Rodolfo León Aragón, con su negro historial (caso Posadas Ocampo), casi seguro ganador

Revista Proceso # 2065, 29 de mayo de 2016..

León Aragón, con su negro historial, casi seguro ganador en Salina Cruz/

JOSÉ GIL OLMOS

Rodolfo León Aragón es el candidato del PRI a la presidencia municipal de Salina Cruz, Oaxaca, y todo apunta a que El Chino –apodo que adquirió cuando era jefe de la Policía Judicial Federal– ganará en las elecciones del próximo 5 de junio, no obstante un pasado que lo liga con el Cártel de Juárez y con el asesinato del cardenal Juan Jesús Posadas Ocampo.

En Salina Cruz, por cierto, está el tercer puerto más importante del país, señalado por la Secretaría de la Defensa como punto de tránsito de las drogas que van de Sudamérica a Estados Unidos, y en cuyas cercanías el 16 de julio de 2008 la Armada interceptó un submarino cargado con casi seis toneladas de cocaína.

El 24 de mayo de 1993 Posadas Ocampo llegó al aeropuerto de Guadalajara, donde habría de encontrarse con el entonces nuncio apostólico Girolamo Prigione (quien murió el viernes 27). Ahí, un comando asesinó al cardenal. La primera versión oficial, la del entonces procurador general Jorge Carpizo, fue que sicarios del cártel de los Arellano Félix lo habían confundido con su verdadero objetivo: Joaquín El Chapo Guzmán.

Esa versión siempre se puso en duda. Años después, el cardenal Juan Sandoval Íñiguez –quien sustituyó a Posadas al frente del Arzobispado de Guadalajara– sostuvo que ese homicidio había sido premeditado y acusó a Carpizo de obstaculizar la investigación para no perjudicar a “peces gordos de la política” que querían “callar” al prelado por la información que tenía sobre funcionarios implicados con el narcotráfico.

 Sandoval afirmó que el asesinato de Posadas había sido “un crimen de Estado” y acusó a León Aragón de haber participado en el entramado del crimen.

 El 9 de marzo de 2002 el narcotraficante Benjamín Arellano Félix fue capturado en Puebla. Extraditado a Estados Unidos en 2011, habló del caso Posadas Ocampo y señaló a León Aragón como responsable de ordenar la ejecución del prelado, supuestamente porque ayudaba “a conseguir armas para los grupos guerrilleros”.

 El ahora candidato oaxaqueño, según Benjamín Arellano, le habría confesado que los ejecutores de Posadas fueron policías judiciales a su mando. En su libro Los señores del narco, Anabel Hernández dio a conocer declaraciones de un exfuncionario federal sobre el caso; éste aseguró que los Arellano Félix “jamás habrían matado al cardenal, ni por accidente”, pues lo conocían bien desde que estuvo en Tijuana e “incluso bautizó a una hija de Ramón Arellano Félix”.

 Una de las fuentes de la periodista, un agente asignado a la investigación, aseguró que el operativo al parecer fue coordinado por el entonces jefe de la Policía Judicial Federal, Rodolfo León Aragón.

 Vínculos con Carrillo

 León Aragón siempre rechazó esas afirmaciones. Aun así, renunció a su cargo, aunque de inmediato fue enviado a la agregaduría de la Procuraduría General de la República (PGR) en Guatemala. El ahora candidato oaxaqueño –jefe de la Policía Judicial Federal durante las gestiones de los procuradores Enrique Álvarez del Castillo, Ignacio Morales Lechuga y Jorge Carpizo– también fue acusado de tener vínculos con el Cártel de Juárez.

 Su nombre salió a relucir como parte de las investigaciones de la PGR en el llamado “Maxiproceso”, iniciado en marzo de 1998 cuando un juez federal giró las primeras 60 órdenes de aprehensión, de una lista de 100, contra presuntos miembros y colaboradores del Cártel de Juárez.

 Según dicha investigación –la 1226/MPFEADS/98–, León Aragón habría formado una red de vínculos con miembros del Cártel de Juárez para proteger la llegada de cocaína colombiana al puerto de Salina Cruz y luego trasladarla por la sierra de Oaxaca hacia el norte del país.

 En consecuencia, a León Aragón se le giró orden de aprehensión. En febrero de 1999 fue detenido en Salina Cruz y trasladado al Reclusorio Sur, en la Ciudad de México, donde fue puesto a disposición del juez noveno de Distrito en Materia Penal.

 No obstante el exjefe policiaco salió libre de inmediato, pues él y otros funcionarios acusados de tener vínculos con el jefe del Cártel de Juárez, Amado Carrillo, habían interpuesto amparos ante el Juzgado Tercero de Distrito en Procesos Penales.

En agosto de 2004 el Primer Tribunal Colegiado resolvió anular la orden girada contra el exjefe policiaco. A partir de entonces León Aragón adoptó un perfil bajo y se refugió en su natal Salina Cruz, donde se dedicó a la abogacía y construyó un rancho, donde vivía con su madre.

 Desde ahí apoyó a varios candidatos a alcaldes, entre ellos su hermano, el doctor Alejandro León Aragón, quien ganó la presidencia municipal en 1999, pero cobijado por las siglas del PRD, única vez en la historia del municipio que ese partido gobernó.

 Hoy el exjefe de la Judicial Federal –cuyo nombre se menciona al menos 200 veces en la investigación del asesinato de Posadas Ocampo y al menos 17 ocasiones en la averiguación previa AP/SE/001/95 que la PGR abrió luego de las declaraciones de Benjamín Arellano Félix– es el candidato del PRI a la presidencia municipal de Salina Cruz.

 El candidato

 En su tierra a León Aragón le dicen El Coco o El Hombre Leyenda. Y, pese a su pasado, el PRI lo hizo su candidato a la presidencia municipal de Salina Cruz sin necesidad de celebrar una asamblea municipal; la designación le fue otorgada el pasado 16 de abril por decisión unánime del Comité Ejecutivo Nacional priista que encabeza Manlio Fabio Beltrones y con el apoyo del candidato tricolor a la gubernatura, Alejandro Murat Hinojosa.

 El pasado 18 de abril, El Coco festejó su cumpleaños en el salón de fiestas Salemic, de Salina Cruz. Ahí, según las crónicas periodísticas locales, llegó Murat Hinojosa, quien fue recibido con alegría por el festejado.

 Y el pasado jueves 12, al asistir a la Fiesta Pueblo, León Aragón saludó a Ivette­ Morán de Murat, esposa del candidato priista, quien asistió como invitada especial a la celebración. Ahí, entre la gritería de “¡Coco, Coco, tú serás nuestro presidente!”, el expolicía aprovechó para lanzar sus propuestas de campaña y sus compromisos:

 “Ya no vamos a permitir que Salina Cruz se mantenga sumido en el atraso, vamos a crear las condiciones necesarias para lograr el desarrollo que anhelamos”, prometió.