AMLO, Rusia y Washington; México se fue del Norte al Comando Sur

AMLO, Rusia y Washington

LINOTIPIA / Peniley Ramírez 

REFORMA, 17 de febrero de 2024

Hasta hace días, Juan González aconsejaba al presidente de EU sobre a qué poner atención y qué decidir respecto a México y América Latina. Antes de ser director para el Hemisferio Occidental del Consejo de Seguridad Nacional, González, originario de Colombia, fue asesor de Joe Biden cuando era vicepresidente y trabajó en el Departamento de Estado. Esta semana, sorpresivamente, se anunció su salida.

Es poco común en Washington que un funcionario de ese rango salga del gobierno a pocos meses de una elección presidencial. El hecho simboliza una serie de cambios que impactarán profundamente en la región y han pasado casi desapercibidos en la prensa.

En los últimos años, el gobierno de EU había incluido a México en el Comando Norte de defensa, un área militar reservada para amigos, socios y países de América del Norte. Hace unos meses, una propuesta republicana en el Congreso incluyó mover a México al Comando Sur, donde se agrupan países con narcotráfico, guerrillas o que representan un peligro para EU. Biden firmó la propuesta, como parte de un paquete de negociaciones.

Hace dos semanas, pasó a retiro en el Comando Norte el general Glen VanHerck, quien dirigía esa institución. En 2022, VanHerck dijo ante el Congreso que Rusia tenía más espías en México que en ningún otro país y que la inestabilidad -por el narcotráfico- permitía mayor injerencia de espías rusos y chinos.

A pesar de esa declaración, la Casa Blanca mantuvo una relación amistosa con México. Y González influyó decisivamente en ello. Para lograrlo, me dijeron fuentes diplomáticas, tuvo dos aliados clave. Por un lado, Ken Salazar, embajador de EU en México. Por otro, su principal interlocutor mexicano era Roberto Velasco, jefe de la Oficina para América del Norte en la Cancillería.

Ahora, las cosas están cambiando. Hace dos semanas, no hubo mexicanos en el cambio de mando en el Comando Norte. Una falta simbólica ya que, por décadas, militares mexicanos han estado en el evento, que representa unión norteamericana.

En la Casa Blanca, el sustituto de González será Daniel Erikson, exencargado del Hemisferio Occidental en el Departamento de Defensa. Me dijeron que es estricto y que México debe esperar que los temas de seguridad sean prioritarios en la relación bilateral.

Con González asesorando a Biden, la Casa Blanca tomó decisiones respecto a América Latina que han incomodado a sectores duros de la diplomacia y la defensa en Washington. Por ejemplo, consideran que EU no actuó a tiempo para evitar que Daniel Ortega abusara del poder y desmantelara la oposición en Nicaragua, y que ha sido laxo respecto a la operación creciente de espías cubanos en Venezuela y México.

También, González promovió que la Casa Blanca apoyara las negociaciones en México entre el presidente venezolano, Nicolás Maduro, y la oposición. La Casa Blanca creyó: Maduro aceptaría elecciones libres en 2024. Sin embargo, hace unos días, el Tribunal Supremo de Venezuela impidió a la principal candidata opositora postularse. Y esto fue, me dijeron, determinante en la salida de González.

"Es una salida extraña, que atribuyo a que había una percepción de que González recomendó estrategias equivocadas, sobre todo en el caso de Venezuela", me dijo una fuente diplomática. Otras quejas provenían de la élite de la derecha colombiana, molesta porque González recomendó a Biden ser cordial con Gustavo Petro, el presidente de Colombia.

"Erikson conoce mejor América Latina que González", me dijo la fuente. "Este cambio implica que los temas de seguridad de periodistas, amenaza y desmantelamiento de instituciones en México, que preocupan mucho a algunos en Washington, ahora tendrán más atención. Al venir del Departamento de Defensa, Erikson traerá una visión más estricta en temas de seguridad y estos serán prioridad".

Varias fuentes me dijeron que el cambio de mando, que será tan relevante para la relación bilateral, no se ha dimensionado en la cúpula del gobierno obradorista. Este viernes, a unas horas de la muerte del principal opositor ruso, Alexei Navalny, AMLO anunció: le dio una entrevista exclusiva a Inna Afinogenova, expresentadora rusa del medio oficialista Russia Today. En Washington, en cambio, dicen que el mensaje es claro: México ya no parece el socio confiable a quien la Casa Blanca trataba como un buen amigo.