Qué
dicen las columnas políticas hoy, 24 de octubre de 2014?
Que
el gobernador con licencia, Ángel Aguirre, se adelantó al CEN del PRD porque en
la reunión que los líderes tuvieron por la tarde salieron chispas y ello los
retrasó.
El
dirigente de ese partido, Carlos Navarrete, tenía proyectado anunciar que el
partido solicitaba al mandatario separarse del cargo, pero René Bejarano se
entercó en la necedad de pedir cabezas de autoridades federales.
:Que en el
Congreso hay quienes dicen que lo peor está por venir, pues corre el chisme de
que la Fiscalía de Guerrero “manipuló” las muestras de ADN y alteró las
evidencias en las primeras fosas.
Eso
habría llevado al ombudsman Raúl Plascencia a decir que se había roto la cadena
de custodia y por ello los peritos argentinos y la propia PGR han retrasado sus
informes.
:Que
por cierto, al concluir el registro de aspirantes a la CNDH sobresalen los
nombres de Raúl Plascencia y Luis Raúl González Pérez, quienes integraron hace
cinco años la terna de la que el Senado escogió al actual ombudsman.
A
diferencia de lo ocurrido entonces, el abogado general de la UNAM está entre
los favoritos para suceder a Plascencia.
:Que
el Parlamento Europeo tomó una decisión salomónica sobre el caso Ayotzinapa,
pues no aprobó una condena al gobierno mexicano, como buscaban los verdes, sino
a las “inaceptables desapariciones forzosas y crímenes en Iguala”, y reconoció
los esfuerzos de las autoridades federales para combatir al crimen organizado.
Eso
comentó la eurodiputada española Teresa Jiménez, coautora de la resolución.
:Que
la salida de Rodrigo Archundia como titular de la Seido no representa un mal
cálculo del procurador general de la República, Jesús Murillo Karam, y menos en
estos momentos, cuando se desahogan dos de las más importantes averiguaciones:
Tlatlaya y la desaparición de los normalistas de Ayotzinapa.
El
nuevo reto de Archundia es tener listas las nuevas fiscalías que regirán en el
país, una vez que entre en operación la Fiscalía General de la República, la
cual, se prevé, entrará en funciones en diciembre próximo. Los tiempos
dependerán del Congreso de la Unión.
:Que
la última vez que se vio en público al priista Gilberto Sánchez Osorio,
asesinado antenoche, fue el martes en la sesión del Senado, adonde acompañó a
Joel Ayala, líder de los burócratas en el país, sesión en la que se iba a
abordar la petición de desaparición de poderes en Guerrero.
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BAJO RESERVA/El Universal
El primer día de Yáñez en prisión
El dueño de Oceanografía y presunto autor de uno de los fraudes más cuantiosos a Banamex, que ha trasquilado a importantes directivos de la institución, pasó su primera noche y día en una celda del área de ingresos del Reclusorio Sur del Distrito Federal. Agentes federales ingresaron a Amado Yáñez Osuna la tarde del miércoles a la prisión ubicada en la zona sur de la ciudad de México, bajo la acusación de delito financiero —sin derecho a fianza—. El empresario de Campeche estuvo tranquilo y recibió en el trascurso del día a su esposa Verónica Perla González, a su cuñada Rocío González Gutiérrez y a su padre Amado Yáñez Correa, nos informan. Las autoridades capitalinas tienen, de nueva cuenta, a otro “huésped incómodo” y hasta la pregunta de ¿por qué no lo llevaron a un penal federal? se ha vuelto recurrente, nos comentan.
Pasarela en el Senado por la CNDH
El momento de la verdad llegó para los aspirantes a presidir la Comisión Nacional de los Derechos Humanos. A partir del próximo miércoles, uno a uno tendrán que pasar a examen ante comisiones de Derechos Humanos y de Justicia del Senado, que presiden la perredista Angélica de la Peña y el panista Roberto Gil. Ambas comisiones iniciarán el análisis de los expedientes recibidos y determinarán quiénes cumplen con los requisitos solicitados en la convocatoria. Los que pasen a la segunda ronda tendrán una cita para entregar sus proyectos. En esta elección, las Organizaciones No Gubernamentales podrán hablar de su visión de la CNDH.
México y Cuba contra el ébola
Hermanados y en la nueva etapa de las relaciones bilaterales, los gobiernos del presidente Enrique Peña Nieto y de Raúl Castro ponen este viernes sobre la mesa un esfuerzo conjunto en la lucha contra el ébola en África, de la mano de la Organización Mundial de la Salud. La parte mexicana, nos explican, contribuye con una donación de un millón de dólares y la cubana con el envío de una veintena de médicos altamente especializados a países africanos. México y La Habana van más allá de discursos retóricos y asumen un papel proactivo, nos comentan.
Sube el calor en Sonora
Y donde está subiendo la temperatura es en el estado de Sonora, donde los priístas sienten que tienen la gubernatura en el bolsillo… claro, si no se lastiman entre ellos mismos. Los tres precandidatos más fuertes del tricolor son: dos senadores, Ernesto Gándara y Claudia Pavlovich, que vienen con los padrinazgos de Emilio Gamboa y Manlio Fabio Beltrones, y un “caballo negro” en la figura del diputado federal y ex alcalde de Guaymas, Antonio Astiazarán, que trae tras de sí a Miguel Osorio Chong, jefe de Gobernación. Saldrá palomeado, nos dicen, no sólo quien tenga mejores números, sino que también contará que el elegido no polarice y tenga experiencia administrativa.
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BAJO RESERVA/El Universal
El primer día de Yáñez en prisión
El dueño de Oceanografía y presunto autor de uno de los fraudes más cuantiosos a Banamex, que ha trasquilado a importantes directivos de la institución, pasó su primera noche y día en una celda del área de ingresos del Reclusorio Sur del Distrito Federal. Agentes federales ingresaron a Amado Yáñez Osuna la tarde del miércoles a la prisión ubicada en la zona sur de la ciudad de México, bajo la acusación de delito financiero —sin derecho a fianza—. El empresario de Campeche estuvo tranquilo y recibió en el trascurso del día a su esposa Verónica Perla González, a su cuñada Rocío González Gutiérrez y a su padre Amado Yáñez Correa, nos informan. Las autoridades capitalinas tienen, de nueva cuenta, a otro “huésped incómodo” y hasta la pregunta de ¿por qué no lo llevaron a un penal federal? se ha vuelto recurrente, nos comentan.
Pasarela en el Senado por la CNDH
El momento de la verdad llegó para los aspirantes a presidir la Comisión Nacional de los Derechos Humanos. A partir del próximo miércoles, uno a uno tendrán que pasar a examen ante comisiones de Derechos Humanos y de Justicia del Senado, que presiden la perredista Angélica de la Peña y el panista Roberto Gil. Ambas comisiones iniciarán el análisis de los expedientes recibidos y determinarán quiénes cumplen con los requisitos solicitados en la convocatoria. Los que pasen a la segunda ronda tendrán una cita para entregar sus proyectos. En esta elección, las Organizaciones No Gubernamentales podrán hablar de su visión de la CNDH.
México y Cuba contra el ébola
Hermanados y en la nueva etapa de las relaciones bilaterales, los gobiernos del presidente Enrique Peña Nieto y de Raúl Castro ponen este viernes sobre la mesa un esfuerzo conjunto en la lucha contra el ébola en África, de la mano de la Organización Mundial de la Salud. La parte mexicana, nos explican, contribuye con una donación de un millón de dólares y la cubana con el envío de una veintena de médicos altamente especializados a países africanos. México y La Habana van más allá de discursos retóricos y asumen un papel proactivo, nos comentan.
Sube el calor en Sonora
Y donde está subiendo la temperatura es en el estado de Sonora, donde los priístas sienten que tienen la gubernatura en el bolsillo… claro, si no se lastiman entre ellos mismos. Los tres precandidatos más fuertes del tricolor son: dos senadores, Ernesto Gándara y Claudia Pavlovich, que vienen con los padrinazgos de Emilio Gamboa y Manlio Fabio Beltrones, y un “caballo negro” en la figura del diputado federal y ex alcalde de Guaymas, Antonio Astiazarán, que trae tras de sí a Miguel Osorio Chong, jefe de Gobernación. Saldrá palomeado, nos dicen, no sólo quien tenga mejores números, sino que también contará que el elegido no polarice y tenga experiencia administrativa.
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FRENTES
POLÍTICOS/Excelsior
I.
Inevitable. En las últimas horas Ángel Aguirre había perdido todo apoyo. Y su
salida no podía esperar más. Se fue con licencia, pero lo que no debe irse es
impune. Aun así, su decisión de abandonar el cargo, exigencia de muchos y
variados sectores, llega demasiado tarde, y obligado por la presión.
Incendiados edificios públicos, mucha evidencia pudo consumirse. Que las
investigaciones lleguen hasta el escritorio que ayer tuvo Aguirre y que la ley
se encargue de ellos, quienes gobernaron Guerrero. “Con obligación, he
encabezado incansablemente la búsqueda de normalistas hasta el día de hoy; por
favorecer un clima político que ponga solución, hago entrega de mi licencia”,
leyó. No es suficiente.
II.
Condena europea. Todo hiere en el caso Ayotzinapa. El que desde el exterior
México se vea como el país que mata a sus estudiantes y cuyos ciudadanos no
hacen nada; o la nación donde se atenta contra los derechos humanos y la moral
está a la baja. El Parlamento Europeo sí lo nota. Adoptó una resolución en la
que comparte con el gobierno mexicano la condena por los asesinatos en Iguala,
Guerrero, y llamó a la Unión Europea a reforzar su cooperación con México en
derechos humanos. Los 28 Estados miembros y sus instituciones proveerán su
apoyo a México. No cabe duda, la salvajada que se le ocurrió a José Luis
Abarca, el edil en fuga, es colosal. Que así sea su castigo.
III.
Drama inagotable. Se cumple un mes de la desaparición de 43 normalistas y la
muerte de seis personas, y el tema de Iguala sólo se magnifica. En la nueva
Torre de Hospitalización del Instituto Nacional de Cancerología, el presidente
Enrique Peña Nieto, en el Día del Médico, afirmó que está pendiente del avance
en las investigaciones, para atender esta consternación que hay en la sociedad
mexicana. Reconoció a las miles de personas que han unido su voz y expresado su
sentir. Confió en la pronta aparición de los estudiantes y, sobre todo, en la
aprehensión de los responsables. Es cuestión de tiempo. Tanta impunidad,
lastima.
En
malas manos. Los siguientes datos, aterrizan un poco de qué hablamos cuando se
coloca a la persona inadecuada en un cargo público, como el de presidente
municipal de Iguala. Este año, el municipio recibió 81 millones de pesos para
seguridad pública, de los cuales gastó 30 mil 900 pesos para capacitar a sus
298 policías. En 2013 José Luis Abarca, su edil, gastó 550 mil pesos en
capacitación policiaca. El resultado: policías municipales dispararon contra un
camión con estudiantes, seis personas murieron y se llevaron a 43 normalistas
que nadie ha vuelto a ver. Más de la mitad del presupuesto de seguridad se fue
a sueldos. Y todo fue para matar.
El
lado A de la historia. Rodrigo Medina de la Cruz, gobernador de Nuevo León, es
justo lo opuesto de la moneda. Trabaja junto con empresarios en la lucha contra
la inseguridad. Así que puede presumir que actualmente no se tienen reportes de
secuestros en la entidad, además de resaltar que ha habido una reducción de
delitos en 75%, en promedio. En los peores meses de inseguridad, dijo, en la
entidad se registraba, por lo menos, un secuestro cada dos días. En Nuevo León se
pusieron las pilas y le dieron la vuelta al gravísimo problema de inseguridad
que dejó Natividad González Parás. Un ejemplo que otros deberían imitar.
Encubren
a asesinos. Contagiados de abuso de poder, a los policías de Guanajuato se les
pasó la mano y acabaron a puñetazos con la vida de un estudiante de
Guadalajara, detenido en el Festival Internacional Cervantino. Da pena el
gobierno solapador de Miguel Márquez. Ricardo Esparza Villegas, de 23 años, era
alumno de la carrera de Ingeniería en mecatrónica. Se lo llevaron a la
comandancia y, una vez muerto, lo lanzaron al Callejón Peña Grande; el cuerpo
lleno de golpes e infamias, como que quiso robar en una casa. Márquez, el
gobernador, debe dar la cara, y no encubrir a policías asesinos. ¿Dónde
quedaron los principios del panismo?
∞
TEMPLO MAYOR/Reforma
¿QUIÉN
TUMBÓ al gobernador? Fuenteovejuna, señor.
DIRÁN
lo que quieran, pero la salida de Ángel Aguirre Rivero se debió, en muy buena
medida, a la presión de la sociedad civil. A la indignación que mostraron miles
de personas en todo el país, en todas las redes sociales, ante la desgracia en
Iguala.
∞∞
Lenguas Viperinas/LSR
EL PRD negoció con el gobierno federal y con el PAN la salida de Ángel Aguirre lo más tersa posible y con un relevo que quede en manos del perredismo. Nos aseguran que el encuentro de Carlos Navarrete con Ángel Aguirre la noche del jueves fue ríspido y que incluso se despidieron molestos. Mientras ellos cenaban, en avenida Reforma y el Zócalo marchaban más de 50 mil personas exigiendo la salida del mandatario estatal y repudiando todo lo que pasó en Guerrero con la desaparición de los normalistas.
∞∞
EL ASALTO A LA RAZÓN/Carlos Marín
Milenio
Ángel Aguirre a su casa… ¿y?
Difícil imaginar la medida en que se despresurizarán las tensiones políticas por el caso Iguala con la salida de Ángel Aguirre de la gubernatura de un estado en que las manifestaciones han llegado a la vandalización, destrucción y quema de instalaciones públicas y también privadas.
Su caída, obvio, no resuelve lo medular: dar con el paradero de los 43 normalistas rurales, con los asesinos de seis personas (tres de ellas también estudiantes de Ayotzinapa) y atrapar a los autores intelectuales.
Con el Ángel caído, ¿modificarán su habitual rijoso comportamiento los activistas de la facción guerrerense de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación y los alumnos de la misma escuela normal?
¿Dejarán de secuestrar autobuses, de saquear camiones de carga y de privar del derecho al libre tránsito a quienes circulan por la autopista México-Acapulco?
¿Harán lo propio sus correligionarios en Oaxaca, Michoacán o Chiapas?
Aguirre se va, pero nada garantiza que cese la virulencia ni la comisión de delitos en hipócrita demanda de “justicia”.
∞∞
RENUNCIA NO RESUELVE PERO ALLANA/Editorial EL UNIVERSAL
La renuncia de Ángel Aguirre Rivero a la gubernatura de Guerrero se da 27 días después de que 43 estudiantes de la normal rural de Ayotzinapa fueran secuestrados y seis personas murieran en dichos ataques. Cada día que ha ido pasando sin que aparezcan los desaparecidos ha incrementado el costo político para las autoridades locales, que lejos de ver desvanecida su responsabilidad, cada vez se encuentran más comprometidas, conforme van saliendo a cuentagotas los detalles de una criminal operación, que a su vez abrió una cloaca de corrupción, criminalidad y violencia, con epicentro en Iguala, pero que ha sacudido a toda aquella entidad.
Sólo la presión social, así como multitudinarias movilizaciones en todo el país pudieron más que el empecinamiento de un funcionario público que era el único que pensaba que su permanencia en el poder era benéfica para su estado y para las investigaciones. Renuncia tardíamente, pero abre la esperanza de que se comience a despresurizar una entidad que acumula graves tensiones sociales que están a punto de estallar.
Su salida no resuelve el caso, pero allana el camino. Tampoco es un permiso para que se retire de la escena y evada su responsabilidad, si es que tuviera alguna. Como jefe del Ejecutivo estatal, seguramente actuó o dejó de hacerlo en función de su responsabilidad como gobernador. Las investigaciones dirán si actuó conforme a Derecho o incurrió en alguna irregularidad.
Por lo pronto, se mantiene la exigencia principal de que sean localizados los desaparecidos. Pero también que sean detenidos los dos principales inculpados de este crimen —el alcalde José Luis Abarca y su esposa—; que se aclare de quién son los cuerpos encontrados en más de una veintena de fosas clandestinas que fueron apareciendo con los días; que se castigue a quienes permitieron por acción u omisión que las policías municipales estuvieran al servicio de grupos criminales; así como que se deslinden culpabilidades y responsabilidades en los tres niveles de gobierno, porque no puede haber impunidad en un caso tan grave como este.
Para alcanzar todo ello es indispensable que se cuente con un interlocutor válido en el ejecutivo estatal, que no sea el gobernador al que le explotaron de golpe problemas que se acumularon por años, los cuales por alguna razón solapó o no vio. Eso sólo lo podrán determinar las investigaciones. La urgencia sigue siendo que aparezcan los estudiantes normalistas.
∞∞
EN PRIVADO/Joaquín López-Dóriga
Milenio
Iguala: finalmente una versión
Espero que las cabezas que rueden no sean las de las víctimas. Florestán
En la víspera de que esta noche se cumplan cuatro semanas de los hechos de Iguala, el pasado 26 de septiembre, que dejaron un saldo de seis muertos, 23 heridos y 43 estudiantes de la Normal de Ayotzinapa desaparecidos, el procurador general de la República, Jesús Murillo Karam, dio a conocer la línea de investigación que sigue y en la que la captura del jefe de la banda de Guerreros Unidos, Sidronio Casarrubias, fue clave.
La narrativa de la averiguación previa parte de la orden que dio el alcalde, hoy prófugo de Iguala, José Luis Abarca, a su secretario de Seguridad, Felipe Flores, también prófugo, de que alertado por la llegada de dos autobuses con normalistas de Ayotzinapa, impidiera que alteraran el informe de actividades del DIF local que su esposa, María de los Ángeles Pineda, igualmente prófuga, daría esa noche.
Y que en esa línea, se dieron los primeros tiroteos que dejaron un saldo de seis muertos: tres normalistas, un menor de edad jugador del equipo de futbol Los Avispones de Chilpancingo, el chofer de su autobús y una mujer como víctima colateral. En estos ataques de la policía municipal de Iguala contra los estudiantes, hirieron a 24 personas, dos de ellas, también normalistas, aún graves.
Para esa hora, la medianoche, que el alcalde diría el lunes que no sabía nada, que él había ido a cenar tacos con sus hijos, los policías municipales, con apoyo de los de Cocula, ya habían detenido y trasladado a su cuartel a los normalistas.
De allí, le informaron a un sujeto identificado como El Gil, lugarteniente de Sidronio, a quien se le comunicó que los detenidos eran gente de la otra banda, Los Rojos, sus enemigos, y recibió la orden de proceder.
En las primeras horas del sábado, la policía de Cocula entregó a los 43 jóvenes en una casa propiedad de El Gil, en Pueblo Viejo, Iguala.
Desde entonces, esta noche se cumplirán cuatro semanas, no se ha vuelto a saber de ellos y el caso se ha convertido en la mayor crisis de este país y del gobierno del presidente Enrique Peña Nieto.
La demanda unánime es que regresen vivos.
Y todos nos debemos preparar para la trágica eventualidad de que no fuera así.
Retales
1. Finalmente. Ayer se consumó lo inevitable: Ángel Aguirre dejó el gobierno de Guerrero. Lo sucederá su secretaria de Desarrollo Social, Beatriz Mojica, consejera del PRD. A ver si puede con el paquete que se le viene;
2. Sorpresa. Rodrigo Archundia dejó la titularidad de la Seido, en la PGR, para asumir la Subprocuraduría de Control Regional que realizará los modelos de las fiscalías regionales que tendrán el control de las delegaciones. Lo releva Jorge Hugo Ruiz; y
3. Aspirantes. La senadora Arely Gómez dará a conocer esta tarde la lista de los aspirantes a la presidencia de la CNDH que cubrieron los requisitos.
Nos vemos el martes, pero en privado
∞∞
Faltan las reformas estructurales... en seguridad/Jorge Fernández Menéndez
Excelsior
Faltan las reformas estructurales... en seguridad
Algo sucedió en la administración federal que la crisis de Iguala, que este fin de semana cumplirá ya un mes, dejó al gobierno paralizado durante días y rompió el ritmo, la imagen, el Mexican Moment del que tanto se habló después de la Reforma Energética y de la exitosa visita presidencial a Nueva York.
Es difícil entender por qué sorprendió la crisis de Iguala. No porque no se supiera de las relaciones de muchos presidentes municipales y policías estatales de la región con los grupos criminales. Tampoco nadie tendría que sorprenderse de que el gobernador Ángel Aguirre le haya fallado a las autoridades federales cuando le pidieron el mismo sábado 27 de septiembre que tuviera el control de la situación y no perdiera de vista al presidente municipal: las lealtades no son su fuerte, y en el PRI lo debería de saber mejor que nadie. Mucho menos tendría que haber sido sorpresivo que el estado no estuviera en condiciones de afrontar una crisis: no pudo con la muerte de otros dos estudiantes y la del trabajador de una gasolinera en la autopista del Sol, al comienzo de la administración local; tampoco durante Ingrid y Manuel; era previsible que ahora tampoco podría.
¿Qué ha fallado entonces? Creo que el mayor problema es que en la administración federal se autoconvencieron de que la situación de seguridad estaba controlada, que el control mediático permitía un cambio en las percepciones, que la coordinación y la buena fe con los gobiernos estatales era suficiente, y que todo ello era parte de una nueva estrategia. Aquí hemos dicho muchas veces, desde la campaña electoral, cuando todos hablaban de una nueva estrategia de seguridad, que en este tema nadie inventa el hilo negro: no puede haber nuevas estrategias de seguridad, lo que puede haber, y eso sí se hizo, son nuevas políticas para implementar esas estrategias. Pero las medidas a implementar son las mismas: construcción de nuevas instituciones policiales locales, basadas en un nuevo modelo, copiado de la Policía Federal; persecución de jefes de bandas y desarticulación de éstas; reformar el Ministerio Público y el sistema judicial para evitar la impunidad y sobre todo trabajar desde el ámbito local: el municipal y el estatal, para evitar sorpresas como las de Iguala. Hay lugares donde se han hecho bien las cosas, con toda la gama de grises que se quiera, como Nuevo León o Chihuahua, antes Baja California. Otros donde se intenta avanzar. Pero otros donde sencillamente no hay noticias del compromiso con la seguridad más allá de los discursos puntuales.
En el sexenio pasado la relación del gobierno federal con muchos gobernadores no fue buena. En éste, esa relación ha mejorado. Pero muchos gobiernos locales (el caso de Guerrero es paradigmático) siguen haciendo lo mismo que hacían en el sexenio pasado: se sientan en las reuniones, dicen a todo que sí, apoyan en lo que se les pide y luego no implementan las políticas en sus ámbitos de decisión. Se instalan en su zona de confort y complicidades. Hasta que una crisis los sacude e incluso así, como vemos en Guerrero, creen que pueden salir de ella simplemente navegando, dejando pasar el tiempo.
La crisis de la seguridad es compleja, no se resuelve en forma sencilla ni con gestos dramáticos, tampoco simplemente con diálogo y coordinación, necesarios ambos pero insuficientes. Hay que trabajar en lo político y lo legal para hacer lo que no se pudo en el pasado: llevar al cuerpo legal las acciones que se deben acometer, que no queden al buen entender de gobernadores y presidentes municipales; establecer medidas que sean inflexibles en la exigencia de que esas políticas se cumplan: pasa con el nuevo modelo policial (¿en qué se dio un sólo paso en Guerrero, y podríamos decir lo mismo en otros estados, en estos años en ese sentido?); con el Mando Único; con la reforma del sistema penal; de las procuradurías; con los mecanismos de control de confianza; con el control presupuestal en gastos de seguridad (y en muchos otros ámbitos). Más allá de la buena voluntad debe haber un mandato legal para avanzar en estos temas y debe haber claros y transparentes mecanismos de revocación de mandato para quien no cumpla con ellas. El gobierno federal se puede hacer cargo de muchas cosas, pero tarde o temprano, si las soluciones no comienzan a darse en los estados y municipios, la Federación se ve rebasada. Ocurrió el sexenio pasado, está ocurriendo en éste.
Tenemos que ver a un gobierno federal dando una vuelta de tuerca a sus políticas de seguridad, vuelta de tuerca que debe comenzar por aceptar que la seguridad es, junto con la economía, el mayor desafío que tiene el país. Y actuar en consecuencia, haciendo para la seguridad, reformas estructurales tan profundas o más, porque la situación lo amerita, como las logradas en la energía o las telecomunicaciones. Y para eso se necesita asumir que en ese ámbito hay mucho por hacer, y escuchar a quienes más saben, no sólo a los que más adulan.
Cambios
Habrá dos movimientos importantes en el gobierno federal. El muy eficaz y experimentado Rodrigo Archundia deja la subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada, la SEIDO, para ser parte de la nueva Fiscalía general. Se encargará de una de las fiscalía regionales. Y en la SCT, que encabeza Gerardo Ruiz Esparza, el subsecretario Carlos Almada, uno de los mejores funcionarios públicos del país, dejará esa posición para asumir una muy importante tarea en el servicio exterior. Éxito a ambos.
∞∞
EL BORREGO SOBRE EL ALCALDE DE IGUALA/Francisco Garfias
Excelsior
El asesor entró como tromba a las oficinas del senador del PRD, Alejandro Encinas, presidente de la Comisión Bicameral de Seguridad, en los momentos en que lo entrevistábamos. “¡Ya lo agarraron!” le dijo, mientras mostraba un mensaje en su celular.
No necesitó precisar de quién hablaba. Todos los que nos encontrábamos allí entendimos de inmediato que se refería al desaforado alcalde de Iguala, José Luis Abarca.
Abarca, acusado por la PGR de ser el autor intelectual del asesinato de seis personas y la desaparición de 43 normalistas.
Era una versión bomba. Nos alegramos. Pero teníamos un problema. La entrevista con el senador del PRD giraba en torno a la imposibilidad de las autoridades de capturar a los responsables de la tragedia de Iguala.
El equipo de producción de Excélsior Televisión ya había desmontado las cámaras. A colocarlas de nuevo. Encinas le dio crédito a su asesor. Nosotros también. Así que a repetir esa parte.
—¿La captura de Abarca ayuda a palear la agitación social que este caso ha provocado?—Preguntamos.
—Yo digo que no necesariamente, quizá incremente la indignación y la irritación social con la que operó. Esto va a ayudar a dar respuesta a muchas de las preguntas que hemos formulado en torno al móvil, cómo se hizo la operación, cuáles son sus vínculos con la delincuencia organizada, y cuáles son sus vínculos dentro de la estructura del PRD. Puede ser un piedra angular en el desarrollo de la investigación.
Encinas se levantó y se fue apenas terminó su declaración. Tenía prisa. Iba a entrevistarse con familiares de los normalistas desaparecidos que se encontraban en esos momentos en el Senado.
Ya de salida nos lo volvimos a topar. Nos comentó espontáneo: “Sofío (Ramírez) dice que ya habló con el gobernador y que le dijo que sí lo habían capturado (a Abarca)”.
Se trataba de una versión que le llegaba al presidente de la Comisión Bicameral de Seguridad. Eso le daba peso. Decidimos tuitear lo que vimos y lo que oímos. Se trataba de una versión que le llegaba al presidente de la Comisión Bicameral de Seguridad. Eso le daba peso.
Escribimos un primer tuit: “Lo escuché en voz de un asistente de Alejandro Encinas. Le dijo al senador del PRD: ¡Ya lo agarraron! Se refería al alcalde de Iguala JLA”.
Y otro: “No es oficial. Es sólo lo que escuché”. Uno más: “Sofío Ramírez (senador) le dijo a Encinas que el gobernador Aguirre confirmó la detención del alcalde de Iguala JLA”.
La versión se extendió. El senador del PAN, Roberto Gil se nos acercó en el Patio del Federalismo —me cae que así se llama— y nos preguntó: “¿Qué tú dices que capturaron a Abarca?” Nuestro amigo Rubén Cortés, director del diario La Razón, llamó para preguntar.
A los dos les aclaré que yo no era el autor de la versión. Que sólo reporté lo que había escuchado en las oficinas de Encinas.
Pero el rumor creció y creció. El procurador Murillo Karam tuvo que salir a desmentirlo. Al final parece que la Marina capturó, pero a una pareja poblana que dio albergue a Abarca y su esposa.
La nota no fue la captura de Abarca, sino la licencia de el gobernador de Guerrero. Lejos quedó el “Aguirre no se raja” de los primeros días de la crisis.
Antes de las seis de la tarde anunció su decisión. Se va, dijo, para favorecer un clima político que ponga solución.
“En este escenario de tragedia me niego a que el debate público se centre en si el gobernador debe o no permanecer en el cargo. La prioridad debe ser continuar con la búsqueda de los estudiantes desaparecidos y los responsables sean castigados”, puntualizó.
En Guerrero ya mueven como sustituta de Ángel Aguirre a Beatriz Mojica Morga, secretaria de Desarrollo Social. Es de la corriente de Los Chuchos. Pero el senador poblano Luis Miguel Barbosa, quien recientemente rompió con la corriente dominante del PRD, no parece estar de acuerdo.
“Es un error. Debe ser una propuesta de perfil ciudadano y no partidario. No que Beatriz no tenga capacidad. Pero hay que ver por restablecer la confianza en Guerrero y no por guardar las posiciones”, declaró el presidente de la Mesa Directiva.
Sus palabras no fueron del gusto de Benjamín Robles. “No estoy de acuerdo”, musitó para sí.
De la licencia de Aguirre hablamos con Jorge Luis Preciado.
“Lo que abone a resolver la crisis en Guerrero ayuda. Si vemos las protestas del miércoles podemos pensar que eso es lo que los movió. No puedes mantener en tu posición sin hacer caso del ciudadano. Saludo la decisión del gobernador.
“Pero lo más grave sigue sin resolverse. Al día de hoy no aparecen los normalistas. No quiero ni pensar que no los encuentren vivos. Eso va a incendiar todo el país. Sería un mensaje terrible al mundo. Eso no se había visto desde hace 46 años. Aspiro a que los encuentren vivos. Ojalá estén en la sierra, ojalá estén escondidos.”
La senadora del PAN, Mariana Gómez del Campo, andaba ayer muy contenta. No era para menos. El jefe nacional de su partido, Ricardo Anaya, le dio todo su respaldo para que participe en el proceso de elección del nuevo ombudsman nacional. La mayoría de su grupo parlamentario también.
Y es que un grupo de organizaciones y notables le pidieron públicamente a la senadora del PAN que se excuse de participar en el proceso de elección, porque es “comadre” de Raúl Plascencia, quien busca reelegirse como titular de la CNDH.
Sergio Aguayo, Rocío Culebro, y el exsacerdote Roberto Athie consideran que su condición la imposibilita para participar en la elección del próximo defensor nacional de los derechos humanos.
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