“La noche es como un mar en calma,
Dicha y pena y lamentos de amor
Se acercan de manera tan confusa
En la suave oleada.
Los deseos son como las nubes,
Navegan por los espacios silenciosos,
¿Quién reconoce en el ligero viento
Si son sueños o pensamientos?..“Joseph Von Eichendorff, poeta alemán del sigo XIX
Juez Tercero de Distrito de Procesos Penales Federales con sede en Toluca, dictó auto de formal prisión contra María de los Ángeles Pineda Villa, esposa del ex edil de Iguala, José Luis Abarca, por su probable responsabilidad en la comisión del delito de delincuencia organizada.
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Qué
dicen las columnas Políticas hoy, 12 de enero de 2015?
Bajo Reserva/El Universal
Ficrea
y los pleitos de familia
Nos
dicen que si las autoridades de la Procuraduría General de la República
verdaderamente quieren investigar a fondo la defraudación que sufrieron los
ahorradores de Ficrea, sociedad de la que es socio mayoritario Rafael Antonio
Olvera Amezcua, y quieren tener pistas de quienes se beneficiaron de los
dineros, simplemente tendrían que dar una navegada por las redes sociales.
Miembros de las familias del matrimonio conformado por Olvera Amezcua y Susana
Silva Tortolero han estado peleando en línea. Tíos, primos, sobrinos, y algunos
otros, hablan sobre el mal manejo de los fondos, y queda evidenciado que todos
recibieron dinero por lo cual Fernanda Olvera Silva les ha echado en cara que
no los defiendan cuando su padre y familia los beneficiaron.
Hasta en embajadores
hay clases
El
vuelo de United Airlines que sale diario desde la ciudad de México hacia
Washington D.C. iba plagado de diplomáticos y ex diplomáticos, eso sí, cada
quien según sus posibilidades. Nos comentan que en la cabina de clase económica
viajaban el actual embajador mexicano en Washington, Eduardo Medina Mora, así
como el anterior, Arturo Sarukhán. En esa misma cabina estaba también el ex
secretario de Energía del calderonismo Jordy Herrera. En la cabina de la gente
bien, en business, iba el ex embajador de México en China, Jorge Eugenio
Guajardo. Don Jorge, quien fue designado cónsul en Austin, Texas, por el
presidente Vicente Fox y embajador en China por el presidente Felipe Calderón,
ganó fama por haber sido señalado de dispendios en la misión diplomática como
la compra de autos de lujo y por una frase que le fue atribuida cuando
auditores de la cancillería llegaron a la embajada para revisar sus gastos: “No
pierdan su tiempo, soy amigo del presidente… y háganle como quieran”. Es
evidente que don Jorge no ha perdido el gusto por la buena vida.