Columna BOTICA R 133/Jorge Meléndez Preciado
A Valeri Álvarez, por su doble vitalidad
PAN: “Muera la cultura”
En un aniversario más del PAN, aparecen dos libros de quienes militaron en dicha organización señalando lo evidente: fracasó el pretendido triunfo cultural de esa organización. Lo que deseaba Carlos Castillo Peraza, evitar que el priismo siguiera como fórmula de hacer política, es lo que ha reproducido Felipe Calderón y sus acólitos. En “La mancha azul” de Jorge Eugenio Ortiz Gallegos (Grijalbo) encontramos cómo los albiazules, desde la época de Luis H. Álvarez, se entregaron a los empresarios y los financieros y dejaron a las bases chiflando en la loma, tanto que viejos panistas tuvieron que defeccionar por no estar de acuerdo con el pragmatismo. Mientras
que el ex diputado Carlos Lara González, en su texto: “Manuel Gómez Morín. Un gestor cultural en la etapa constructiva de la Revolución” (citado en Proceso, 1820), nos indica como los hombres de ideas: Hugo Gutiérrez Vega, Eugenio Ortiz Walls y otros se alejaron ya que a falta de teorías se buscó escalar en el poder a como diera lugar, incluso actualmente a nadie le importa la cultura: cero de aumento en el presupuesto y 0.2 por ciento a Conacyt. Es cierto, luego de la publicación impulsada por Castillo Peraza, “Palabra”, donde incluso apareció un artículo de Carlos Monsiváis, hay un páramo de concepciones. Véase si no, la reprimenda que les puso Calderón a los 300 líderes acerca de la política. Les dijo que si no les gusta cómo la realizan los grillos formen su partido (sic que olvida la imposibilidad de hacerlo) o sean candidatos en los puestos de elección (sic que choca con el IFE y la reforma electoral); qué dirán ahora muchos de los asistentes quienes elogiaban al “señor presidente”. Y después para cerrar la pinza, la regañada que nos dio la cadete Evelin Zárate, quien llamó a volar tan alto como los Niños Héroes (sic que se da un zapotazo) y a “triunfar” (sic con 7 millones de ninis). Admonición en lugar de reflexión.
Candidato
Una prueba del incomparable PAN, el que busca realmente que a todos nos vaya bien y elevarnos la moral y los ingresos, volvió a atacar. El señor Ernesto Cordero dijo “Ya dejen en paz a Larrazabal”, el alcalde cuestionado por las injerencias de su hermano Jonás (“a dónde vas”) y sus ventas de quesos mágicos. No es la primera gran frase que nos brinda este actuario itamita- la mayoría del gabinete tienen ese sello que es parte de la nueva clase política. Una vez más los bonos de Cordero irán al alza, mientras Josefina y Santiago ríen sin cesar.
¿Y Sergio?
Dos rectificaciones ha tenido el aspirante al DF, Miguel Mancera. El indulto a Antonio Ortega, que llevaba tiempo en chirona por un deficiente juicio, y la salida de prisión de la universitaria, Mariel Solís, a quien acusaban de homicidio. Pero hace tiempo está recluido el fotógrafo Sergio Dorantes, al cual no se le ha comprobado el asesinato de su ex mujer, ya que las declaraciones son vagas y erróneas, y se le mantiene en prisión ¿Hasta cuándo?
Civilizados
¿Qué pensarán de nuestro “desarrollo” las futuras generaciones? Plantea el director de la obra teatral, Civilización, Luis Enrique Gutiérrez. Después de verla, el juicio será reprobatorio, pues lo mismo el empresario (Héctor Bonilla) que el político (Juan Carlos Vives) son parte de una pandilla imposible de defender. Asimismo el arquitecto que insiste en sus “principios” (Mauricio Isaac), quien está dispuesto a acomodarse como sirviente del que sea. Tal vez los gestos y los ojos del criado (Salvador Velásquez) nos digan más que muchas palabras: la estupefacción al escuchar a los transísimas, aunque sabe que está imposibilitado de cambiar el rumbo que toman los acontecimientos en los cuales naufragarán todos. En ello, creo, está la clave: millones únicamente observan la corrupción que devasta. Mal tiempo de esta humanidad que no se indigna lo suficiente y, por ello, la bailan muchos.
Persistente
Más de cuatro décadas del Taller Coreográfico de la UNAM y Gloria Contreras se alza con victorias por doquier. Ahora recibe el galardón del Festival Internacional de Ballet de Miami. Pero acá nosotros pudimos ver el domingo 18, por sólo 30 pesitos, una serie de obras que ha creado a propósito de lo mexicano: su conocido “El mercado”, la famosa “Redes” con música de Silvestre Revueltas y la “Sinfonía india” de ella y Carlos Chávez donde sobresale Julius Brewster – Cotton. También las que recuerdan su paso con George Balanchine: “Tocata” e “Intermezzo”. Programa, realmente espléndido de una gran maestra que nunca decae.
jamelendez44@gmail.com
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