Columnas

TEMPLO MAYOR/Reforma

UNA VEZ QUE la Presidencia fue notificada de que está por terminar el periodo de dos ministros de la Suprema Corte, comienzan a sonar quienes podrían integrarse al máximo tribunal.

EN DÍAS RECIENTES se escuchan mucho los nombres de tres magistradas para integrar alguna de las dos ternas que el Ejecutivo enviará al Senado.

SE TRATA de María del Carmen Alanís, especializada en asuntos electorales; Martha María del Carmen Hernández, experta en juicios orales, y de Yasmín Esquivel Mossa, quien forma parte del Tribunal de lo Contencioso Administrativo del DF.

 TRES perfiles tan diversos como interesantes por los temas que dominan. Ya se verá si llegan a la final.

 ALGO raro le pasó a Felipe Calderón después de la cena que se ofreció el jueves a los participantes en un foro energético del que el ex inquilino de Los Pinos formó parte.

 AL TERMINAR el acto oficial, se reunió con el ex presidente español José María Aznar en la terraza del Hotel Four Seasons para tomar una copa y fumarse un puro.

 TAMBIÉN estaba por ahí el ex mandatario de Colombia Andrés Pastrana, y cuentan los presentes que Calderón se quedó dormido en la mesa y que sus escoltas tuvieron que llevárselo a su casa.

 OJALÁ que sólo haya sido la desvelada y no, como especulan algunos, un problema de ¡salud!

VAYA semana de contrastes para el ex diputado perredista Fernando Belaunzarán.

SIENDO uno de los principales impulsores de la legalización de la mariguana, anda feliz por la determinación de la Primera Sala de la Suprema Corte que amparó a cuatro ciudadanos para que puedan cultivarla y consumirla con fines recreativos.

PERO a ver cómo le va hoy al también aspirante a la presidencia nacional del PRD en la sesión del Consejo Nacional, en la que se da por descontado que se ungirá sin mayor trámite a su contrincante Agustín Basave.

Y CON ESO de que Ángel Ávila, quien preside dicho Consejo, afirma que el proceso está blindado contra impugnaciones, y que se dice que la secretaría general ya está apartada para la guerrerense Beatriz Mojica, ni modo que Belaunzarán acabe aceptando un cargo menor en la estructura partidista que pretendía reformar.

¿O SÍ?

EN EL 2019, cuando acabe el periodo para el que fue electo Enrique Luis Graue como rector, se cumplirán 20 años continuos de médicos al frente de la UNAM.

FUERON 8 años del psiquiatra Juan Ramón de la Fuente, otros 8 del especialista en medicina comunitaria José Narro y serán al menos cuatro para el oftalmólogo recién designado.

Y AUNQUE está por verse si esas dos décadas serán suficientes para terminar la cirugía mayor que comenzó en 1999, lo cierto es que los egresados de Medicina han sentado sus reales en CU.

INCLUSO hay quienes dicen que, hoy por hoy, UNAM significa Universidad Nacional Autónoma ¡de Médicos!

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TRASCENDIÓ&Mlen

Que el presidente de Cuba, Raúl Castro, ayer siempre estuvo acompañado por su nieto mayor, quien incluso rompió el protocolo en el pase de revista de las tropas de honor, en su visita a México.

Se acostumbra que solo los dos presidentes caminen por una alfombra roja, pero en esta ocasión el joven estuvo todo el tiempo detrás y al lado de su abuelo, quien por cierto advirtió que daría un discurso breve, porque habla poco, ya que de niños su hermano Fidel siempre acaparaba el micrófono.

Que la Secretaría de Gobernación presentó al grupo de expertos de la CIDH un borrador de la nueva ley contra la desaparición forzada con algunas observaciones a la norma, que deberá estar aprobada hacia enero del próximo año.

Entre las diferencias de opinión se encuentran que la ley no solo debe normar las futuras desapariciones, sino las que están denunciadas sin resolverse, porque se trata de un delito que por diversas interpretaciones jurídicas se considera de constante ejecución.

Que apenas se conoció el nombramiento de Enrique Luis Graue como rector de la UNAM, el primero en acudir a la Facultad de Medicina a felicitarlo y darle un gran abrazo fue Sergio Alcocer.

Otros que manifestaron su respaldo fueron Leonardo Lomelí, director de la Facultad de Economía, y Juan Pedro Laclette, coordinador de la Unidad de Posgrado.

Para que no se diga que no fueron dignos contrincantes en la carrera por la sucesión en la Rectoría.

Que la bancada de Morena en la Cámara de Diputados buscará que programas instaurados durante la gestión de Andrés Manuel López Obrador como jefe de Gobierno del Distrito Federal se repliquen a escala nacional.

El primero de ellos será la pensión para adultos mayores, que ahora se aplica en la capital del país.

Que hablando de Morena, casualmente luego de que cientos de personas se manifestaran el jueves pasado en la ALDF contra David Cervantes —asambleísta de ese partido— por boicotear un proyecto de vivienda de interés social en Tlalpan, este viernes la delegada Claudia Sheinbaum —también morena— decidió clausurar la obra.

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Vaya trabajo en equipo./Editorial El Universal

  En más de un siglo, la vida académica, cultural y científica de México ha girado en torno a la Universidad Nacional. Posee museos de distintas disciplinas, es una de las más importantes casas editoras de libros, ofrece estudios de preparatoria a doctorado, sus recintos de divulgación de la cultura son de los más importantes del país, así como sus centros de investigación; es formadora de artistas y de deportistas, de cineastas y de escritores. Su prestigio trasciende las fronteras. Una institución así implica un reto enorme para dirigir y para lograr cada día más.

Con el fin de encabezar el desafío que lo anterior representa, la Junta de Gobierno de la Universidad Nacional Autónoma de México designó ayer a Enrique Luis Graue Wiechers como el próximo rector, en sustitución de José Narro Robles, que deja el cargo el próximo 16 de noviembre.

De acuerdo con la Junta, Graue es quien mejor cumple el perfil al ponderar —entre las propuestas de los 10 aspirantes entrevistados— la calidad y la viabilidad institucional del proyecto, la demanda de innovar en los procesos docentes, la promoción de la vinculación entre investigación y docencia, así como entre Universidad y sociedad, además de valorar la situación de esta casa de estudios en el contexto nacional e internacional.

Graue anticipó que en su rectorado se consolidará lo que ha alcanzado la UNAM hasta ahora y mostró mesura al afirmar que se crecerá, pero sin deteriorar la docencia y la investigación; uno de los riesgos en los que puede caer la Universidad es apostar a crecer más, pero a costa de sacrificar la calidad de su profesorado o investigadores, lo cual debe evitarse.

 Mencionó también que hablará con los otros nueve candidatos para plantear la posibilidad de sumarlos a su proyecto. Dar a conocer esa intención en sus primeras declaraciones públicas tras conocer la designación de la Junta de Gobierno, es un acto que debe reconocerse. Luego de un proceso de selección de 44 días, la competencia debe quedar atrás para dar inicio al proyecto de la Universidad para los cuatro próximos años, tarea en la que deben colaborar los universitarios más destacados.

La Universidad que el país necesita es aquella que siga en la ruta de lo que ha mostrado en las últimas décadas: compromiso con el desarrollo del país, preparación de jóvenes, impulso a la investigación y a las distintas áreas de conocimiento. Reafirmar lo conseguido y trazarse siempre objetivos cada vez más ambiciosos son tareas irrenunciables en el quehacer de la más importante universidad de México y de las de mayor prestigio en Iberoamérica. El país lo agradecerá.

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FRENTES POLÍTICOS/Excelsr

I.Comes y te quedas. Vaya que cambian los tiempos. El reloj político marca la recomposición de alianzas. En visita de Estado inédita, Enrique Peña Nieto, presidente de México, recibió a Raúl Castro Ruz, el mandatario cubano, quien atestiguó la firma de cinco acuerdos entre ambos países en materia migratoria, turística, académica y para el campo. Tradicionalmente amigos, entre ambas naciones existe una relación especial basada no sólo en la vecindad geográfica, sino también en las tradiciones comunes de lucha y vínculos culturales, dijo Castro Ruz. Cierto. Históricamente, México nunca abandonó a los cubanos, aun en los peores momentos. Siempre mal el comes y te vas.

II.Teatrote. La escenificación continúa. Carlos Navarrete renunció al Partido de la Revolución Democrática (PRD), luego de 13 meses al frente y tras hundirlo a niveles nunca antes vistos. Con carácter irrevocable, entregó su renuncia a Ángel Ávila Romero, el presidente de la mesa directiva del Consejo Nacional, a horas de que 403 perredistas elijan a sus nuevos dirigentes nacionales. Navarrete calificó su gestión como intensa y turbulenta, como ha sido toda su carrera política. Ávila aseveró que la futura dirigencia contará con el mayor consenso de su máximo órgano de dirección. Todo está puesto para que el expriista Agustín Basave entre como bateador emergente. La mala, el juego está perdido.

III.Habemus rector. Muy bien recibida por la comunidad universitaria, y por todos los sectores de la sociedad, fue la designación como nuevo rector de Enrique Luis Graue Wiechers. La máxima casa de estudios quedó a cargo, por tercera ocasión consecutiva, de un emanado de la Facultad de Medicina; le antecedieron Juan Ramón de la Fuente y José Narro. El director de la Facultad de Medicina fue elegido por la Junta de Gobierno de la Universidad y tomará posesión a partir del próximo 17 de noviembre y hasta 2019. Quien se quedó en el camino fue Sergio Alcocer, el exsubsecretario de Relaciones Exteriores. No le ayudó ser visto como el candidato del gobierno federal.

IV.Congruencias. Hay muchos a quienes la decisión de la Corte en torno al aval para la utilización de la mariguana con fines lúdicos y personales, no les hace mucha gracia. Y lejos de ello, no la ven como una solución. Ante el debate, Jaime Rodríguez El Bronco, de plano se opuso. El gobernador de Nuevo León dijo estar en desacuerdo con el tema con fines de recreación, ya que aseguró eso da oportunidad de abrirle las puertas a “otras perversiones” a la sociedad y a otras drogas como la cocaína, el crack. Que su gobierno optará mejor por brindar oportunidades de salir adelante a los adictos, conseguirles trabajo a quienes no pueden por su condición. Trabajar a profundidad el tema, pues.

V.Pausa médica. Miguel Ángel Mancera Espinosa, el jefe de Gobierno del Distrito Federal, se someterá a una cirugía en un brazo, por lo que suspenderá sus actividades temporalmente. Se trata de una cirugía ambulatoria en su brazo derecho obligada por una lesión que tiene debido a la práctica del boxeo. La intervención será ambulatoria y sólo requerirá de anestesia local, aseguró. Por ello suspenderá sus actividades del programa Tu Ciudad Te Requiere de este sábado. Hace un año del susto tras una operación del corazón, que debió ser de rutina y se complicó. Que esta vez todo marche perfecto. Lo importante es tener salud. Como dicen por ahí.

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BAJO RESERVa/ El Universal

 A todo vapor, visita del Papa

 Con el acelerador a fondo están los preparativos para la visita del papa Francisco a México, programada para febrero de 2016. En la Nunciatura han empezado los arreglos para alojar al pontífice y la sede diplomática se encuentra bajo resguardo del Estado Mayor Presidencial, a cargo del general Roberto Miranda Moreno. Las reuniones previas al visto bueno definitivo al programa de actividades se suceden una tras otra. El nuncio Christophe Pierre, decano del cuerpo diplomático acreditado en el país, acudió la noche del jueves a una recepción del presidente del Senado, el panista Roberto Gil Zuarth, quien lanza plegarias para que el jefe del Estado Vaticano acuda a una sesión solemne con los senadores. Muchos actores de la vida política nacional rezan para estar cerca del pontífice, nos comentan.

Barbosa y Madero, rencores que matan

Hubo el jueves una situación ideal para que el coordinador del PRD en el Senado, Miguel Barbosa Huerta, y el diputado federal del PAN Gustavo Madero limaran asperezas, luego del enfrentamiento que tuvieron por la intención de reducir al 50% el impuesto a los refrescos. Don Gustavo acudió a las instalaciones de la Cámara de Senadores para protestar como integrante del Consejo Consultivo del órgano legislativo. Perredista y panista estuvieron cerca, pero ni se miraron, menos se saludaron. Nos comentan que estuvieron muy bien portados y no se les vio intención alguna de cerrar el conflicto que ventilaron por redes sociales y del que el panista sacó la menor ganancia, pues se le salieron unas “gordas” para insultar a don Miguel. ¿Rencores que matan?

GIEI ve incumplimientos

 Algunos miembros del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes, el GIEI, que coadyuvan en la investigación del caso Ayotzinapa, han comenzado a expresar en reuniones privadas que se sienten insatisfechos con la cooperación del ala dura del gobierno federal. Han notado ciertos focos ámbar que les inquietan: por la parte técnica tienen el registro de que 42% de la información que han requerido no les ha sido entregada y por el lado económico señalan que llevan dos meses trabajando sin que les entreguen el presupuesto prometido. Por estos días analizan las declaraciones ministeriales de 12 militares, pero aún esperan que se cumpla el compromiso de que testifiquen otros 14, entre los que se encuentran los de mayor rango. Un informe sobre esto último, nos dicen, será dado a conocer en las próximas semanas. Y aunque aseguran que mantienen una relación de confianza con Roberto Campa, subsecretario de Gobernación, y Eber Omar Betanzos, subprocurador de Derechos Humanos, en el grupo de expertos crece la suspicacia de que otros funcionarios federales podrían estar desacelerando el avance de las investigaciones.

¿Un brindis por Basave?

Encuentros, charlas y comidas estuvieron a la orden del día, a unas horas de la elección del nuevo dirigente del PRD. Muy orondos estaban Guadalupe Acosta Naranjo —ex chucho y vicecoordinador de los diputados federales— y el ex coordinador de esa bancada en la Legislatura pasada, Miguel Alonso Raya, en una cantina de la colonia Condesa. Ambos analizaban los escenarios del partido con la llegada de Agustín Basave, quien también dialogaba a las afueras de un restaurante del Centro Histórico con líderes perredistas de Guerrero que empujan a Beatriz Mojica Morga como la secretaria general. Algunos grupos, principalmente Los Chuchos de Nueva Izquierda, quieren mantener su presencia en la dirección nacional del partido, nos comentan. ¿Un brindis por Basave?

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UNAM APOSTÓ AL EQUILIBRIO; OTRO MÉDICO A RECTORÍA/Salvador García Soto

 El nversal

En medio de una lucha que se polarizó entre dos grupos fuertes que representaban ideologías opuestas: el que apoyaba a Sergio Alcocer, cercano al oficialismo, y el bloque de izquierda que respaldaba a Rosaura Ruiz, la decisión de la Junta de Gobierno de la UNAM se inclinó por la opción intermedia que representaba el equilibrio y eligió como rector, por mayoría de sus 15 integrantes, a Enrique Graue, quien a partir de ayer se convirtió en el tercer médico de profesión que ocupa la rectoría de la Universidad Nacional en los últimos 16 años.

 Graue era director de la Facultad de Medicina, de donde también salieron Juan Ramón de la Fuente, rector de 1999 a 2007 y el saliente José Narro Robles de 2007 y hasta el próximo 16 de noviembre. La frase con la que el doctor se metió en la pelea por la Rectoría fue precisamente alusiva a su profesión: “Los médicos hemos demostrado ser buenos rectores”, dijo en una entrevista a EL UNIVERSAL en agosto pasado, cuando hizo públicas sus aspiraciones sin que se le viera como uno de los aspirantes más fuertes.

Sin embargo no fue su profesión de médico oftalmólogo lo que ayer lo llevó, a sus 64 años, a convertirse en el rector número 34 de la UNAM. Aunque oficialmente en el anuncio de su designación, el presidente de la Junta, René Millán, dijo que a Graue lo eligieron por ser quien mejor garantiza las condiciones que necesita la universidad, como “la calidad y viabilidad del proyecto, la estabilidad y los cambios institucionales a futuro, la imperiosa demanda de innovar en la promoción de los procesos docentes e impulsar en la formación de nuevas licenciaturas interdisciplinarias y la promoción entre investigación y docencia y entre universidad y sociedad”, al interior de la máxima casa de estudios la designación se interpretó como “salomónica”, ante el choque de grupos e ideologías que produjo esta elección.

Dos bloques en pugna. En uno de los procesos de sucesión más participativos que se recuerden en la UNAM, en donde 34 mil miembros de la comunidad académica y universitaria opinaron y se expresaron por los distintos candidatos, la efervescencia que despertó esta elección se manifestó en una fuerte movilización de grupos que se colocaron en dos bandos mayoritarios: por un lado quienes consideraban que el doctor Sergio Alcocer tenía el mejor perfil para ocupar la Rectoría y rechazaban el adjetivo de “candidato oficial o del gobierno” que le endilgaron al ingeniero, por su desempeño como subsecretario de Relaciones Exteriores del gobierno de Enrique Peña Nieto; y por el otro, quienes impulsaban a la doctora Rosaura Ruiz, directora de la Facultad de Ciencias, y a quien, por su larga trayectoria y solidez académica, sus seguidores la presentaban como “la primera mujer rectora de la UNAM”, contrario a la etiqueta de sus detractores que la relacionaban con la izquierda y hablaban de vínculos con el líder de Morena, Andrés Manuel López Obrador, que ella negaba.

La polarización permeó a la comunidad académica y estudiantil, al grado de que surgieron movimientos que comenzaron a cuestionar como “vertical, autoritario y poco democrático” el mecanismo de elección histórico y estatutario de la Universidad, a través del voto secreto de los 15 notables miembros de la Junta de Gobierno. En ese ambiente la Junta comenzó desde hace 44 días el proceso de selección con el registro de los aspirantes a los que evaluó según su trayectoria y desempeño académico. De 16 interesados, la Junta decidió que sólo 10 reunían el perfil y los requisitos para ser candidatos a la Rectoría. Conforme avanzaron las audiencias y la presentación de los proyectos de cada candidato, los ánimos subieron y la polarización creció.

El miércoles pasado por la tarde circularon en redes sociales los resultados de la “Evaluación Global a los Proyectos de Trabajo” de los candidatos a rector, atribuida a la Junta de Gobierno y en la que se afirmaba que Sergio Alcocer había sido el mejor evaluado con 84%, seguido de Héctor Hiram con 77% y Rosaura Ruiz con 69%. En ese puntaje el nuevo rector Enrique Graue aparecía en cuarta posición con 68%. Muchos comenzaron a especular sobre la inminente elección de Alcocer e incluso en columnas de opinión se llegó a hablar de que la elección ya estaba claramente definida por quien se veía como cercano al gobierno de Peña Nieto.

Pero ayer la Junta de Gobierno sorprendió con la designación de Graue, a quien consideró el mejor calificado, en una decisión que, si se lee políticamente, claramente apuesta a romper la confrontación y polarización de ideologías y grupos que ocurrió en esta sucesión. El nuevo rector es la opción de equilibrio que salomónicamente pone fin a etiquetas y especulaciones, justas o injustas sobre injerencias políticas oficiales o de partidos en la Universidad. La Junta de Gobierno reivindica así su autonomía. La UNAM seguirá esperando los tiempos en que una mujer ocupe su Rectoría y el rector Enrique Graue ofreció en su primer mensaje una “Rectoría de consolidación” en clara alusión a que dará continuidad al proyecto de ocho años de su colega José Narro, que a su vez continuó la ruta trazada por Juan Ramón de la Fuente. Los médicos, pues, siguen dominando la Universidad.

La versión de Martha. La consejera del Consejo de la Judicatura Federal, Martha María del Carmen Hernández, reconoce que, “como cualquier jurista y abogado” le gustaría aparecer en una terna para ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. “¿Cómo no querría?, para cualquiera que nos dediquemos a esto, y más si hemos hecho carrera en el Poder Judicial, es el máximo sueño. Ni siquiera llegar a ser ministro, ya estar en una terna es un gran logro para cualquiera”, dice la funcionaria judicial. Pero al mismo tiempo rechaza ser “incondicional” del presidente Enrique Peña Nieto y reivindica su trayectoria de 22 años en el Poder Judicial, donde comenzó como proyectista, juez, magistrada de Circuito y ahora integrante del Consejo de la Judicatura.

Esta abogada, originaria del DF, nacida en el antiguo pueblo de Aculco en 1963, y que acaba de titularse como doctora en Derecho por la Universidad Nacional de Educación a Distancia de Madrid, España, afirma provenir de una familia modesta y haberse formado “en la cultura del esfuerzo”. Explica que no tiene una relación personal con el presidente Peña Nieto, “al que apenas si he saludado un par de veces”, y aclara que su carrera la hizo desde sus inicios en el Poder Judicial, al que ingresó en 1992 como secretaria de Tribunal. Luego, en 2001, fue designada jueza segunda de Distrito en Zacatecas, jueza tercera de Distrito en materia de Amparo Penal en 2002, y el 17 de abril de 2005 fue designada magistrada del primer Tribunal Colegiado en Materia Penal en Toluca, Estado de México.

Sobre su paso de dos años como funcionaria del gobierno de Peña Nieto en el Estado de México (entre 2009 y 2011) explica que aceptó ser subprocuradora y luego subsecretaria de Asuntos Jurídicos para implementar el nuevo modelo penal acusatorio en el estado. La invitación se la hizo Luis Miranda, entonces secreario de Gobierno, y cuando dejó su cargo en el Poder Judicial, lo hizo con autorización del entonces presidente de la Suprema Corte, Guillermo Ortiz Mayagoitia. Tras fracasar como “notaria provisional” de la Notaría 169 en Huixquilucan —“porque no tenía ni clientes ni relaciones”— fue visitadora del Tribunal Electoral Federal y solicitó en 2012 su reingreso como magistrada de Circuito que le fue concedido en diciembre de 2013.

Como magistrada nuevamente, fue nombrada titular del Tercer Tribunal Unitario en Materia Penal. En esa etapa, dice, tuvo varias resoluciones adversas al gobierno federal, y ofrece que todas esas sentencias están disponibles si se solictian por transparencia. “No soy empleada del Presidente ni me conduzco como tal”, dice la consejera. “Nunca he hablado con nadie del gobierno, ni me han pedido nada. Como integrante de la Judicatura me conduzco con independencia porque esa es mi obligación constitucional y quien diga lo contrario, que revise mi carrera en el Poder Judicial, donde no tengo ninguna observación, ninguna acusación ni expediente, ni siquiera tuve rezagos cuando fui juez y magistrada”, dice Martha María del Carmen

Hoy su nombre suena, entre otros, como posible integrante de una terna para ser ministro de la Suprema Corte. No es la única mujer, también se menciona a las magistradas Rosa María Temblador Vidrio, de Puebla; Emma Fonseca, del DF, y María del Carmen Alanis, del Tribunal Electoral del Poder Judicial. Esas pueden ser algunas de las cartas si Peña Nieto opta por una terna femenina que garantice la presencia de género en la Corte, tras la salida el 30 de noviembre de la ministra Olga Sánchez Cordero.

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ARSENAL/Francisco Garfias

 EXcelsr

El gallo de Juan Ramón

El humo blanco arrojó al caballo negro. Los apostadores dirían que se hizo la chica. En el proceso de sucesión del rector de la UNAM para el periodo 2015-2019, ganó el candidato de Juan Ramón de la Fuente.

Enrique Graue Wiechers, 64 años, oftalmólogo, director de la Facultad de Medicina, fue elegido por la Junta de Gobierno de la UNAM para suceder a José Narro, uno de los rectores más queridos que ha tenido la Máxima Casa de Estudios.

Graue es el tercer médico en fila que llega al honroso cargo.

    A los que figuraban como favoritos les montaron efectivas campañas de descalificación. Sergio Alcocer, exsubsecretario de Relaciones Exteriores, y Francisco Bolívar Zapata, otrora coordinador de Ciencia y Tecnología de la Presidencia de la República, fueron presentados por sus críticos como “candidatos de Peña”.

La elección de cualquiera de ellos significaba un riesgo para la estabilidad de la Máxima Casa de Estudios.

En las redes sociales está el hashtag #AlertaUNAM  en el que se convocaba a la comunidad universitaria a una movilización en la explanada de rectoría, en caso de la “eventual imposición”.

En el campus universitario permanecen colgadas pancartas en las que se lee: “No permitamos que Peña Nieto meta las manos en la UNAM. ¡Fuera Sergio Alcocer! ¡Fuera Bolívar Zapata!”.

La otra candidata factible era Rosaura Ruiz, directora de la Facultad de Ciencias. Su perfil izquierdoso, su trayectoria de activista y su criterio independiente la hacían inviable para el gobierno federal.

Tuvimos información de buena fuente de que se la iban a “armar” en la Junta de Gobierno de la UNAM. Desde entonces intuimos que no habría rectora.

La Junta de Gobierno de la universidad ponderó la calidad y viabilidad del proyecto, la necesidad de equilibrar la estabilidad y los cambios institucionales del futuro, para elegir a Graue.

Pero también la imperiosa demanda de innovar en la promoción de los procesos docentes e impulsar nuevas licenciaturas.

El doctor Graue es el que mejor cumple con estas consideraciones, según los 14 cardenales de la Junta de Gobierno que lo eligieron. Normalmente son 15, pero a uno le valió la sucesión y de plano se fue de viaje.

    Porfirio Muñoz Ledo aspiraba a la medalla Belisario Domínguez, la máxima distinción que otorga el Senado. Es la quinta vez que este brillante y zigzagueante político mexicano estaba postulado para la codiciada presea.

Nos consta que anhelaba ese reconocimiento, pero de nuevo no se le hizo.

Los senadores optaron sorpresivamente por premiar al empresario Alberto Baillères, la  tercera fortuna de México, en una polémica decisión que los dividió.

Es la primera vez que la entrega de la medalla, creada  en tiempos de Adolfo Ruiz Cortines, no logra la unanimidad.

Algunos legisladores consideraron que el de Baillères no es el perfil que corresponde a una presea que honra al senador chiapaneco Belisario Domínguez, quien se opuso férreamente al usurpador Victoriano Huerta, y por ese motivo fue asesinado el 7 de octubre de 1913.

Buscamos a Porfirio en su celular para pedirle una reacción. Andaba en Mérida con lo de la visita de Raúl Castro, presidente de Cuba.

Antes de entrar a la comida ofrecida al hermano menor  de Fidel, alcanzó a decirnos: “No me voy a meter en eso: que juzgue la opinión pública; que el Senado asuma su responsabilidad”.

Y colgó.

    “¡Puesto!”, nos dijo el académico Agustín Basave, en víspera de que el Consejo Nacional del PRD se reúna para elegir a la nueva dirigencia del partido. Le habíamos  preguntado si se siente preparado para el megareto que tendrá enfrente, una vez que suceda  en la presidencia de esa agrupación política a Carlos Navarrete, lo que se da por hecho.

El PRD está muy a la baja en las preferencias de los electores. La política excluyente, que ha caracterizado a Los Chuchos, casi dueños de la franquicia, los dejó sin figuras de peso. Ya se fueron Cárdenas, López Obrador, Ebrard. Antes de la era de los Jesúses lo hicieron Porfirio o el propio José Woldenberg.

El académico va casi solo hacia la silla de Navarrete. Los otros aspirantes ya se bajaron: Zoé Robledo y Armando Ríos Piter. Argumentan que el proceso interno es una simulación.

Fernando Belaunzarán, exceuista, es otro de los aspirantes. Él también dice que la elección es una farsa, pero decidió mantenerse en la contienda.

Antes de pedir licencia como diputado, Basave alcanzó a presentar dos iniciativas. Una, para que en la boleta electoral se incluya un círculo blanco que haga válido el llamado voto blanco; que cuente y se cuente. ¿Para qué? “A mayor votación, menos recursos para los partidos”.

La otra tiene que ver con el adelgazamiento de la  Constitución. Tiene 65 mil palabras y es la segunda más extensa del mundo.

Se trataría de dejar lo esencial en la Carta Magna y trasladar los detalles  a una nueva Ley de Ordenamiento Constitucional, que estaría entre la Ley Suprema y las reglamentarias.