Mañanera del jueves 13 de abril de 2023..
-Para concluir, presidente, su opinión sobre la próxima entrega de la medalla ‘Belisario Domínguez’ a la escritora Elena Poniatowska.
PRESIDENTE ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR: Muy bien, muy bien, Elenita es excepcional.
PRESIDENTE: No creo porque… Ya no voy a esos actos porque hay muchas agresiones. Están, hablábamos, muy enojados nuestros adversarios, entonces montan espectáculos, y tengo que cuidar la investidura presidencial. Porque para tener fama pueden faltarme al respeto, humillarme y pues tengo que cuidar la autoridad. Porque eso les daría gusto, ¿no?, a los adversarios, potentados, a los corruptos, a los que quieren vernos como colonia y no aceptan de que somos un país independiente y soberano. Entonces, hay que cuidarse y hay que cuidar la investidura presidencial.
Pero sí me da mucho gusto que se haya entregado la medalla ‘Belisario Domínguez’ a Elenita.
Porque don Belisario, bueno, es el hombre de la dignidad, del valor civil, del que se atreve, cuando todo mundo callaba, a hablar en contra de Victoriano Huerta, de los pocos que defiende a Madero después de su asesinato, y eso le cuesta a él la vida, unos sicarios del huertismo lo asesinan; se habla que le cortaron la lengua, lo martirizaron.
Es un orgullo don Belisario y entregarle la medalla de un hombre así a una mujer consecuente como Elenita Poniatowska pues es todo un acontecimiento, ¿no? Porque se les han entregado a gentes que no la merecían, nada más que por la politiquería, ¿no?
Pero Elena Poniatowska es la mejor escritora, pero además es una intelectual vinculada al pueblo, a las luchas sociales, desde el movimiento del 68. A nosotros siempre nos acompañó, siempre, en nuestra lucha por la democracia. Siempre estuvo ella, Carlos Monsiváis, Luis Javier Garrido —estoy hablando de los que ya se fueron, se nos adelantaron— José María Pérez Gay, Hugo Gutiérrez Vega, Fernando del Paso; Pitol, Sergio; Arnaldo Córdova y muchos otros, muchos otros intelectuales de primera.
Últimamente, yo escribí algo de que quedaban dos intelectuales así de mucho respeto:
Fernando del Paso, un gran escritor que ya falleció, ese estuvo en actos defendiéndonos. Cuando el desafuero, en la plaza en Guadalajara leyó un texto. Y cuando el fraude del 2006 aquí en el Zócalo estuvo también, y habló Pitol y habló Monsiváis.
Y Elenita siempre, siempre, siempre. Y es la que queda con vida y ojalá y siga así, porque aun con su edad sigue siendo una mujer muy lúcida, muy inteligente, merecedora de ese premio y de otros más.
Entonces, sí me da mucho gusto, la verdad. E invito a que la lean, porque yo creo que eso es lo que más satisfacción le debe de producir, el que lean sus textos, que son un agasajo.
Muy bien. Ya nos vamos, ¿no? Ya, vamos para mañana.
Nada más nos va a quedar Ernesto Ledesma.
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