9 ene 2022

Las columnas políticas hoy, domingo 9 de enero de 2022

Omar Fayad y Alejandro Moreno de nuevo juntos tras pleito mediático ..Puro show?o ¿cuál fue el acuerdo?

Y los gritos y sombrerazos de hace unos días? No cambian..

Alejandro Moreno

@alitomorenoc

·La unidad del PRI debe ser una buena razón para dialogar siempre. El PRI siempre tendrá argumentos para trabajar juntos por el bien de toda la militancia.

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Las columnas políticas hoy, domingo 9 de enero de 2022

Templo Mayor/ REFORMA

ALLÁ en Durango dan por hecho que el candidato a la gubernatura de la alianza Va por México será el ex alcalde de la capital duranguense y militante tricolor Esteban Villegas Villarreal.

A DIFERENCIA de lo ocurrido en otras entidades donde el PAN eligió al abanderado de esa coalición, en principio se había acordado encargar encuestas para decidir entre Villegas y el panista Héctor David Flores.

Y CUENTAN que la decisión de que el PRI lleve mano se tomó dado que varios sondeos le dan la ventaja a Villegas, quien fue derrotado en las urnas en el 2016 por el actual gobernador, el panista José Rosas Aispuro.

NOMÁS que esas mismas encuestas indican que quien tiene el primer lugar en intención de voto es la aspirante de Morena y ex priista Alma Marina Vitela, con todo y que fue el tercer lugar en la contienda interna de su partido y obtuvo la nominación por el criterio de paridad de género.

DE AHÍ que los priistas presionaron para definir ya la candidatura de la alianza y evitar que crezca la ventaja de Vitela, quien trae tooodo el apoyo de los programas sociales del gobierno federal.

LOS FOTOS de Cuauhtémoc Blanco con narcotraficantes en Morelos y los señalamientos de que el gobierno de Cuitláhuac García apoya a uno de los cárteles que está peleando por el control de la droga en Veracruz tienen bajo la lupa a esos dos gobernadores de la 4T... y ellos siguen tan campantes.

HAY QUIENES consideran que ambos sufren del "Complejo de Tlatoani Azteca" que consiste en que su nombre de pila y el apoyo que tienen desde la Gran Tenochtitlán los hacen sentirse todopoderosos e invulnerables. ¡Ouch!

MUY PREOCUPADOS andan en el PRI de la CDMX tras la detención de su ex dirigente local Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre por el delito de trata de personas.

PRIMERO, porque una condena contra quien ha sido su auténtico líder durante años le daría literalmente en la torre a la credibilidad de los tricolores y pondría en riesgo su participación en la alianza opositora con el PAN y el PRD, que ya comenzaron a marcar su distancia.

Y, SEGUNDO, porque según se comenta al interior de la fracción tricolor en el Congreso local, se sienten traicionados por el gobierno que encabeza Claudia Sheinbaum después de que ellos dejaron pasar sin chistar el presupuesto 2022 que propuso la morenista.

¿A POCO será cierto que habían negociado la impunidad para su líder a cambio de quedarse calladitos y, una vez aprobado el paquete económico, les incumplieron la promesa? Es pregunta sin pactos en lo oscurito.

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Boletos para viajar en el avión presidencial

Bajo Reserva/El Universal

Nos comentan que el presidente Andrés Manuel López Obrador prepara añadir una chamba más a la larga lista de actividades extras que ha encomendado a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena). Esta vez se proyecta que el Ejército sirva como agencia de renta del avión presidencial TP-01 (el que no han podido vender). El mandatario adelantó que se analiza entregar la aeronave “José María Morelos y Pavón” a la empresa que se creó para operar el nuevo Aeropuerto Internacional “Felipe Ángeles” y rentar la lujosa aeronave para volar a destinos como Cancún o Los Cabos. La duda, sin embargo, es si tal esquema será negocio, pues el costo de operación de la aeronave es tan alto, que el boleto tendría que ser muy caro, o la venta de lugares, muy cuantiosa. Así que, ya sabe, si desea subirse al famoso “avión presidencial”, haciendo su guardadito, porque el viaje no será nada barato.

AMLO se queda en tierra

Nos comentan que el presidente Andrés Manuel López Obrador se salvó este fin de semana de no correr riesgo y padecer la cancelación de vuelos en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México con motivo de los contagios por Covid dentro de la tripulación de las aerolíneas. Nos recuerdan que este fin de semana, el Ejecutivo federal anunció que se quedaría en la capital de la República para sostener reuniones con su gabinete en Palacio Nacional. Sin embargo, ayer también adelantó que viajará el próximo viernes y sábado a Nayarit y Sinaloa para supervisar la construcción de presas, mientras que el domingo viajará a su natal Tabasco para encabezar el homenaje por el 125 aniversario de su mentor político Carlos Pellicer. ¿Será que de continuar con las cancelaciones habrá un “plan B” en su equipo para evitar la foto de un presidente varado en el aeropuerto?

La propaganda sobre el narco

Líderes del PAN y PRD, entre ellos Marko Cortés y Jesús Zambrano, reviraron a la exigencia del presidente López Obrador de que Felipe Calderón dé una explicación sobre Genaro García Luna y sus nexos con el narco. Le pidieron al tabasqueño en redes sociales aclarar cercanía con la madre de El Chapo, la deferencia hacia la familia del narcotraficante y hablar acerca del escándalo en torno al gobernador Cuauhtémoc Blanco. Apenas va la mitad de sexenio y desde la oposición, nos dicen, ya se asoman las acusaciones y exigencias de rendición de cuentas que saldrán a flote no sólo en 2024, sino más allá.

Pemex bajo la sombra de ómicron

Señales contradictorias se mandan desde las oficinas de Pemex sobre la variante ómicron de coronavirus. Mientras la empresa alista un esquema de aplicación de pruebas para la detección de antígeno de SARS-CoV-2 a trabajadores de la empresa y subsidiarias, para lo cual habían realizado 45 mil 474 pruebas hasta diciembre pasado, en el área de Comunicación Social de la institución, nos comentan, les amagan con sanciones o despido si se ausentan a pesar de que existen varios contagiados confirmados. El teletrabajo no es opción para algunos, nos dicen

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El ocaso de Gertz Manero/  Roberto Rock L

Gertz parece haber perdido la cualidad de entender cuando el telón comienza a bajar

El Universal, 9/01/2022;


Alcanzaba diciembre su segunda semana cuando el secretario de Gobernación, Adán Augusto López, se reunió en privado con Alejandro Gertz Manero, a la luz de acciones penales que el fiscal federal ha emprendido sin mayor base aparente que un ánimo de venganza personal contra diversos personajes, algunos de ellos cercanos a Palacio. 

Ese encuentro sembró en el primer círculo presidencial la certeza de que Gertz ha iniciado un deterioro acaso propio en un hombre próximo a cumplir 83 años, pero incompatible con quien ha sido una figura pública clave durante el último cuarto de siglo. 

Su encuentro con López Hernández fue precipitado por indicios de que Gertz, apoyado por su hombre de confianza, el subprocurador Juan Ramos, había concertado con el litigante Antonio Collado que su hermano, el abogado Juan Collado —preso desde julio de 2019 por delincuencia organizada y lavado de dinero—, presentara una denuncia por presunta extorsión en contra de Juan Antonio Araujo —cabeza de uno de los principales despachos penalistas—, en la que se buscaba implicar al exconsejero jurídico de la Presidencia, Julio Scherer Ibarra. 

Reportes periodísticos dieron cuenta de que el subprocurador Ramos se reunió con Collado el 10 de diciembre en el Reclusorio Norte de la ciudad de México, con el propósito de negociar, a cambio de tal denuncia, un acuerdo que convertiría a Collado en testigo protegido, por lo que podría seguirse defendiendo en libertad de los cuatro juicios que le han sido enderezados. Su demanda, que debía alegar que Araujo lo había extorsionado a nombre de Scherer, debió haber tenido escasos asideros porque el asunto se diluyó en los siguientes días. 

Fuentes gubernamentales sostuvieron a este espacio que Gertz rompió una cercanía que cultivó por años con Scherer Ibarra, al que ahora le estaría atribuyendo estar detrás de la cobertura mediática otorgada a los escándalos por el patrimonio del fiscal, revelado por los “Panamá Papers”, los “¨Pandora Papers” o sus presuntas operaciones inmobiliarias; el rechazo que ha despertado su largo acoso judicial contra la señora Laura Morán Servín y su familia, pareja ella por décadas de su hermano Federico Gertz, entre otras historias.

Nieto de Cornelius Gertz, innovador empresario alemán y representante del imperio austrohúngaro; hijo de la poeta y novelista Mercedes Manero; amante de la aviación; testarudo y celoso de su vida privada; implacable litigante y esgrimista político, Gertz parece haber perdido la cualidad de ser, como buen apasionado al teatro, alguien que sabe estar frente a los reflectores, pero también entender cuando el telón comienza a bajar.

En otra deriva que parece desbordar las capacidades disuasivas de Palacio y en particular del referido secretario Adán Augusto López, el fiscal de la República parece haber dedicado parte importante de los dos meses recientes a perseguir al ex titular de la UIF, Santiago Nieto, quien dimitió en noviembre pasado a causa de la irascible reacción presidencial ante su boda en Guatemala. 

La fiscalía había acogido ya al menos tres denuncias penales contra Nieto Castillo presentadas en su contra por Emilio Lozoya, exdirector de Pemex. Pero informes recientes dan cuenta de que se ha dado cabida al menos a una docena más de querellas, presentadas por empresarios —en la lista podría haber también políticos e incluso narcotraficantes— afectados por el congelamiento de sus cuentas por parte de la UIF. El propio fiscal muestra activismo en la búsqueda de elementos para enderezar acciones no solo contra Nieto sino también contra su esposa, la consejera electoral Carla Humphrey.

Abrazado a sus propias obsesiones, Gertz Manero se asignó a sí mismo esta nueva batalla. Podría ser la última. 

rockroberto@gmail.com

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El confirmatorio restaurador/Francisco Valdés Ugalde

Confirmar la voluntad del líder carismático para permanecer en el poder ha sido una operación de ingeniería política burda y palurda pero nada despreciable

El Universal, 

El derecho a la revocación de mandato nació condenado a muerte. Desde la institución más autoritaria que ha padecido México, la presidencia de la República, se impone la peregrina idea de que ella es la mismísima escuela en la que habremos de aprender a practicar la democracia directa. Una paradoja digna del realismo fantástico que algún día será novelada. Desde una paleopresidencia se encumbraron Iturbide y Santa Anna, desde ella se encaramó el usurpador Maximiliano. Cuando ya era propiamente “presidencia”, Porfirio Díaz construyó sobre ella su imperio autoritario. La presidencia fue también la institución desde la cual el bloque autoritario que se impuso después de la Revolución Mexicana armó el Maximato y edificó el partido de Estado que nos gobernó durante más de 70 años. La presidencia ha sido, igualmente, la institución que durante la transición a la democracia ha cobijado poderes de hecho y enclaves autoritarios de toda calaña: económicos, políticos, sindicales, caciquiles, agrarios, urbanos y hasta marítimos. Así ha ocurrido por decisión o por omisión presidencial, como es el patente y patético caso de las procuradurías. La presidencia es la institución desde la que se minan las bases de las instituciones democráticas paridas con sangre, sudor y lágrimas por las generaciones que no aceptaron traicionar su primogenitura ciudadana a cambio de los platos de lentejas del antiguo priísmo y del populismo en que ha venido a degenerar el “sistema mexicano”.

Esa misma presidencia es hoy encabezada por el carisma con que AMLO ha revestido las viejas nostalgias y amarguras de la historia nacional. Esa presidencia trata de convencernos de que acudir a las urnas de una revocación de mandato —que no es más que confirmación de su serenísima persona— es en verdad el camino por el que el país aprenderá la verdadera democracia: la que es directa, la que plebiscito tras plebiscito confirme la voluntad más absoluta que hemos conocido en lo que va del siglo XXI.

Confirmar la voluntad del líder carismático para permanecer en el poder ha sido una operación de ingeniería política burda y palurda pero nada despreciable. Primero se reformó la Constitución para introducir la figura de la revocación, después se legisló (al vapor) la norma reglamentaria para realizarlo y en ella se introdujo desvergonzadamente una tergiversación de la Constitución para preguntar a los electores no solamente si quieren que “se le revoque el mandato”, sino si prefieren que “siga…hasta que termine su periodo”. En vez de un sí o un no a la revocación se abrió la puerta a la confirmación del mandato, figura constitucionalmente inexistente. A continuación se desfondó al INE en el PEF 2022 dejándolo sin recursos para cumplir sus obligaciones y se reactivó la campaña en su contra desde el púlpito presidencial. Enseguida, su lacayo que preside el Congreso inició la acusación penal contra consejeros del Instituto, mismo que presenta recurso a la Suprema Corte, cuya “comisión de receso” desestima con indigna frivolidad. Mientras tanto el partido en el gobierno activa asociaciones “civiles” para conseguir las firmas para el ya a estas alturas flagrante confirmatorio. Todo desde arriba, nada desde abajo. Ni un dedo movió la sociedad mexicana, supuesto origen de la desconfianza requerida para iniciar la revocación. Pero eso sí, el ocupante de la “silla embrujada” no cesa de instruir que con este “ejercicio” el pueblo aprenderá a practicar la democracia directa.

La confirmación de mandato no es un acto democrático surgido de la ciudadanía para ejercer su derecho a remover al poderoso indeseado, sino el uso degradante de los ciudadanos para restaurar la inveterada capacidad despótica de la presidencia.

Investigador del Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM.

@pacovaldesu

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Revista R

Diálogo en Bucareli, ¿nuevo momento político?

El 13 de diciembre, el Secretario de Gobernación, Adán Augusto López, recibió a una representación del PAN integrada por su dirigencia, legisladores y liderazgos diversos. Foto: Alfredo Moreno Espinosa

Nota de Guadalupe Irízar

Reforma, Cd. de México (09 enero 2022).- La formalización del contacto de la Secretaría de Gobernación con los partidos políticos de Oposición provoca cierto optimismo en analistas políticos, que ven en ese hecho un nuevo momento político en el País, una especie de ventana abierta al diálogo y a la negociación.

El primer encuentro fue el 13 de diciembre, entre el Secretario de Gobernación, Adán Augusto López, y una representación del PAN, luego de que el diputado Santiago Creel enviara una carta al Presidente Andrés Manuel López Obrador y que éste ordenara al titular de Segob que se formalizara el encuentro.

A partir de mañana, 10 de enero, se instalarán mesas de diálogo entre panistas y Gobernación para abordar temas relacionados con seguridad, salud, energía, economía, democracia y medio ambiente.

EN PRINCIPIO, OPTIMISMO

Ese primer encuentro fue recibido con optimismo por diversos sectores y, con diversos matices, así lo expresan a REFORMA, en entrevistas por separado, los analistas políticos José Antonio Crespo, Jorge Javier Romero, Arturo Sánchez y Eduardo Huchim.

"Yo creo que la realidad se impone", dice Crespo.

Recuerda que Morena perdió más de 50 legisladores en la Cámara de Diputados en las elecciones de junio y sabe que no tiene mayoría para algunas de las reformas que quiere, y tiene que negociar y sumar.

"Es como abrir puertas () Probablemente convenció Adán a AMLO de que no tienen ya la mayoría y que en algunas decisiones se va a tener que contar con la Oposición y que es mejor hacerlo dialogando y abriendo puertas", expresa.

Si bien, dice que López Obrador no ha dejado el discurso de polarización, también es probable que esta apertura tenga su aval.

"No creo que esto no tenga el visto bueno de AMLO, pero no significa un cambio de postura del Presidente", apunta.

El profesor del CIDE considera positiva la apertura, pero es cauteloso sobre sus probables resultados.

"Seguramente dijeron: vamos a abrir esta ventana de diálogo y sentarnos a intercambiar puntos de vista, algo que no había antes. No lo hizo Olga (Sánchez Cordero). El hecho de que desde Gobernación se acepte la posibilidad de esto es una oportunidad, una buena señal, que no garantiza nada, pero sí abre una esperanza que no había en estos tres años, y por lo menos sentarse a dialogar y quizá ponerse de acuerdo en algunos temas", dice Crespo.

Para el profesor e investigador de la UAM-Xochimilco, Jorge Javier Romero, la apertura al diálogo por parte de Gobernación con los partidos de Oposición es una buena señal.

"Yo creo que eso debería ser lo normal en una democracia. Ha sido lo contrario, descalificando a la Oposición y polarizando. A ver si puede haber acuerdos, que haya negociación sobre proyectos gubernamentales, que se discutan iniciativas de reforma constitucional", señala.

Los ex consejeros electorales Arturo Sánchez y Eduardo Huchim también consideran positiva la actitud del Secretario de abrirse al diálogo.

"Es el reconocimiento que hace el Gobierno al pluralismo político", apunta Sánchez.

El actual profesor investigador de la Escuela de Ciencias Sociales y Gobierno del Tecnológico de Monterrey destaca el papel del PAN en esta iniciativa, y el apoyo que logró Creel para esta propuesta.

"Yo creo que fue una iniciativa más bien de Acción Nacional, pero encontró un buen momento. Hay varios elementos que cambiaron para bien, empezando por la actitud del Secretario de Gobernación que se ha manifestado con esa apertura a otros partidos, y el trabajo que está haciendo más profesionalmente con todos los Gobernadores", señala Sánchez.

En este nuevo momento, dice, para el Secretario no se está "ante conservadores y revolucionarios".

"La actitud del nuevo Secretario le va a ayudar mucho al Presidente de la República, su estilo de diálogo", añade.

Para Huchim, es significativo también que el diálogo se haya iniciado a solicitud del PAN, la primera fuerza política de la Oposición, y que ese partido, a su vez, haya podido ponerse de acuerdo para acudir a la cita en Bucareli.

"Yo veo con optimismo ese diálogo. Claro que aún es temprano, porque es solamente el primer paso, pero yo creo que es un buen primer paso", expresa.

"La parte más lúcida del PAN se atreve a dar el paso y luego a instrumentar esto en serio".

El también escritor coincide en destacar la actitud del nuevo titular de Gobernación.

"Por lo menos este Secretario está teniendo un papel más protagónico, más activo que lo que había antes es esa dependencia", indica.

Para Huchim, una hipótesis del momento de apertura actual también tiene que ver con el papel de la Oposición hasta ahora.

"La Oposición -es una hipótesis, igual no es así-, me parece que se está dando cuenta de que esta confrontación permanente descalificando prácticamente todo lo que hace el Gobierno, no le está redituando, sino los está desdibujando del panorama político", indica.

"Con el camino de descalificación continua fuerte y a veces injurioso, no ha obtenido mucha respuesta, salvo de los que son sus militantes y seguidores en redes, pero eso no basta para ganar elecciones".

LAS REFORMAS QUE VIENEN

La reforma eléctrica y la eventual reforma político electoral son dos de los temas que podrán ser abordados en las mesas temáticas, pero no sólo esas, coinciden los analistas.

"La reforma eléctrica no pasa como está, así que se pueden plantear algunos cambios para apoyarla, y hacerla más moderada, y lo mismo en la reforma electoral", señala Crespo.

La reforma electoral que podría imponer Morena tendría que ver con la intención de controlar el INE, como en su momento lo hizo el PRI.

"Pero si se hace una reforma de Morena conjuntamente con la Oposición, puede salir algo bueno. Si dicen el INE es demasiado caro, bájenle, se puede ver en qué casos se puede hacer; que dicen que no nos gusta que los consejeros electorales respondan a los partidos, pues a cambiar la fórmula, no a favor de Morena, sino en beneficio de todos; que el financiamiento a los partidos políticos es excesivo, pues vamos a bajarle todos el 50 por ciento", ejemplifica Crespo.

"Sí puede haber reforma electoral y política y, si se ponen de acuerdo entre todos los partidos políticos, se podría mejorar el sistema político", añade el profesor del CIDE.

Para Romero, el papel de la Oposición será importante para frenar cualquier intento de afectación de las instituciones electorales, aunque también es consciente de las limitaciones de los partidos en su interior y al exterior y las dificultades para tener una posición unitaria.

La reforma político electoral, para Sánchez, puede hacerse con calma en los próximos meses, a partir de negociaciones en las mesas temáticas.

El ex consejero del IFE y del INE, y quien ha estado cerca de algunas reformas electorales recientes, celebra que se hayan iniciado cuanto antes las pláticas con Segob, porque considera que un trabajo cuidadoso debe hacerse en la reforma político electoral, tratando de llegar a acuerdos y propuestas al menos en un lapso de seis meses.

Recuerda que una eventual reforma de este tipo implicaría cambios constitucionales y aprobación por lo tanto de la mayoría de las legislaturas estatales, y debería estar lista, para aplicarse en las elecciones de 2024, a más tardar en mayo de 2023.

Apunta que esos trabajos no deben ser afectados ni por el ejercicio de la revocación del mandato ni por las elecciones en seis entidades en este 2022.

Huchim, por su parte, reconoce que un posible tema inmediato en las mesas de negociación sería la reforma eléctrica.

El ex consejero electoral hace una advertencia sobre el diálogo iniciado por Segob con el PAN, para evitar su perversión.

"El PAN es la segunda fuerza en el País y la principal fuerza de Oposición. Ese partido debe pensar muy bien su estrategia concreta de discusión, particularmente sobre la reforma eléctrica. Creo que el PAN no debería de personalizar y poner a Ricardo Anaya o al Gobernador Francisco García Cabeza de Vaca como víctimas y, poniendo su situación como requisito para avanzar en el diálogo, se crearía una perversión de un diálogo abierto y sincero", apunta Huchim.

OPORTUNIDAD Y RIESGOS

Los analistas advierten que el diálogo abierto es un reto para la Oposición, pero también una oportunidad.

"Aquí vamos a ver si de verdad tenemos Oposición o simplemente estamos viendo una claudicación ante la andanada autoritaria del Gobierno", expresa Romero. "La Oposición se ha mostrado desarticulada", agrega.

"Yo creo que el PRI es muy débil frente al Gobierno de AMLO porque en mucha medida sus líderes tienen mucha cola que les pisen y eso los hace sumamente vulnerables a los intentos del Gobierno por someterlos", señala el investigador de la UAM.

"El PAN, por su parte, tiene una falta de liderazgo tremendo; tiene un liderazgo endeble y no ha sido una Oposición sólida que se plantee como una opción viable. El PRD (...) a veces parece un cadáver insepulto. Y MC, a quien excluyeron de la Comisión Permanente, sigue siendo demasiado dependiente del caudillismo de Dante Delgado, quien ha retomado poder", detalla.

"Es la oportunidad de que la Oposición se presente y se asuma como tal, o que la coopten", sentencia. Hora de publicación: 05:00 hrs.

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Frente a Echeverría/Enrique Krauze

en REFORMA, 09 Ene. 2022;

Luis Echeverría cumple cien años el próximo 17 de enero. Hasta hace poco, el veredicto sobre su gestión parecía definitivo: su "apertura democrática" cerró el sistema político y reprimió la libertad de expresión. Su "desarrollo compartido" despilfarró los recursos públicos en inversiones improductivas, desalentó la inversión privada, sextuplicó la burocracia, desembocó en el estancamiento y la inflación. Pero la historia nunca cierra sus expedientes. Una sorpresiva variante de su "estilo personal de gobernar" obliga a recordar aquel sexenio. A mi juicio, lo mejor es hacerlo a través de la obra de dos críticos que lo enfrentaron con valor, razones y datos objetivos: Gabriel Zaid y Daniel Cosío Villegas. Acá unos apuntes.

Zaid nunca creyó en la "apertura democrática". Tras la matanza del Jueves de Corpus (10 de junio de 1971), Echeverría culpó a las "fuerzas oscuras" que conspiraban en su contra y prometió una investigación inmediata. Carlos Fuentes advirtió que no apoyar al presidente era "un crimen histórico". Zaid replicó con un texto de siete palabras: "El único criminal histórico es Luis Echeverría". Un año después conminó a Fuentes en una carta pública a que planteara a su amigo Echeverría un plazo, el que quisiera, para llevar a cabo aquella investigación, o le retirara su apoyo. La investigación nunca se hizo. La apertura era una farsa. Fuentes aceptó la embajada en París. Zaid continuó su tarea crítica en la revista Plural.

A partir de 1973, cuando Echeverría decretó que "la economía se maneja desde Los Pinos", Zaid demostró con cifras el error -ese sí, histórico- que implicaba abandonar la tradición centenaria de mantener separada a la Secretaría de Hacienda del poder político. La salida para México, por el contrario, consistía en restar poder al presidente, fortalecer la independencia del Legislativo, descentralizar la economía, favorecer la vía de las exportaciones y la libertad de empresa, instrumentar una política social de apoyo a los más necesitados alentando su autonomía -no su obediencia- mediante una oferta de medios de producción pertinente a sus necesidades concretas. Nada de eso se hizo. Para los acólitos en el PRI y en sectores de la izquierda integrada al régimen, "lo revolucionario era que todo pasara a depender de una sola voluntad omnipotente, patriótica, radical, generosa, incorruptible, sabia y redentora del pueblo". Dos libros recogen el diagnóstico de Zaid sobre aquel sexenio y los siguientes: El progreso improductivo y La economía presidencial. No han perdido vigencia.

Desde 1971 visité con frecuencia a don Daniel Cosío Villegas. Fue emocionante verlo actuar en la vida pública. Era una cátedra viva de republicanismo en un entorno de monarquía absoluta y una clase de liberalismo en una atmósfera adversa a las libertades. En sus artículos en Excélsior y sus ensayos en Plural, sus lectores entendimos la importancia del debate respetuoso y razonado para la vida pública. Un día me dijo: "He decidido exiliarme", mostrándome el inmundo libelo que el gobierno de Echeverría había puesto a circular contra él. Pero no se dejó intimidar. Escribió El estilo personal de gobernar, que vendió cerca de cien mil ejemplares. Pintaba al presidente como el rey de la fábula: desnudo en sus decisiones irresponsables y erráticas, su cerrazón ideológica, su monomanía, su megalomanía, sus ensueños de liderazgo mundial, su necesidad fisiológica de predicar y su intolerancia: "Echeverría está convencido de que, quizás como ninguno otro presidente revolucionario, se desvive literalmente por hacer el bien a México y los mexicanos. De allí salta a creer que quien critica sus procedimientos, en realidad duda o niega la bondad y la limpieza de sus intenciones". El libro Crítica del poder recoge los textos de don Daniel en ese tramo final de su vida. Hay que reeditarlo.

En el número dos de la revista Vuelta (enero de 1977) Zaid publicó "El 18 Brumario de Luis Echeverría". Termina con esta frase: "en vez de usar los poderes que tuvo para servir al país, los reinvirtió en adquirir más poder: se dedicó apasionadamente a hacer crecer la silla presidencial, hasta que le quedó grande".

En el último número de Plural (julio de 1976) apareció un ensayo póstumo de Cosío Villegas sobre la sucesión de Echeverría. Contiene esta frase: "por esa sed insaciable de poder y por su temperamento personal, Echeverría ha terminado por creerse un Mesías, es decir, el escogido por Dios para revelar al mundo la Verdad".

www.enriquekrauze.com.mx

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Alianzas/Luis Rubio

en REFORMA

Coherencia ideológica o pragmatismo político: el dilema eterno de las alianzas. Éstas duran mientras sus integrantes encuentran mayores beneficios de participar y permanecer en ellas que en denunciarlas y romperlas. Desde los teóricos marxistas hasta los operadores políticos más avezados, las alianzas son el corazón de la política. En Holanda no ha habido un solo gobierno de mayoría en setenta años: las coaliciones son factor permanente y elemento clave de la civilidad de sus políticos porque nadie sabe con quién se asociará en el futuro. En este año que comienza, la alianza forjada para la elección intermedia de 2021 estará a prueba para el gran evento de 2024.

Las motivaciones para aliarse son muchas y muy diversas, pero la principal es siempre la necesidad. Un partido que cuenta con amplia mayoría carece de incentivo para aliarse; cuando necesita socios para lograr el poder, busca potenciales aliados con quienes asociarse. Esto que es común y corriente en los sistemas parlamentarios, ha sido toda una peripecia en nuestro país, pero no por eso deja de entrañar una impecable lógica.

Los partidos políticos se fraguan con un contenido ideológico, pero su función central es la de procurar el poder político, de ahí su flexibilidad a la hora de armar coaliciones o alianzas legislativas o electorales. Un partido puede ser puro en sus objetivos y pulcro en su proceder, pero si no está en el poder, su circunstancia le impide ser más que un testigo del acontecer de una nación. Una alianza entre fuerzas tan diversas como el PAN, PRI y PRD (y, potencialmente, Movimiento Ciudadano) le da urticaria a mucha gente (comenzando por este último), pero es la respuesta racional a la búsqueda del poder.

Sin duda, una alianza entraña costos porque al aliarse un partido cede libertades, comenzando por la de nominar a sus propios candidatos. Cuando se trata, como el año pasado, de una alianza para el poder legislativo, los sacrificios son relativamente menores, porque hay muchas curules que llenar; sin embargo, este año vendrán seis gubernaturas donde sólo puede haber un candidato de la alianza por estado, lo que producirá al menos tres potenciales perdedores por entidad. El año próximo habrá dos más y en 2024 la madre de todas las batallas.

Cada partido que se incorpora en una alianza lo hace porque ve en ella la mejor manera de avanzar sus propios intereses. Por más que cada uno de estos institutos políticos se sienta puro y casto, todos exhiben deficiencias, corrupciones y un abismal récord en términos de procedimientos democráticos a su interior. Haley Barbour, un político estadounidense, decía que "en política, la pureza es enemiga de la victoria". Quien se alía con otros partidos lo hace porque tiene un objetivo que trasciende sus capacidades individuales.

Con un presidente poderoso que todavía retiene un relativamente alto nivel de popularidad, una alianza es el único mecanismo que ofrece una oportunidad a los partidos hoy en la oposición. Y cada uno de esos partidos enfrenta desafíos distintos cuando se ve ante el espejo. Para el PAN, partido que siempre se asumió como una entidad impoluta que contrastaba con la corrupción del PRI, ahora tiene que reconocer que su paso por el poder no fue tan distinto al de su némesis histórica. Para el PRI el problema es de sobrevivencia: extinguirse si se deja absorber por Morena o renovarse y encontrar una nueva plataforma y base de sustento político. Para el PRD, el más chico de los partidos en la alianza, el reto es no desaparecer a pesar del calibre de sus integrantes. MC no se quiso aliar para la intermedia porque no quería "contaminarse" de los costos del "pacto por México", que asola a los otros tres.

Ciertamente, el riesgo de contagio es elevado, pero también lo es la tozudez. Como dicen los autores de Elogio de la traición, se trata de un equilibrio frágil porque el objetivo no es el de meramente perpetuarse en el poder. Si el objetivo de los partidos es el poder, la pregunta es cómo estructurar una alianza que tenga la mayor probabilidad de alcanzarlo. María Matilde Ollier, estudiosa argentina, lo dice de manera cándida: quienes quisieron respetar las normas nunca consiguieron la gobernabilidad y quienes lograron la gobernabilidad nunca respetaron las normas.

La realidad es que hace mucho que México requiere una transformación política, porque todo el aparato político y el sistema de gobierno están anquilosados, como lo evidencian sendas crisis de crecimiento económico, inseguridad, corrupción y pobreza. La manera de gobernar de López Obrador obligó a los partidos de oposición a unirse para tener la oportunidad de acceder al poder. La alianza de 2021 mostró que sí puede funcionar, pero la verdadera prueba no radica en el pragmatismo de juntarse para una elección, sino en que se acuerde una estrategia de transformación política. Sin una razón para aliarse que trascienda el mero triunfo electoral, los aliancistas sufrirían lo que sus integrantes ya padecieron, respectivamente, en 2000, 2006 y 2012: un fracaso y el sucesivo ocaso.

En política, escribió Camus, son los medios los que justifican el fin. La alianza es un medio, pero su relevancia y capacidad de convencimiento del electorado depende de la calidad del proyecto que enarbolen la alianza y sus integrantes.

@lrubiof

 





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