19 mar 2024

Dolia Estevez en la mañanera, del martes 19 de marzo/ contexto

Dolia Estévez, escribió el pasado 4 de marzo de 2024 en Ejecentral.co

@DoliaEstevez


La injerencia de Morena y el adoctrinamiento en territorio estadounidense del  @infpmorena que dirige @fisgonmonero  pueden ser violatorios de la ley FARA del @TheJusticeDept  que regula actividades políticas y de influencia de extranjeros. 

@EjeCentral

7:36 a. m. · 4 mar. 2024

Morena, injerencista/ Dolia-Estévez_redes

Ejecentral.com, Marzo 4, 2024

A diferencia de los descendientes de mexicanos que lucharon por una identidad propia contra el racismo y la marginación en la década de los 60, el activismo y adoctrinamiento de Morena en Estados Unidos es injerencista, vengativo y probablemente ilegal. La vasta mayoría de los mexicanos que emigra viene a trabajar, no a protestar contra Estados Unidos. No conocen, ni les importan los pleitos de López Obrador con los medios estadounidenses.

La protesta contra The New York Times el domingo antepasado, por lo tanto, no fue una expresión de apoyo espontánea de migrantes, sino un acto orquestado por un puñado de fanáticos dispuestos a dar la vida por el amado líder de ser necesario. Convocada por el membrete “Comité Morena New York 1”, cuyo lema es “4T sin fronteras”, un centenar de agitadores, en su mayoría indocumentados, se plantó frente a las oficinas del emblemático diario en el corazón de Manhattan para insultarlo por publicar un artículo que hizo que el inquilino de Palacio Nacional montara en cólera.

Fuera de sí, dos días antes, López había atacado a la corresponsal en México del “pasquín inmundo” y reveló sus datos personales, sin faltar las consabidas calumnias a críticos (servidora incluida). YouTube tuvo que retirar el video por ser ilegal. “La Estatua de la Libertad se ha convertido en un símbolo vacío”, lanzó López Obrador indignado en su cuenta de X (antes Twitter).

Menos visible, pero más injerencista es el soterrado adoctrinamiento antiamericano de la “militancia en el exterior” contra el “imperio americano” que realiza el Instituto Nacional de Formación Política de Morena, INFP, dirigido por Rafael Barajas, El Fisgón, considerado por la revista Etcétera como uno de los propagandistas más beneficiados por el actual gobierno en términos de fama y de recursos pecuniarios, pues acaba de ganar el sorteo de Morena para ser candidato al Senado. En noviembre de 2022 viajó a Nueva York para conducir un foro en el Bronx en el que Alina Duarte, “coordinadora internacional” del INFP, autodefinida como “periodista militante Castro-Chavista”, exhortó a los migrantes a abrir los ojos y “replicar las luchas populares en el corazón del imperio” contra la “represión” que también sufre el pueblo estadounidense.

La exempleada de TeleSUR, canal de Maduro bajo la mira del Capitolio por su incendiario antiamericanismo bolivariano, acusó a los partidos Demócrata y Republicano de ser caras de la misma moneda y condenó el apoyo militar que brindan a Ucrania. La también “corresponsal” en México de Canal Rojo del desestabilizador español prorruso, Pablo Iglesias, llamó a una “tercera vía democrática” para neutralizarlos. El Fisgón, por su parte, pidió “enterrar el hacha”, porque advirtió: “lo que se viene es muy delicado” (video vía Facebook).

Me pregunto cómo reaccionaría AMLO si el presidente del Comité de Capacitación del Partido Demócrata viajara a Guadalajara a instigar a los estadounidenses residentes a subvertir el orden unipartidista mexicano. Bajo la influencia de El Fisgón y demás ideólogos filorrusos en su círculo compacto de amigos, desde que tomó posesión, AMLO optó por una política exterior antiamericana de confrontación, “desafiando el imperialismo” (El Fisgón dixit), lo que ha dañado la relación con un Washington que se esfuerza en apaciguarlo negando reiteradamente entrometerse en asuntos internos mexicanos, como acusa.

Las actuaciones de El Fisgón y del comité neoyorquino de Morena pueden ser violatorias. Bajo la Ley de Registro de Agentes Extranjeros (FARA, por sus siglas en inglés), ciudadanos de otros países que realizan actividades políticas y de influencia en beneficio de actores extranjeros, sean Putin, Xi Jinping o AMLO, están obligados a registrarse, reportar regularmente sus actividades y el gasto que incurren en ellas al Departamento de Justicia que, vale señalar, en fechas recientes ha endurecido la persecución de transgresores. No solo eso. El adoctrinamiento ideológico no está permitido bajo una visa de turista.

Dudo que El Fisgón haya ingresado con otro visado. Amistoso recordatorio: en Estados Unidos, nadie está por encima de la ley.

Reacción en la mañanera de este martes 19 de marzo..

Nancy Rodríguez, de Oro Sólido y Empuje Migrante.

Presidente, si me hace favor su mensaje en relación a lo siguiente: la comunicadora de nombre Dolia Estévez, quien colabora con Carmen Aristegui y algunos otros medios, publicó un escrito en relación a la manifestación de hermanos migrantes frente al New York Times hace unos días. En dicho texto, presidente, calificó, textual, de agitadores y fanáticos a los hermanos migrantes, y aseguró en este escrito, lo dice textual, ‘se trataba de un adoctrinamiento injerencista, vengativo e ilegal; también dijo textual que era ‘un centenar de agitadores’, con tintes claramente discriminatorios, clasistas y racistas, presidente, contra estos mexicanos, porque son mexicanos.

Ante este tal desprecio, los mexicanos allá en Estados Unidos hicieron una carta que, si me permite, aquí se la leo, dice: ‘Nueva York, 11 de marzo del 2024.

‘Dolia Estévez.

‘Nos dirigimos a usted con profundo descontento y decepción tras sus recientes comentarios al etiquetarnos como agitadores y fanáticos. Consideramos sus palabras injustas y despectivas hacia aquellos migrantes que legítimamente buscan contribuir al debate público y social, y que además están muy politizados e informados.

‘Es lamentable que usted haya optado por desacreditar a personas que simplemente ejercen su derecho a la libertad de expresión, que están protegidas por las constituciones, tanto de Estados Unidos como de México. Estigmatizar a quienes discrepan con usted como agitadores y fanáticos demuestra una falta de tolerancia y apertura al disenso, que son fundamentales en cualquier sociedad democrática.

‘Le instamos a reflexionar sobre sus palabras como periodista. Usted tiene la responsabilidad de promover un ambiente de respeto y tolerancia hacia todas las voces, incluso a aquellas con las que puede no estar de acuerdo.

‘Le invitamos a Nueva York a usted y otros medios que minimizan nuestras acciones o desacreditan nuestras participaciones a entrevistarnos en persona y no desde sus escritorios escribir de mala fe. Nosotros estamos comprometidos a defender a transformación de México desde donde estemos, siempre de forma pacífica, porque creemos que se puede cambiar, mejorar, pero nunca por la fuerza siempre con la razón.’

Es la carta. ¿Su reflexión al respecto, presidente?

PRESIDENTE: Pues es una postura de Dolia Estévez de siempre. Ella hace un periodismo, y está en su derecho, muy favorable al oficialismo.

INTERLOCUTORA: Pero ¿al oficialismo?

PRESIDENTE: Sí. No es un periodismo que defienda a migrantes, que defienda al pueblo de México, es un periodismo de cúpula que predominaba antes. Incluso son ellos los más desconcertados con lo que está sucediendo en nuestro país y no aceptan los reacomodos que se han dado en México y en su pueblo, porque ellos eran los voceros, eran los sabiondos en política exterior, eran los internacionalistas, es así como Castañeda, como el que tenía de embajador Calderón…

INTERVENCIÓN: Sarukhán.

PRESIDENTE: Sarukhán. Dolia Estévez. Déjenme acordar de otros.

Bueno, y periodistas como Jorge Ramos, León Krauze, todos ellos estaban ahí alrededor del Instituto Wilson y del Departamento de Estado, y claro que qué iban a estar pensando en que los mexicanos y los hermanos migrantes tuviesen tanta consciencia.

Entonces: ‘¿Qué pasó? ¿Cómo los adoctrinaron? ¿Cómo los volvieron fanáticos?’ Esta misma periodista, leí hace poco que le echaba la culpa a Rafael Barajas ‘el Fisgón’ que él los había adoctrinado; pues me quito el sombrero frente a Rafael, imagínense, qué maestro. Se debe estar riendo ahora que me está escuchando, si está conectado.

No, es que tienen el problema que son muy clasistas estas gentes, y muy racistas, y para ellos el pueblo no existe, y el pueblo no es capaz de tomar consciencia y de politizarse. Es un problema que tienen y que tienen que ir resolviendo con mucha humildad, aceptando el conocimiento, la inteligencia de los otros, no discriminando, no considerándose superiores.

Si no es un asunto de sentirnos iguales todos. Yo conozco gente humilde, humilde, humilde. Bueno, aquí he dicho que quienes más me han orientado, adoctrinado, han sido maestros, campesinos, gente del pueblo, sabios. O sea, qué me puede —con todo respeto— enseñar o cómo voy a yo a seguir los pasos de alguien nada más porque estudió en Harvard, pero no aprendió, o involucionó, y ya se siente superior al pueblo.

Ese es el fenómeno, ¿no?, es lo del New York Times, lo del escritor este, sí periodista premiado, ¿no?

Para Dolia, el Tim Golden es la excelencia, pero… Y todos los que participan de asesores del bloque conservador —con todo respeto— no conocen la realidad de nuestro pueblo porque viven en otro mundo, se divorcian, se separan, no recogen los sentimientos de la gente, por ese afán, por esas ínfulas de superioridad. Eso les afecta.

Entonces, en vez de estarse amargando la vida, deberían de replantearse las cosas. Es de sabios cambiar de opinión.

Por ejemplo, toda la campaña ‘presidente narcotraficante’, cientos, millones de menciones. Hoy les voy a mostrar, voy a presumirles un poco, voy a tirar aceite, de una encuesta que publica el Reforma. Si fuese La Jornada estarían diciendo mis adversarios: ‘Claro, pues es La Jornada, pero es el Reforma, es el boletín del conservadurismo, nada más que debe de ser muy buena la empresa encuestadora que tienen, honesta la gente que hace estas encuestas.

No podemos hablar de la cosa electoral, pero sí podemos decir cómo ve el pueblo al gobierno, ¿no?, eso no es ningún problema. Esa, nada más esa, las otras no porque ahí sí nos afectan. Pero miren cómo está el de Tepetitán.

Agradecerle mucho a la gente, al pueblo. Amor con amor se paga. Es otra enseñanza, el pueblo no traiciona.

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