Con la bendición del Papa Francisco, ya se trabaja en un encuentro de políticos de Centroamérica y México con obispos, previsto para febrero próximo en la casa del episcopado mexicano. En un gesto de acercamiento, se cursarán invitaciones a exponentes de Morena, el movimiento del presidente electo Andrés Manuel López Obrador...
El padre Juan Espinoza Jiménez
Vatican Insider, 20/09/2018
ANDRÉS BELTRAMO ÁLVAREZ
CIUDAD DEL VATICANO
Será un diálogo con políticos católicos de México y Centroamérica. Pero también incluirá señales de acercamiento el nuevo presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador. Con la bendición del Papa, en el Vaticano se trabaja en la organización de esta cita, que ya tiene fecha: febrero de 2019. “No pretendemos hacer ningún partido, ningún movimiento”, aclaró Juan Espinoza Jiménez, secretario general del Consejo Episcopal Latinoamericano y uno de los involucrados en la organización. “Buscamos tender puentes, reconocernos, ayudar a la unidad”, apuntó.
Los avances en la preparación serán comunicados a Francisco, la mañana de este viernes 21 de septiembre, cuando la comisión directiva del Celam sea recibida por él, en una audiencia privada en el Vaticano. Se trata de una iniciativa que surgió a instancias de la Pontificia Comisión para América Latina, el organismo de la Santa Sede guiado por un uruguayo, Guzmán Carriquiry Lecour, secretario con funciones de vicepresidente.
Del 15 al 17 de febrero próximos, en la Casa Lago de la Conferencia del Episcopado Mexicano, se reunirán poco más de 100 personas. Se convocarán unos ocho políticos de cada país de la zona, con una excepción: México contará con 20 representantes. Por su amplitud y por tratarse del país anfitrión. Completarán la lista dos decenas de obispos de diversos países.
“Ante todo queremos nuevamente reunir a estos católicos con responsabilidades políticas y tener con ellos un diálogo abierto, fraterno, amistoso, solidario, un signo de unidad y comunión con ellos”, explicó Espinoza Jiménez, en entrevista con el Vatican Insider.
Con esas palabras se refirió al primer “Encuentro de católicos con responsabilidades políticas”, que tuvo lugar en Bogotá, Colombia, en diciembre de 2017. Aquella cita, recordó el clérigo, no tenía expectativa de sacar líneas de acción sino de verse las caras, conocerse. “Asistió gente de diferentes partidos, diferentes tendencias. Fue muy interesante y respetuoso”, añadió.
En esa oportunidad fueron invitados el expresidente Felipe Calderón del Partido Acción Nacional (PAN), las senadoras Dolores Padierna Luna, del Partido de la Revolución Democrática (PRD) y María del Rocío Pineda Gochi, del Partido Revolucionario Institucional (PRI), además del director general adjunto de Asuntos Religiosos de la Presidencia de la República, Roberto Herrera Mena.
Así como los diputados federales Cecilia Romero Castillo, del PAN; Bernardo Bátiz del Movimiento Regeneración Nacional (Morena), Ramón Lemus Muñoz Ledo, presidente municipal de Celaya; y Gregorio Ramírez Delgado, de la Fundación Ciudadana para el Desarrollo Integral de Michoacán. Además de Juan Carlos Romero Hicks de Guanajuato y actual senador; Eruviel Ávila Villegas, ex gobernador del Estado de México y actual presidente del PRI en la capital; y el ex gobernador de Morelos, Marco Antonio Adame.
Al final de aquellos trabajos surgió la inquietud de dar un seguimiento a la actividad. Por eso se idearon convocatorias regionales, como esta ya establecida en México. Para el mes de abril se planea reunir a políticos de países sudamericanos.
“La realidad que estamos viviendo ahora en Centroamérica y México amerita una reflexión, para ver por dónde van nuestros países, por donde va la política, qué está pasando con la democracia y qué tipo de democracia tenemos, qué gobiernos se están gestando. Por qué estas realidades que estamos viviendo las cuales parecen ir hacia atrás, con situaciones difíciles, duras, que son pagadas tristemente por la gente más pobre, por quienes tienen menos oportunidades, menos posibilidades”, delineó Juan Espinoza.
Estableció que, esta vez, sólo asistirán personajes abiertamente católicos, para abordar aspectos de la responsabilidad política desde la vivencia de la fe. El objetivo, continuó, es abrir un “espacio de diálogo y de reflexión”, que también proyecte futuras acciones concretas
Asimismo, el clérigo anticipó que, “sin duda alguna”, los organizadores cursarán invitaciones a algunos exponentes cercanos al futuro gobierno del presidente electo de México, López Obrador. Una forma concreta de tender puentes.
“El nuevo gobierno de México ha expresado que está abierto al diálogo, quiere escuchar a diferentes sectores de la sociedad, estar atento y abrir espacios de comunicación. El (presidente) así lo ha expresado y se ha mostrado interesado en un acercamiento a la Iglesia, y claro, la Iglesia también tiene ese interés”, reseñó.
Y garantizó: “Sin duda, en el encuentro se dirá algo también de esto. Es fundamental lo que se pueda hacer en México en la relación entre el Estado y la Iglesia. No queremos competir en ningún momento, ni hacer sombra sino facilitar para que nuestra gente, creyente y no creyente, tenga una mejor vida, tenga mayores oportunidades de desarrollo, de educación, de formación. Queremos unir y hacer sinergia con todos los campos de la sociedad”.
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