Nuevas medidas del Departamento de Seguridad Nacional de EU (DHS)
A partir del 22 de diciembre, el gobierno de ese país permitirá nuevamente que los pasajeros en aviones lleven objetos, como tijeras, destornilladores y demás pequeñas herramientas en los aviones. De esta forma se revocará la política de seguridad impuesta después de los ataques del 11 de septiembre del 2001.
Y es que la presencia de agentes federales en los aviones -cabinas blindadas, pilotos armados y una vigilancia completa del equipaje-, redujo considerablemente la amenaza de secuestro.
Sin embargo, la principal preocupación de los agentes de Seguridad Nacional en el Trasporte (TSA) hoy son los explosivos.
¡Bien!
Y es que diversos estudio del DHS mostraron que los agentes dedican gran parte de su tiempo a abrir uno de cada cuatro bultos para confiscar tijeras y demás herramientas personales.
Kip Hawley, subsecretario del TSA, indicó en una rueda de prensa que las nuevas regulaciones "al incorporar lo impredecible en nuestros procedimientos y eliminar los artículos de bajo potencial de amenaza, nos permitirán centrar mejor nuestros esfuerzos en detener a individuos que desean causarnos daño''.
Ahora la TSA desea que sus agentes tengan más tiempo disponible para buscar explosivos, en vez de gastar tiempo en la búsqueda de objetos cortantes.
Las medidas continúan, los pasajeros pasarán por los detectores de metales y sus equipajes de mano seguirán siendo inspeccionados. Sin embargo, ahora se puede incluir una breve inspección adicional de su persona o su propiedad. Entre los ejemplos de esa revisión adicional se incluyen la búsqueda de explosivos en los zapatos, inspección electrónica de los pasajeros, inspección palpada más amplia y chequeos extras del equipaje.
Estas inspecciones, dijo Hawley, serán hechas al azar y pueden requerir de apenas un minuto para su ejecución.
Además de que en algunos aeropuertos la inspección se basará en criterios de ''conducta observada'' en los pasajeros, que ya está vigente en varias terminales como las de Boston, Nueva York, Washington, Miami, Los Ángeles y Chicago.
Y ahora, los 43 mil inspectores de la TSA cambiarán de categoría para llamarse ''funcionarios de seguridad en el transporte'', a fin de obtener más autoridad para las inspecciones.
Estas medidas en EU sin duda serán seguidas en los aeropuertos de todo el mundo.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario