas de Ayotzinapa, no sólo hay
responsabilidad de los policías municipales de Iguala; las investigaciones
también apuntan hacia la Secretaría de Seguridad Pública de Guerrero. Los cuerpos policiales de ese municipio
operaban desde mayo pasado bajo el esquema de mando único que comanda el
gobierno estatal, a pesar de que el secretario de Gobierno, Jesús Martínez,
afirmó que ese programa comenzaría hasta octubre. Cada indicio enturbia más el
caso. Pese a ello, Aguirre Rivero declaró que no se irá “ni como
asesino ni como vil delincuente”.
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Bajo Reserva/El Universal
Una raya
más al tigre. Nos aseguran que el presidente municipal de Iguala, Guerrero,
también es señalado como el presunto responsable de la desaparición y muerte en
2013 del activista Arturo Hernández
y de otras dos personas. Nos comentan que hay un testigo que ha
señalado al edil José Luis Abarca y a la policía municipal de Iguala como los
responsables de la desaparición y asesinato de Hernández y dos de sus
compañeros. El testigo dijo que luego de que los tres participaron en un
bloqueo a una carretera, fueron detenidos por la policía y después fueron
asesinados por hombres vestidos de negro y con armas largas. (lo publica hoy
Reforma)
∞
Trascendió de Milenio, diario:
Que la
estrategia federal para enfrentar la crisis en Guerrero va en las vertientes de
procuración de justicia y seguridad más uso de inteligencia.
La
primera, mediante la presencia territorial de Marina, Policía Federal y Ejército,
lo que derivó en que los militares se encargaran de inmediato de desarmar a los
agentes de Iguala y trasladarlos a Tlaxcala para los exámenes de control de
confianza, mientras que la Gendarmería asumió las funciones de seguridad local.
Para dar
con los autores del crimen se envió a los mejores peritos federales y se formó
un equipo con gente del Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen) y
las áreas de inteligencia de Defensa, Marina y la Policía Federal, además de
ser inminente que se trasladen a la zona de Iguala el procurador general de la
República, Jesús Murillo Karam, y el
jefe de la Agencia de Investigación Criminal, Tomás Zerón.
Que el
silencio de Andrés Manuel López Obrador sobre la tragedia de Iguala tal vez
tenga que ver con que el alcalde prófugo,
José Luis Abarca, expulsado del Partido de la Revolución Democrática,
llegó a ese puesto recomendado por el secretario de Salud de Guerrero,
Lázaro Mazón, destapado por el propio López Obrador desde febrero como
aspirante de Morena para la gubernatura y quien ocupó dos veces esa alcaldía.
∞∞
Templo Mayor de Reforma
EL
GOBERNADOR Ángel Aguirre Rivero (....) SI
SABÍA de la gravedad de los hechos en Iguala y, desde el inicio, había
señalamientos del contubernio entre las autoridades municipales y el crimen
organizado, ¿por qué diablos dejó escapar al alcalde José Luis Abarca y al jefe de la policía, Felipe Flores Velázquez?
RESULTA
difícil entender que alguien en el gobierno estatal haya tenido un descuido
taaan grande. ¿O a poco no fue accidente? Es pregunta sin orden de arraigo.
POR
CIERTO que quienes también están en un lío gordo por el caso Iguala son los
líderes perredistas de la tribu de “Los
Chuchos”.
SE SABE
que en cuanto estalló la bronca, Jesús Zambrano fue de los primeros en defender
al alcalde José Luis Abarca ante las autoridades federales.
A ESO se
suman los señalamientos que existían desde hace más de un año contra el edil
por sus nexos con el narcotráfico, ante los cuales la dirigencia del PRD cerró
los ojos.
Y AHORA Carlos Navarrete como
que quiere desmarcarse, pero nomás no lo logra. Así, con el góber ausente y
el alcalde prófugo, el perredismo se asoma el próximo año a una elección
sumamente complicada.
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Lenguas Viperinas/La Silla
Rota
EL
LEVANTAMIENTO y presunto asesinato de normalistas de Ayotzinapa en Guerrero es
hasta hoy el golpe más fuerte en imagen para México desde la entrada de Enrique
Peña Nieto a la Presidencia de la República. El equipo más cercano al
mandatario explicó que el caso Iguala desató una postura especialmente adversa
de la prensa internacional sobre la seguridad y los niveles de violencia de
México. En pocas palabras, todo lo construido en los 22 meses de gobierno
regresó a ceros con la situación en Guerrero, principalmente en el tema del
nulo respeto a los derechos humanos y la percepción de inseguridad.
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Itinerario Político de Ricardo
Alemán en El Universal
¿Por qué los mataron? (la
pregunta del día)
Si nos
atenemos a la información disponible, es casi un hecho que los 28 cuerpos
localizados en fosas clandestinas de Iguala corresponden a parte de los 43
normalistas desaparecidos —atacados a balazos por la policía municipal y por
sicarios del crimen organizado—, y faltaría saber la suerte de otros 25 que
siguen en calidad de desaparecidos.
Y si ya
se sabe que los policías de Iguala dispararon contra los normalistas; si se
sabe que esos policías obedecieron órdenes de la banda criminal Guerreros
Unidos —para levantar y masacrar a los estudiantes—; y si sabemos que el
alcalde de Iguala y su titular de Seguridad Pública obedecían al crimen
organizado, entonces falta saber la razón por la que mataron a los estudiantes.
¿Por qué los mataron?
Las
hipótesis pueden ser tantas y tan descabelladas como la imaginación lo
sugiera....
¿Qué
significa que persigan a los normalistas, que los maten, que sus cuerpos sean
desollados y que les saquen los ojos? Ese modo de barbarie es propio de un
grupo criminal que sabe que un cuerpo martirizado de esa manera se convierte en
un mensaje para sus enemigos. Es mucho más que una mera venganza. Pero además,
desmembrar los cuerpos, quemarlos y sepultarlos también es parte del mensaje de
terror..
Señala Ricardo
que? “Una pista que podría ser la punta de la madeja es que líderes de los
normalistas podrían estar involucrados con grupos criminales adversarios a los
Guerreros Unidos. Y el móvil del crimen colectivo podría ser un ajuste de
cuentas entre bandas. Y los jóvenes serían el mensaje. Al tiempo.“
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Columna Razones/Iguala:
Aguirre se debe ir/Jorge Fernández Menéndez
Excelsior
“Ayer
se esperaba que el presidente Peña Nieto fuera aún más contundente en su
mensaje sobre Iguala en Palacio Nacional. No sé si podía exigirle al
gobernador que por lo menos pidiera licencia mientras se realizan las
investigaciones, pero sí que se designara una fiscalía especial o una
intervención en toda la línea de las fuerzas de seguridad estatales,
profundamente penetradas por el narcotráfico y los grupos criminales. Pero
en esa vía hay que leer el mensaje.
¿Por qué
tendría que pedir licencia Aguirre Rivero? (...) El presidente municipal de
Iguala, José Luis Abarca, es un personaje muy cercano al gobernador
Aguirre, también llegado de última hora al PRD como el mandatario y que
fue muy influyente en su campaña. Desde siempre se supo que uno de sus cuñados
fue Alberto Pineda Villa El Borrado, hermano
de su esposa María de los Ángeles Pineda Villa, uno de los jefes de los Beltrán
Leyva en Guerrero, y su otro cuñado es Salomón Pineda El Molón,
que estuvo preso en Tamaulipas y fue puesto en libertad apenas el año pasado.
Las autoridades afirman que Salomón
Pineda es el actual jefe de Los Guerreros Unidos en Iguala. Si el
presidente municipal es cuñado de los dos principales líderes del crimen
organizado en esa misma ciudad ¿usted lo apoyaría para ese cargo?, ¿no le
pondría especial atención a su desempeño?, ¿ no le pediría que rindiera
cuentas?, ¿no tendría por lo menos que pasar algún control de confianza?. Nada
de eso se hizo con Abarca....“
∞∞
Columna Alhajero/Martha Anaya
En 24 Horas
Son 11:56
de la mañana. Patio central del Palacio Nacional. El presidente Enrique
Peña Nieto aparece ante los medios de comunicación. Se dice “indignado y
consternado” por lo acontecido en Iguala, Guerrero (una presunta masacre de
normalistas de Ayotzinapa).
Anuncia
cooperación y colaboración “con las instituciones de seguridad” de Guerrero (no
menciona al gobernador) y agrega prácticamente a manera de advertencia: Se
esclarecerán los hechos, se encontrará a los responsables, se conocerá la
verdad y se aplicará la ley.
Todavía
subraya para concluir: “No cabe el más mínimo resquicio para la impunidad”.
Apenas
cuatro minutos. Peña Nieto no dice más. Se va. Los periodistas quedan
desconcertados. Se miran unos a otros. Se preguntan: ¿Qué quiso decir?
Y
es que las palabras presidenciales, por cómo las expresó, sonaban más a un
mensaje cifrado y con destinatarios precisos, que a otra cosa. Algo así como
“ésta no se las vamos a dejar pasar y vamos con todo a esclarecer lo ocurrido…”
El
no a la “impunidad”, parecía ser el mensaje central.
Lejos de
ahí, en las oficinas del PRD, Carlos Navarrete escuchó por segunda ocasión las
palabras de Peña Nieto; comentó el mensaje con Héctor Bautista y su equipo;
recibió llamadas y el aviso de que la Gendarmería se desplegaría en Iguala.
Cernido
todo ello, el nuevo presidente del PRD dijo: “Sé leer entre líneas…; acusé
recibo, tomo nota”.
EL
PRD DARÁ LA CARA (...) Anuncia
asimismo que hoy sesionará todo el Comité Ejecutivo del PRD en Iguala; iniciarán el proceso de expulsión de sus
filas del alcalde José Luis Abarca.
∞
El Cristalazo de Rafael
Cardona en La Crónica
La simple
sociedad policiaco-criminal con el crimen, hace doblemente grave la actuación
del gobierno demostrada con la fuga del alcalde José Luis Abarca y la
consignación de 22 policías municipales.
Si la información
prolijamente divulgada durante el fin de semana y ayer se llega a confirmar
plenamente —en detrimento absoluto de las demás teorías—, dos cosas quedarán
claras: el asunto no se aclara todavía del todo y aún faltarían saber el
paradero de otros 17 desaparecidos. Pero sobre todo, saber por qué pasó todo
esto...
Hasta hoy la mayor de las
muchas preguntas a las cuales nos conduce este terrible caso es la más simple:
¿Por qué?
∞
Columna Arsenal de Francisco
Garfías en Excélsior.
“Carlos
Navarrete se estrena como presidente del PRD con un llamativo anuncio que no
hace unanimidad hacia adentro del partido: la primera sesión del
Comité Ejecutivo Nacional que encabeza se llevará a cabo en Iguala.
“Es
una torpeza. ¿A qué van? Son riesgos innecesarios” coincidieron voces
amarillas.
Y es que
con su traslado al convulsionado municipio, los integrantes de la nueva
dirección nacional del PRD no ayudan sino estorban. Los cuerpos federales de
seguridad van a tener que echarles ojo y distraerse de sus urgentes tareas.
Ya lo
dijo el clásico: si no ayuda no estorbe.
Los días
de Ángel Aguirre como gobernador de Guerrero parecen contados. Ya ni las
oraciones y los buenos propósitos del senador del PRD, Miguel Barbosa le
alcanzan para quedarse.
El
presidente de la Mesa Directiva del Senado espera que no le encuentren ninguna
responsabilidad al gobernador en la desaparición y muerte de los normalistas de
Ayotzinapa.
Pero no
hay condiciones para que siga en el cargo. La sombra de estudiantes asesinados
lo va a perseguir lo que resta de su gobierno. Le van a mover el tapete por
todos lados. Los periodicazos le llueven diario. Su seguridad personal y la de
su familia tienen las alertas encendidas.
Normalistas
ya aventaron bombas molotov en la casa de Gobierno de Guerrero, residencia
oficial del gobernador. Lanzaron piedras, volcaron vehículos. La tensión a todo
lo que da.
El
gobernador no parece aferrado al cargo. Al menos es lo que reflejan sus declaraciones.
“Si mi renuncia resuelve las cosas, me voy”, dijo ayer.
∞
El Asalto
a La Razón de Carlos Marín en Milenio
En El
asalto… de MILENIO Tv, René Bejarano, líder de Izquierda Democrática Nacional
(solo detrás de la predominante Nueva Izquierda del PRD), hizo un relato que azora:
Desde
hace más de un año, el alcalde de Iguala, José
Luis Abarca Velázquez, fue señalado por un sobreviviente (ante notario y
este año ante el MP guerrerense) de asesinar con tiros de escopeta (en la
cara y el pecho) al dirigente de la agrupación Unidad Popular, Arturo Hernández
Cardona, de ordenar la muerte de dos más y de torturar a otros de la misma
organización.
El
profesor Bejarano denunció esos hechos (hoy cobran mayor verosimilitud) en
congresos partidistas y ante las autoridades estatales y federales; promovió un
par de resoluciones del Senado para que al alcalde se le hiciera marcaje
personal, pero de nada sirvió.
Alguien
debe responder: ¿por qué el hoy fugado Abarca Velázquez continuaba en funciones
y mandaba sobre sus venales policías el viernes y el sábado, hace diez días
cuando ocurrieron los asesinatos y desapariciones de normalistas de Ayotzinapa?
∞∞∞
Estrictamente Personal de Raymundo
Riva Palacio en El Financiero
Tiempo de
decir adiós
El cuadro
de descomposición en Guerrero va abriendo el camino para la desaparición de
poderes en el estado. De manera sistemática, el gobernador Ángel Heladio Aguirre
ha mostrado por largo tiempo su ineficacia como gobernante y su incapacidad por
conducir un estado que le quedó grande. La puerta para un juicio político que
lo destituya o una solicitud de licencia la abrió el caso de los estudiantes
desaparecidos de la Normal de Ayotzinapa...“
“Por el
contrario, la polarización política en el estado sigue una espiral ascendente,
con un enfrentamiento abierto con un viejo amigo y hoy enemigo, el ex
gobernador Rubén Figueroa Alcocer,
cuyo hijo Rubén Figueroa Smutny, está
en lucha abierta contra Aguirre por sus alianzas con el precandidato del PRD al
gobierno, el senador Armando Ríos Piter, quien pactó la paz con él a cambio de
integrar a su hijo en la campaña y apoyarlo para la alcaldía de Acapulco.
También rompió el frágil acuerdo con grupos del PRD, como el que representa el
dueño de La Jornada Guerrero, Félix Salgado Macedonio, que publicó
este domingo un editorial en el periódico donde lo acusa de “falta de
sensibilidad” al querer reacomodar sus piezas para las elecciones de 2015 en
medio de esta crisis.
∞
En Privado de Joaquín López
Doriga en Milenio
Retales.
“VENDETTA”. El diputado local del PRI en
Guerrero Rubén Figueroa Smutny responsabilizó al gobernador Ángel Aguirre de lo
que le pueda pasar a él y a su familia. Ayer, Aguirre dijo que él nunca se ha
metido con el hijo de Rubén Figueroa Alcocer, ex gobernador de Guerrero y a
quien el mismo Aguirre relevó en el gobierno de Guerrero tras la matanza de
Aguas Blancas, en junio de 1995, siendo presidente Ernesto Zedillo;
∞
Columnas Serpientes y Escaleras de Salvador García Soto en El Universal
señala que “Carlos Navarrete se estrenó
como presidente nacional del PRD de la peor manera: defendiendo al indefendible
Ángel Aguirre Rivero, en momentos en que hay un fuerte movimiento —tanto desde
la opinión pública y la sociedad guerrerense como desde el poder federal— para
lograr la salida del gobernador de Guerrero ante la violencia y el caos en su
estado, tras el asesinato y desaparición de estudiantes de Ayotzinapa y el hallazgo
de una fosa clandestina en donde se presume fueron enterrados de los jóvenes
asesinados por la Policía de Iguala. Justo cuando el país se muestra
horrorizado por esa masacre cometida por policías al servicio del crimen
organizado, Navarrete decidió iniciar la defensa de Aguirre y hasta condicionó
el apoyo de su partido a una salida del gobernador a “que se vayan también
Egidio y Eruviel”, dijo en relación a los gobernadores priístas del Estado de
México , Eruviel Ávila y Egidio Torre, quienes también han sido cuestionados
por su desempeño y la inseguridad y violencia en sus estados.”
Sergio Sarmiento escribió en su columna Jaque Mate en REFORMA que:
“el homicidio masivo de estudiantes de la Normal de Ayotzinapa parece una mala
novela de terror. Mala, por el exceso gratuito de sangre, pero también porque
hasta la fecha no se entiende la motivación de quienes supuestamente ordenaron
las ejecuciones.” En TANTO Eduardo R. Huchim, escribe que: “las matanzas de
Tlatlaya, Estado de México, y de los normalistas de Ayotzinapa, Guerrero,
enfrentan brutalmente a México con su realidad violenta. Una violencia que no
se limita a dos estados, sino se manifiesta, dolorosamente, en una amplia
porción del territorio nacional. Una violencia que el maquillaje gubernamental
disimula pero la terquedad de los hechos desnuda. Una violencia que tiene dos
fuentes: el crimen organizado y las fuerzas militares y policiales.
Denise Maerker en El Universal
escribe que: “lo ocurrido en Iguala indigna y horroriza, pero lo peor es
que no se trata de un hecho aislado. No por que existan otros casos iguales
sino porque las condiciones que llevaron a esta tragedia se dan en otros
lugares de Guerrero. Autoridades municipales coludidas, controladas o que son
parte de la estructura de los grupos criminales, falta total de controles por
parte del Estado y de la Federación, disputas entre grupos criminales, y la
impunidad garantizada que a su vez genera caciques imbuidos de soberbia y
frivolidad.”
Y por último Carlos Puig en Milenio Diario, escribe
que: “este sábado, Bejarano la contó en la tribuna del Consejo Nacional del
PRD. Dijo que con esas declaraciones en la mano se reunió con el secretario de
Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, y le pidió que la Procuraduría General
de la República atrajera el caso del asesinato de Hernández Cardona e
investigara al presidente municipal.”
Dos periódicos dedican su editorial
al tema El Universal y La Jornada.
“La gran pregunta es– señala El
Universal– : ¿se puede hacer algo significativamente diferente hoy —siete años
después de iniciadas las intervenciones federales en entidades amenazadas por
el crimen— para frenar los crímenes en contra de la población? Los propios
números oficiales muestran que los resultados no llegan tan rápido como la
ciudadanía lo demanda.
En tanto La
Jornada señala que :
“Las
declaraciones y las acciones referidas *la intervención de la federación) constituyen
una respuesta plausible, pero tardía, a los inauditos homicidios y
desapariciones (...) Ha de constatarse que ante esta tragedia, tanto las
autoridades estatales como federales han reaccionado en forma errática y
equívoca: el gobernador guerrerense, Ángel Aguirre Rivero, dejó pasar cuatro
días antes de pedir al Congreso estatal el desafuero del presidente municipal
de Iguala, José Luis Abarca Velázquez, en tanto que el titular del Ejecutivo
federal se limitaba, hasta hace unos días, a exhortar a las autoridades
estatales a que se responsabilizaran de las investigaciones y de la procuración
de justicia, y el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong,
afirmaba que la masacre de Iguala era un asunto local.“
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