2 jun 2011

Respuesta de César Romero

Columna

Marcelo y los derechos humanos/Salvador García Soto

El Universal, 1 de junio de 2011

En Ginebra, Suiza, en su reciente gira de promoción internacional, Marcelo Ebrard dijo a la Alta Comisionada de la ONU para Derechos Humanos, Navi Pillay, que su gobierno cumple con todas las recomendaciones en materia de derechos humanos en la ciudad. Pero el jefe de Gobierno del DF se olvidó de la globalización que él mismo promueve y, casi al mismo tiempo que afirmaba eso al otro lado del mundo, aquí la CDHDF emitía un comunicado para decirle a Ebrard que esperaba que cumpliera la recomendación sobre la Supervía Poniente.
Comenzó ahí un enfrentamiento público entre Ebrard y la Comisión de Derechos Humanos del DF que escaló el pasado lunes, cuando el jefe de Gobierno dejó plantado al ombudsman capitalino, Luis González Placencia, en su informe de labores 2010. Aunque había confirmado previamente su asistencia al evento agendado semanas antes con sus colaboradores, Marcelo decidió no presentarse e hizo así evidente su molestia con el organismo que cuestionó la violación de derechos humanos en la construcción de esa vía.
Se recrudeció así lo que ya era una tensa relación. La actuación de la CDHDF en la Supervía, donde dio la razón a los vecinos que se oponen a la obra y pidió a la administración capitalina una “consulta pública” entre los afectados, no gustó en el gobierno, que desatendió la recomendación. Incluso, en aquella investigación el ombudsman capitalino acusaba “clasismo y discriminación” en la planeación de la megaobra, pues mientras en colonias pudientes decidieron hacer pasos deprimidos que no afectaran a las viviendas, en las zonas populares se expropiaron y tiraron las casas para construir la vía elevada.
Lo extraño es que el vacío que Ebrard quiso hacerle a González Placencia y a la Comisión fue secundado por otros dos poderes “autónomos” de la ciudad. El presidente del Tribunal Superior de Justicia, Édgar Elías Azar, quien había confirmado su asistencia, y la presidenta de la Asamblea Legislativa, Alejandra Barrales, quien canceló unos minutos antes del evento. Es decir, ¿será que los dos “poderes”, el Legislativo y el Judicial, en la ciudad actúan por consigna del jefe de Gobierno?
Tras el desplante, Ebrard mandó pedir a la Comisión que organizara un nuevo informe al que prometía asistir. La respuesta del ombudsman fue que, por ley, la CDHDF sólo rinde dos informes, uno ante la ALDF y otro ante el jefe de Gobierno; ante la asamblea el informe se produjo en abril y el segundo se realizó el lunes, previa consulta a la oficina de Ebrard, que confirmó la fecha: 30 de mayo de 2011 a las 11:00 de la mañana.
La ironía es que el jefe de Gobierno organizó el mismo lunes por la mañana un acto para anunciar con bombo y platillo la promulgación de la Ley del Programa de Derechos Humanos del DF, a la que asistieron el magistrado Elías Azar y la diputada Barrales; a ese acto no invitaron al ombudsman González Placencia, a pesar de que fue la CDHDF la principal responsable de los diagnósticos y consultas que desembocaron en esa histórica ley que sistematiza y eleva a cumplimiento obligatorio las garantías individuales de los habitantes de la ciudad.
Así que, o hay un doble discurso sobre los derechos humanos en el gobierno capitalino o las pugnas electorales que han dividido a la izquierda en la ciudad están pesando más que las políticas públicas y las decisiones de gobierno.
NOTAS INDISCRETAS…
Se dijo en el cónclave priista del domingo por la noche: el ex gobernador al que le tienen puesta la mira en el Gobierno federal no necesariamente es por presuntos vínculos con el narcotráfico. ¿Y si fuera en realidad Arturo Montiel? Hay priistas que creen que, más que por el tema del narco, en la administración calderonista estarían evaluando un “expediente negro” por corrupción en el Estado de México.
De ese modo, explican, darían un golpe con doble efecto: le pegan al PRI y también a su precandidato puntero al 2012, Enrique Peña Nieto. ¿Será real el temor priista?..
El vocero de Sedesol, César Romero Jacobo, envió ayer el siguiente texto: “En relación a tu columna del día de hoy, quisiera hacerte las siguientes precisiones: me atribuyes la autoría de un comentario metafórico sobre el secretario Heriberto Félix Guerra. Nunca he expresado comentario alguno en ese sentido. Por cierto, también es erróneo el suponer que el titular de Sedesol vive en una casa ‘prestada’. Dicha propiedad está formalmente rentada por el secretario Heriberto Félix y su familia. Como siempre, respeto tus opiniones expresadas en tu columna, aun cuando debo anotar que no coinciden en absoluto con la realidad. Dicho lo anterior te pido me concedas la cortesía de corregir en tu espacio periodístico, al menos en lo que respecta a los hechos que aquí señalo. César Romero”. Hasta ahí la carta del funcionario…
El PRI en San Lázaro prepara un documento sobre 10 años de gobiernos del PAN. Ayer presentaron el primer capítulo donde aseguran que en materia económica hay un fracaso y que “ha sido una década perdida y de estancamiento”. Lo malo es que el encargado de presentar ese documento fue el diputado priista Óscar Levín Coppel, que de esos 10 años de panismo que cuestiona trabajó cinco como funcionario de las administraciones de Vicente Fox y de Felipe Calderón, como director de la Condusef y de la Casa de Moneda, ¿entonces de quién fue el fracaso?..

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