Opinión de mi amigo Alejandro
Coria, tomado de facebook.
El
asunto de MVS–Carmen Aristegui me recuerda lo ocurrido entre el periódico La
Jornada y el reportero David Carrizales.
En junio del 2013 Carrizales,
corresponsal del Diario en Nuevo León, fue despedido de maneja injustificada y
sin que se le indemnizara conforme a la ley, según denunció entonces. Antes de
ello había sido hostigado laboralmente. Las misivas que dirigió a la directora
del periódico no fueron respondidas, aunque algunas estaban acompañadas de las
firmas de apoyo de periodistas. Comenzó entonces una cruzada –eso fue- en redes
sociales para exigir justicia a su situación. Halló el apoyo de numerosas
personas, organizaciones sociales y algunos medios.
Durante
22 años David Carrizales colaboró en La Jornada en calidad de reportero
contratado por honorarios. En todos esos años no le reconocieron más beneficio
que 30 días de aguinaldo anual, según sus propias palabras. Los abogados del
medio argumentaban que carecía de todo derecho laboral por haber trabajado
precisamente por honorarios. Al sostener su reclamo le ofrecieron inicialmente
una prima de antigüedad por el salario mínimo nacional, no por el profesional,
y 7.44 días de salario por concepto de aguinaldo. No habría ningún tipo de
indemnización y mucho menos 20 días de salario por cada año laborado, de
acuerdo con la ley. Dadas las condiciones y tomando en cuenta la actitud
condescendiente, falsamente generosa de los abogados, Carrizales se negó a
aceptarlo.
El
Diario recurrió a tácticas dilatorias: La solicitud del reportero tenía que ser
llevada a la consideración de la Gerencia; después, que era la Directora quien
debía dar el visto bueno; posteriormente, que la Dirección no podía decidir sin
la aprobación del Consejo de Demos Desarrollo de Medios.
La
Revista Etcétera publicó el 4 de septiembre de ese año, en su página de
internet, una nota bajo el título “La Jornada despide a reportero sin respetar
sus derechos; éste acusa al diario de quiebra moral”. Al día siguiente publicó
imágenes de twitter de personas que cuestionaban a Julio Hernández, John
Ackerman, Alfredo Jalife, Jeraro Villamil y Enrique Galván Ochoa acerca de su
postura sobre el despido de Carrizales. Sólo Galván dio respuesta, si bien fue
evasiva: “Por lo que leo el asunto ya está litigándose. Esperemos a conocer el
fallo”.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario