6 may 2008

Se va Amérigo Incalcaterra

Incalcaterra se irá por presión oficial: ‘El País’
También la columna Templo Mayor de Reforma, publicó ayer:
EN EL SECTOR de los derechos humanos hay shock por la inminente salida de México de Amérigo Incalcaterra.
SE TRATA del representante en nuestro país de la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, y por lo que se anda diciendo, no se va por gusto.
SEGÚN ESTO, en su reciente visita a México, Louise Arbour, la jefa de Incalcaterra, recibió de parte del gobierno federal la petición para dicho relevo.
Nota de El Universal:
Amérigo Incalcaterra, representante en México de la Oficina de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH), dejará el cargo en breve por presiones del gobierno mexicano, de acuerdo con el diario español El País
El Universal, 6/05/2008;
María de la Luz González, reporterax
Amérigo Incalcaterra, representante en México de la Oficina de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH), dejará el cargo en breve por presiones del gobierno mexicano, de acuerdo con el diario español El País.
EL UNIVERSAL solicitó la versión de Incalcaterra, pero la OACNUDH, sin negar la información publicada por el diario español, manifestó que por el momento no podía corroborarla.
Fuentes de organizaciones no gubernamentales mexicanas confirmaron el relevo del funcionario, y adelantaron que se hará cargo de otra oficina regional de OACNUDH, posiblemente Sudáfrica, mientras funcionarios del sistema de Naciones Unidas comentaron que su salida es parte de la rotación normal en este tipo de misiones.
La información de El País asegura que la actitud crítica de Incalcaterra hacia temas de derechos humanos durante más de dos años que ha estado al frente de la oficina en México “incomodó a las autoridades hasta llegar a una situación insostenible”.
La publicación sorprendió a representantes de organizaciones de derechos humanos que trabajan de manera cotidiana con el funcionario, algunos de los cuales confirmaron la versión de que, por su labor, había molestia en dependencias como las secretarías de Relaciones Exteriores (SRE), de Gobernación (Segob) y la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).
Destacaron, sobre todo, la diferencia entre el desempeño de Incalcaterra, de origen italiano, y su predecesor, el sueco Anders Kompass (septiembre de 2002 a julio de 2005), a quien tocó desarrollar la primera etapa del Acuerdo de Cooperación Técnica entre México y OACNUDH, que incluyó la realización de un diagnóstico y un programa nacional de derechos humanos.
Incalcaterra llegó a México el 27 de octubre de 2005, procedente de la misión de Colombia y a diferencia de su antecesor fijó la postura de la OACNUDH sobre discriminación, pobreza, migración, indígenas, derechos de mujeres y niños, elecciones y participación del Ejército en la lucha contra el narcotráfico.
De acuerdo con El País, fueron estas críticas, en artículos periodísticos o declaraciones, las que generaron molestia en círculos gubernamentales y un intenso cabildeo ante la Alta Comisionada, Louise Arbour, para relevarlo.
Activistas de derechos humanos afirmaron que el trabajo de Incalcaterra nunca rebasó los lineamientos establecidos en el mandato de la oficina, y que la presión para su salida, de confirmarse, sólo mostraría que hay una mayor cerrazón del gobierno.
“Amérigo tuvo una mayor cantidad de posiciones públicas sobre distintos temas, pero en todas había suficiente evidencia de las violaciones a derechos humanos; nunca rebasó los límites fijados por la Alta Comisionada”, aseguró Édgar Cortez, secretario ejecutivo de la Red de Derechos Humanos Todos los Derechos Para Todos y todas (Red TDT).
Fabián Sánchez Matus, consultor independiente y ex director de la Comisión Mexicana para la
Defensa y Promoción de los Derechos Humanos, afirmó que Incalcaterra se había convertido en un personaje incómodo.
En reuniones de la Comisión de Armonización Legislativa, el subsecretario (de la SRE) Juan Manuel Gómez Robledo manifestó su molestia con Incalcaterra.
“Nos dijo que lo iba a llamar a cuentas; que debía hacer su trabajo sin meterse en cuestiones internas de México, que era un asunto de soberanía, que el Estado mexicano debía resolver estos temas sin interferencias. Sé que también había molestia y reclamos en Gobernación y en la CNDH. (El ombudsman) José Luis Soberanes siempre se opuso a la apertura de la oficina y al trabajo que desde ahí se hace”.
Nota de Milenio,
Eugenia Jiménez y Alejandro Moreno, reporteros
Amérigo Incalcaterra, representante de la Oficina en México del Alto Comisionado para los Derechos Humanos, quien ocupa ese cargo desde octubre de 2005, será relevado de su cargo en fechas próximas, en momentos en que entra en vigor el acuerdo de esa oficina y el gobierno mexicano, para darle a esta instancia mayor participación y facultad de crítica en las investigaciones sobre derechos humanos en México.
Organizaciones civiles consideraron que la salida de Amerigo, quien ha sido crítico del trabajo del gobierno federal en la materia, es una muestra de que la administración de Felipe Calderón sólo tiene este tema en el discurso, pero no en la práctica y se había convertido en un personaje “incómodo”.
La Oficina se instaló en México en 2002 bajo la representación de Andrés Kompas quien coordinó los trabajos del diagnóstico sobre este ámbito en el país, que se utilizó para la elaboración del Plan Nacional de Derechos Humanos, el cual no se logró implementar durante el gobierno de Vicente Fox.
No hay pronunciamiento oficial
La Secretaría de Relaciones Exteriores rechazó fijar un posicionamiento sobre la repentina salida de Amerigo Incalcaterra como representante de la Oficina en México del Alto Comisionado para los Derechos Humanos.
José Luis Alcudia, director general adjunto de Comunicación Social de la dependencia, dijo que podría ser hoy cuando la Dirección General de Derechos Humanos y Democracia de la SRE, que preside el ministro Alejandro Negrin, aclare la supuesta injerencia que tuvo el gobierno mexicano con la destitución del comisionado.
Responde la Cancillería:
COMUNICADO DE PRENSA
Martes 6 de Mayo de 2008 Comunicado 126
En relación con las notas aparecidas en varios medios nacionales, a propósito del traslado del Representante en México de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos para cumplir con una nueva comisión en otro país, la Secretaría de Relaciones Exteriores se permite formular las siguientes precisiones:
1. La designación de sus representantes en los distintos países es facultad exclusiva de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
2. Es una práctica común en el sistema de las Naciones Unidas, que los funcionarios internacionales sean trasladados a una nueva adscripción después de un cierto tiempo, como parte de un sistema normal de rotación. Cabe destacar que el representante en México de la Oficina citada, asumió sus funciones en octubre de 2005.
3. El gobierno de México reitera su compromiso con la promoción y protección de los derechos humanos y su mejor disposición por mantener una estrecha cooperación con los organismos de las Naciones Unidas en esa materia. Esta disposición se demostró nuevamente hace apenas tres meses, en ocasión de la visita oficial a nuestro país de la Alta Comisionada Louise Arbour, que se realizó el 6 de febrero a invitación del gobierno de México. En esa ocasión, se suscribió un nuevo acuerdo que garantiza la continuidad de la Oficina citada en México, así como la de los programas de cooperación que se deriven de este acuerdo, hasta 2012.

No hay comentarios.:

CNDH y las manotas de López Obrador

  CNDH y las manotas de López Obrador El asalto a la razón/ Carlos Marín Milenio, 15.11.2024; Claudia Sheinbaum contó ayer que, leyendo “tem...