Explosión en
Torre de Pemex, limpia y sin residuos: peritos
Cable de Notimex,
7 de febrero de 2013
En
conferencia de prensa, los peritos Bryan
Dunagan y Mauricio Sheker, aseguraron que las explosiones de gas metano
desafortunadamente son muy comunes, sobre todo en minas y en el drenaje, y que
para alcanzar un nivel de explosividad basta con solo el 5 ó 10% de acumulación en el aire.
En
conferencia de prensa en conjunto con funcionarios de Pemex, los peritos de la empresa SGS informaron que para iniciar
la explosión se necesita una baja cantidad de metano, la cual no debería
rebasar del 15% en la composición del aire, ya que esto desplazaría el oxígeno
y causaría malestares severos a las personas que se encontraban en el lugar.
Sin
embargo, aseguraron que en una proporción del 5 al 10% de gas metano, éste
sería imperceptible para las personas y suficiente para iniciar una explosión
como la registrada en las instalaciones de Petróleos Mexicanos.
Dunagan explicó
que el gas metano no tiene una reglamentación específica para que se utilicen
odorantes y en su estado natural es inodoro, por lo que no sería percibido por
las personas.
Asimismo,
mencionó que actualmente se está buscando el punto de entrada o fisura por
donde el gas pudo entrar a la zona de pilotes donde se registró la explosión
que provocó la muerte de 37 personas en el edificio de Pemex.
Los
peritos destacaron que para provocar una explosión por metano, tampoco se
necesita una fuente grande de calor, ya que sólo bastaría una chispa de
corriente eléctrica o bien energía estática.
Asimismo, se
presume que en la explosión registrada en el edificio B2 hubo una baja cantidad
de gas acumulado, lo que se observa en la falta de residuos, ya que la
explosión consumió el oxígeno y no se provocó un incendio.
Por
otra parte, el director corporativo de Operaciones de Pemex, Carlos Murrieta
Cummings, detalló que desde el punto de vista estructural de los accesos el uso
de edificio está garantizado.
En
cuanto al desalojo del miércoles, corroboró que se trató de una bolsa de basura
que se quedó con alimentos descompuestos, pero no pasó a mayores.
Con
respecto a la posibilidad de utilizar oficinas alternas, detalló que se está
analizando cual es la mejor manera en que podría manejarse, en función de lo
que serían los tiempos que se plantearon para el edificio B2 como el B1.
Al respecto, el
director Corporativo de Administración Víctor Díaz Solís, estimó que sería a
finales de febrero que se tengan las alternativas necesarias y con todos los
trabajadores reinstalados para continuar trabajando normalmente.
Detalló
que en el edifició B-2 se albergaban las áreas de Pemex Refinación, Recursos
Humanos y Relaciones Laborales, y un área administrativa de tecnología de
información. Asimismo estaba una parte del área jurídica, así como archivos de
concentración de expedientes de recursos humanos, los cuales están respaldados por
medios electrónicos, y expedientes de escrituras de los siguientes organismos
subsidiarios.
Aseguró
que a la fecha han podido recuperar, en el caso de Pemex Refinación, Pemex Gas
y Pemex Petroquímica, casi el 100% de los expedientes que se encontraban en el
lugar, mientras que de Pemex Exploración solo se han rescatado el 40 por
ciento.
Subrayó
que la operación de Pemex no se ha detenido ningún minuto, aunque
administrativamente se han sufrido alguna serie de contratiempos.
En
cuanto a los 37 fallecimientos, detalló que se ha procedido con el pago de
indemnización de todos con excepción de cuatro casos, los cuales se prevé
concluyan en breve y que "no se escatimará ningún recurso".
Por
su parte, Sergio Martínez, subdirector de Servicios Corporativos de Pemex,
informó que la parestatal tiene cien
millones de pesos anuales para mantenimiento, recursos que han servido para
equiparar a la empresa con equipos de seguridad como los de incendios,
"erogamos alrededor de 100 millones de pesos anuales en servicios de
mantenimiento".
Mac
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^
Por otro lado,
la PGR sospecha
que el gas que presuntamente invadió el sótano de la Torre B2 comenzó a
filtrarse o generarse desde hace meses sin que nadie se diera cuenta, lo que
convirtió a ese sitio en una “bomba de tiempo”.
Y es que el sótano, según declaraciones
recabadas por la misma PGR, llevaba al menos siete meses sin ser verificado, pues el último
mantenimiento que se le había dado a los pilotes ocurrió el verano pasado.
La
presencia de dicho gas, cuyo origen aún se indaga, combinado con el hecho de
que el inmueble no estaba preparado para una contingencia de ese tipo, y el
peso de los archivos que se encontraban en la planta baja y primer piso, se
combinaron para generar la trampa que costó la vida a 37 personas.
En
un recorrido por la zona del desastre, el subprocurador de Control Regional,
Procedimientos y Amparo de la PGR, Alfredo Castillo, sostuvo que incluso no hacía
falta que el gas, presumiblemente metano o natural, se concentrara en una
cantidad “significativa” para que se generara el daño que se propició.
“Ni siquiera estamos hablando de una gran
concentración de gas; se puede dar una filtración de manera paulatina por
meses, ésta se puede ir concentrando en la zona de pilotes, además podemos
hablar de un gas que no huele y que después con un corto circuito o con una
pequeña llama es lo que detona, la fuerza del impacto se da porque busca zonas
de salida”, dijo.
Lo que
se encuentra bajo investigación, explicó el funcionario, es el origen del gas.
La Procuraduría cree que pudo ser por
una fisura o porosidad en las instalaciones de la “Estación Búfalo”, donde hay
calderas y calentadores de agua, y que el gas se filtró por un túnel
subterráneo o algún ducto.
También se analiza si el gas metano se produjo
por la concentración inusual de residuos orgánicos en el subsuelo, o incluso
aguas negras.
El subprocurador describió que al momento de
surgir la “chispa” o “corto circuito” que desató la explosión, se produjo una
falla estructural en el techo del sótano que no estaba diseñado para resistir
un golpe así. Posteriormente vino el derrumbe que le costó la vida a la mayoría
de los trabajadores.
“La pequeña explosión genera salida, y el peso
de los archivos y la falla estructural del edificio genera la caída de dos
pisos y, en los demás niveles, vidrios rotos”.
Respecto de la chispa que detonó la explosión,
las investigaciones ministeriales presumen que pudo originarse por la conexión
de una lámpara que llevaban los contratistas y que se conectó con una clavija
“hechiza” o en mal estado.
Reconstrucción,
paso a paso
El subprocurador Alfredo Castillo explicó que
una vez que concluyan los peritajes en estructuras, química, criminalística e
incendios, entre otros, se realizará el de mecánica de lesiones, con el cual
estarán en posibilidades de reconstruir paso a paso lo sucedido el 31 de enero.
Estimó que será de cinco a 10 días cuando podrán dar a conocer conclusiones más
sólidas sobre las causas del siniestro y las responsabilidades que se pudieran
fincar.
El
procurador Jesús Murillo Karam reconoció el lunes que se indaga si existió
negligencia de trabajadores de la paraestatal o de la compañía responsable del
mantenimiento.
Explosión,
con “características delictivas”
Alfonso Navarrete Prida, secretario de Trabajo
y Previsión Social, consideró que la explosión en Pemex tiene “posiblemente
características delictivas”, pues afirmó que cuando existe un fallecimiento por
causas no naturales se está en la presencia de un hecho delictivo.
Navarrete Prida expuso que en el momento en
que hay una víctima fatal por muerte no natural se está en presencia de la
posible constitución de un hecho delictivo.
Entrevistado al término de su participación en
el homenaje que la Universidad Nacional Autónoma de México rindió a Jorge
Carpizo McGregor, recordó que la PGR interviene en el caso.
“La PGR tendrá que revisarla, para eso hay una
investigación y ésa es la instancia mediante la cual, a través de peritajes, se
pueden determinar las causas y condiciones en las instalaciones que pudieron
producir un accidente, si es que ese fuera el caso”, detalló.
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