George Pelll: en las cuentas
vaticanas, mil quinientos millones de dólares fuera de los balances
El cardenal
Secretario para la Economía expuso ayer los datos frente a los purpurados del
Consistorio, y reveló las cifras en una entrevista
Vatican Insider, 14 de febrero de 2015
REDACCIÓN
El cardenal
australiano, George Pell (llamado “el zar” de las finanzas vaticanas) informó
ayer a sus colegas purpurados que «el Vaticano tiene más de mil quinientos
millones de dólares» cuya existencia se desconocía, aunque hay que recordar «el
déficit previsto de alrededor de mil millones de dólares en el fondo para las
jubilaciones». Lo anunció el cardenal Pell en una entrevista con John Allen, el
vaticanista del “Boston Globe”.
Según lo expuesto
por el Prefecto de la Secretaría para la Economía, el patrimonio total del
Vaticano asciende a «más de tres mil millones de dólares, alrededor de un
tercio más de lo que se había reportado en el pasado». Los cardenales fueron
informados sobre el hecho de que el patrimonio inmobiliario podría haber sido
subestimado, por lo que la situación financiera en conjunto podría resultar
«notablemente más rosa de lo que se creía».
El purpurado
australiano también explicó que se contabilizaron alrededor de 500 millones de
dólares en diferentes cuentas del Vaticano, que habían sido «voluntariamente
excluidos del balance global de 2013», así como alrededor de mil millones «en
bienes que habrían debido ser incluidos en el balance».
Pell subrayó que
estas discrepancias «no son el resultado de actividades ilegales», sino de un
sistema para rendir cuentas que había permitido que muchas actividades pasaran
inobservadas.
En diciembre del
año pasado, el mismo purpurado había concedido una entrevista al “Catholic
Herald” en la que había anunciado el «descubrimiento» de fondos por varios
millones fuera de los balances; en esa ocasión había recordado que hasta
entonces en las finanzas vaticanas «las Congregaciones, los Consejos y,
especialmente, la Secretaría de Estado» habían «gozado y defendido» su
independencia. Sus alusiones provocaron una reacción interna, que culminó en un
documento en el que se inisitía que la información sobre los fondos disponibles
no habían sido «descubiertas», sino que habían sido indicadas en su momento poe
el grupo de expertos que nombró Francisco en 2013 para la reorganización de las
finanzas vaticanas, antes de la institución de la Secretaría para la Economía.
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