Publicado el martes 12 de abril del 2011 en El Nuevo Herald
Vargas Llosa podría apoyar a Humala
El Premio Nobel de Literatura peruano, Mario Vargas Llosa, aseguró el martes en Santiago que en determinadas circunstancias votaría por el nacionalista Ollanta Humala en la segunda vuelta presidencial peruana pero que en cambio jamás lo haría por Keiko Fujimori.
“Por Humala quiero ver lo que va a pasar; cuáles son realmente las condiciones en las que él va a establecer alianzas. Vamos a ver. El tiempo lo dirá y cuando llegue el caso pues explicaré las razones por las que tomaría esta decisión”, aseguró Vargas Llosa en una entrevista con la Televisión Nacional de Chile (TVN).
En cambio, Vargas Llosa, quien fue derrotado por Alberto Fujimori en las elecciones presidenciales de 1990 en Perú, aseguró que “jamás” votaría por su hija, Keiko Fujimori.
Al escoger a Keiko Fujimori, hija de su más férreo adversario político, el ex presidente Alberto Fujimori (1990-2000), “los peruanos reivindican una de las dictaduras más atroces que hemos tenido, cuyos responsables están además en las cárceles, cumpliendo condenas de 25 años, empezando por Fujimori por los crímenes horrendo que cometieron y los robos espantoso”, dijo el escritor.
“Yo por eso no votaría jamás”, agregó.
Vargas Llosa arribó el lunes a Chile para recibir este martes el grado de Doctor Honoris Causa de la privada Universidad Andrés Bello.
El escritor, galardonado en el 2010 con el Nobel de Literatura, señaló en el 2009 que esa combinación era como elegir entre el sida y un cáncer terminal.
El candidato de izquierda Ollanta Humala ganó la primera vuelta electoral el domingo en Perú y se enfrentará el 5 de junio a la congresista de derecha Keiko Fujimori, que se consolida en el segundo lugar.
Tras las elecciones el escritor peruano dijo al diario La Vanguardia de Barcelona, que Humala es “[el presidente venezolano Hugo] Chávez con un lenguaje abrasileñado; la catástrofe”, mientras que de la otra candidata señaló: “con Keiko, los criminales y los asesinos pasarían de la cárcel al gobierno”.
Dos de los candidatos de derecha derrotados en la primera vuelta expresaron posiciones encontradas. El economista Pedro Pablo Kuczynski dijo que no votaría por Humala mientras que un portavoz del ex presidente Alejandro Toledo dijo que no votarían por Fujimori, dejando abierto el juego de las alianzas.
“Yo no voto por Ollanta aunque se ha puesto un terno distinto o un color distinto”, declaró Kuczynski a una radio.
Gilberto Díaz, vocero del ex presidente Toledo, señaló que “lo que sí es claro es que no vamos a apoyar a Keiko Fujimori de ninguna manera porque ella representa lo que nosotros combatimos”.
Kuczynski, quien ocupó el tercer lugar, y Toledo, el cuarto, compartieron junto al ex alcalde de Lima Luis Castañeda el voto moderado, que ascendió al 45 por ciento.
El militar de izquierda Humala, que obtuvo el 32 por ciento de los votos, y la congresista de derecha Fujimori, que obtuvo 23 por ciento, están ubicados en los dos extremos del espectro político y deberán vencer el rechazo que les profesan amplios sectores que votaron por los moderados.
Daniel Abugattás, influyente congresista electo del movimiento de Humala, señaló el martes que mantuvieron “diálogos preliminares con varios grupos políticos entre ellos el partido de Toledo. Es deseable el apoyo de otras fuerzas si queremos un país con gobernabilidad”.
Humala, ya desde el lunes, se declaró abierto a realizar concesiones.
“Estamos dispuestos a hacer muchas concesiones por la unidad del Perú y vamos a conversar con todos los partidos políticos”, dijo.
Fujimori también dijo que convocarán “a los partidos políticos para dialogar y encontrar coincidencias”.
Así como los peruanos comienzan a pronunciarse por quiénes no votarían jamás, los candidatos también expresan lo que nunca harían, reflejando los temores que uno y otra inspiran.
“Jamás cerraré el Congreso, jamás cambiaré la Constitución para buscar una reelección”, dijo el martes Fujimori, refiriéndose respectivamente al autogolpe de su padre, el ex presidente Alberto Fujimori en 1992, y a una promesa de su rival Humala.
Humala, a quienes sus rivales acusan de estar alineado con el presidente venezolano Hugo Chávez, señaló en una entrevista a una radio que no hará una diplomacia conflictiva y que en su gobierno “nadie va a poner cortapisas a la inversión”.
En el caso de Humala las resistencias tienen que ver con su propuesta de Asamblea Constituyente para modificar la Carta Magna y de cambiar el modelo económico que ha llevado al Perú a tener el mayor crecimiento en América Latina en la última década.
En el de Fujimori, el temor proviene de su identificación con el gobierno de su padre, que está condenado a 25 años de prisión por violación a los derechos humanos durante la guerra antiguerrillera y corrupción en su gobierno, de 1990 al 2000.
“A pesar de que tiene el pasivo y el activo del gobierno de su padre, Fujimori tendrá el apoyo de los grupos económicos que obviamente ven en ella una alternativa más segura para mantener el modelo”, dijo Giovanna Peñaflor directora de la consultora Imasen.
“Se habló poco de derechos humanos y poco de democracia, temas de los que tendrán que hablarse hoy en día y que conciernen al gobierno de Fujimori”, agregó.
Peñaflor aseguró que la fortaleza de Humala es que “encarna el cambio por no haber gobernado antes. Además tiene un tono moderado que viene desde hace meses y que tiene que mantener”.
Sostiene que los votantes del ex ministro Kuczynski, mayoritariamente de los sectores más ricos, se irán más naturalmente con Keiko Fujimori “por su forma de pensar”, mientras “en el caso de Toledo me resulta claro que su electorado es más cercano a Ollanta”.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario