Operativo Culiacán-Navolato

Toma Ejército control en Sinaloa:

Habrá una Coordinación General a cargo del General de Brigada Noé Sandoval Alcázar, Comandante de la 9ª Zona Militar.

El Secretario de Gobernación, Juan Camilo Mouriño, anunció en Culiacan el Operativo Conjunto Culiacán-Navolato en su calidad de Secretrio Ejecutivo del gabinente de Seguridad Nacional , que consiste en el arribo de 2 mil 723 elementos de las tres corporaciones de seguridad en ambos municipios, la toma del centro de auxilio 066 y de videovigilancia estatal C-4, así como la aplicación de exámenes de control de confianza a mandos policiacos municipales y estatales.

El aparatoso operativo -fueron prácticamente tomados por militares desde antes que se llevara a cabo la reunión, la segunda del gabinete de seguridad nacional fuera de la Ciudad de México- es una respuesta a la creciente ola de violencia que se ha dado en Sinaloa que ha generad incluso terror. De hecho, el pasado fin se semana, durante la celebración del 10 de mayo, las calles de Culiacán estuvieron vacías ante el temor de la población a quedar en medio de una refriega.

El Plan de acción Ejes del Operativo Conjunto Culiacán-Navolato, consiste en.

1.-Envío de 2 mil 723 elementos federales. *1,433 soldados, tres aeronaves y 129 vehículos *740 elementos de la Secretaría de Seguridad Pública Federal *500 elementos de la Secretaría de Marina *50 elementos de la PGR, entre peritos, ministerios públicos y fiscales

2.- Toma del centro de auxilio 066 y de videovigilancia estatal C-4.

3.- Aplicación de exámenes de control de confianza a mandos policiacos municipales y estatales.

Asistentes a la reunión del Gabinete de Seguridad Nacional.

Secretario de Gobernación Juan Camilo Mouriño Terrazo; Secretario de la Defensa Nacional General Guillermo Galván Galván ;Procurador General de la República Eduardo Medina-Mora; Secretario de Marina Almirante Mariano Francisco Saynez Mendoza; Subsecretario de Seguridad Pública Facundo Rosas (se noto la ausencia de Genaro García Luna).

Gobernador Jesús Aguilar Padilla; Procurador Luis Antonio Cárdenas Fonseca; Secretaria de Seguridad Pública Josefina García Ruiz; Secretario General de Gobierno Rafael Oceguera Ramos Alcalde de Culiacán Jesús Vizcarra Calderón; Alcalde de Navolato Fernando García Hernández Alcalde de Salvador Alvarado Jorge Casal González

También estuvieron presentes empresarios representantes de la Iniciativa Privada y el Rector de la UAS, Héctor Melesio Cuén Ojeda.

PALABRAS DEL SECRETARIO DE GOBERNACIÓN

Culiacán, Sinaloa, a 13 de mayo de 2008

Señoras, señores representantes de los medios de comunicación, muy buenas tardes.
En primer lugar, agradezco su presencia, pues la labor y cobertura que realizan, a través de sus medios, sobre las acciones que las autoridades llevamos a cabo, en materia de seguridad pública, nos permite mantener informada a la ciudadanía.
Gracias por acompañarnos, y me parece especialmente relevante en un día como hoy, aquí en Sinaloa, donde hemos tomado una serie de acuerdos que seguramente nos permitirán atender esta inquietud de la ciudadanía de Sinaloa.
Agradezco al licenciado Jesús Aguilar Padilla, Gobernador del Estado de Sinaloa, la oportunidad de compartir este espacio y sobre todo esta productiva jornada de trabajo, en la que los miembros del Gabinete de Seguridad hemos sostenido reuniones con el Gabinete Estatal de Seguridad, con presidentes municipales precisamente de la zona donde mayor violencia se ha generado a últimas fechas y con diversos representantes de la sociedad civil.
Agradezco también a mis compañeros integrantes del Gabinete de Seguridad.
México vive momentos difíciles y la violencia, vinculada al crimen organizado y al narcotráfico, se ha incrementado considerablemente en las últimas semanas.
La confrontación entre los principales cárteles del narcotráfico se ha hecho particularmente visible en los estados del norte del país como es el caso de Sinaloa.
Los actos de violencia han impactado a la sociedad y han costado la vida a servidores públicos ejemplares tanto de la Policía Federal, de policías estatales, municipales y también de las Fuerzas Armadas.
Ante estos hechos de violencia, el Gobierno Federal refrenda su determinación de enfrentar con toda la fuerza del Estado a las redes del crimen organizado.
Seguimos y seguiremos firmes en esta lucha porque siguen vigentes las causas por las que se decidió librarla.
El Estado Mexicano está siendo desafiado por quienes de manera cobarde corrompen, amenazan, envenenan y ejecutan.
El reto que enfrentamos es de todos. Debemos fracturar y desmantelar las redes operativas y financieras de la delincuencia organizada.
En este esfuerzo, el objetivo paralelo es fortalecer a México como un país de leyes, donde se sumen las voluntades y se establezcan compromisos para luchar contra la ilegalidad.
Hoy se hace cada vez más necesario para los tres órdenes de Gobierno encontrar coincidencias, construir acuerdos y trabajar juntos. Esto es de suma trascendencia cuando se trata de resolver una situación que afecta y ofende a los sinaloenses y a todos los mexicanos y que es obligación básica de todo gobierno: garantizar la protección y la seguridad de todos los habitantes.
El día de hoy, el Gabinete de Seguridad sesionó por primera vez en el estado de Sinaloa, particularmente en la ciudad de Culiacán. Nuestra presencia en esta ciudad responde, en primer lugar, al enorme compromiso del Gobierno del Presidente Calderón con los sinaloenses y responde también tanto a la solicitud del Poder Legislativo del estado de Sinaloa como a la manifestada por el propio titular del Ejecutivo Estatal, el Gobernador Jesús Aguilar Padilla, en una reunión que recientemente sostuvimos apenas el jueves pasado, en la Ciudad de México.
Autoridades de los tres órdenes de Gobierno hemos revisado las acciones realizadas y el conjunto de la estrategia contra el crimen organizado pues es importante siempre evaluar y afinar cada acción emprendida para dar mejores resultados.
En ese sentido y como resultado de esa evaluación, hemos resuelto, en atención a la situación extraordinaria que vive el Estado, poner en marcha un nuevo Operativo Conjunto Culiacán-Navolato.
La finalidad de este Operativo Conjunto es recuperar para cada familia sinaloense la paz y la tranquilidad a la que legítimamente tienen derecho.
El Gobierno Federal, en conjunto con los gobiernos del estado de Sinaloa y los municipios, emprendemos con este operativo un esfuerzo sin precedente y acciones inéditas en contra del crimen organizado.
Estamos seguros que los resultados serán en beneficio de los sinaloenses.
En concreto, el Operativo Conjunto consiste -como ya lo ha dado a conocer el General Secretario de la Defensa- en mil 433 elementos de esta Secretaría, además de vehículos y aeronaves; 740 elementos de la Secretaría de Seguridad Pública Federal; 500 elementos de la Secretaría de Marina, también, por supuesto, con equipo de esa propia Secretaría y los 50 elementos de la Procuraduría General de la República que ha anunciado ya el Procurador General.
En total, son 2 mil 723 elementos para reforzar la seguridad y ser más efectivos en la lucha contra el crimen organizado.El Operativo supone también otra serie de medidas de más largo alcance. En primer lugar, la aplicación de exámenes de control de confianza a mandos policiacos municipales y estatales, así como también a todos los elementos de la policía de los municipios donde más violencia se ha generado en últimas fechas. Éstos se aplicarán a partir de las próximas semanas.
La Policía Federal mantendrá el control gerencial del C-4 y por lo tanto, de toda la información que los ciudadanos compartan con las autoridades.
Habrá una Coordinación General de este Operativo Conjunto y ésta estará a cargo del General de Brigada Noé Sandoval Alcázar, Comandante de la 9ª Zona Militar.Y por último, respecto al Operativo, los resultados del mismo serán evaluados periódicamente, para ir afinando la estrategia.
Lamentablemente, y como lo ha señalado el Presidente Felipe Calderón, esta lucha implica tiempo, recursos materiales y vidas humanas.
Sin embargo en esta lucha, y queremos reiterarlo aquí en Sinaloa, no existe para nosotros la derrota, ningún grupo criminal es capaz de resistir la fuerza del Estado; mucho menos si logramos coordinar la capacidad del Estado representado en sus tres órdenes de Gobierno, y si además cada mexicano asume consciente y decididamente el compromiso cotidiano de erradicar la ilegalidad y la delincuencia.
Como lo ha expresado el Presidente Calderón, esta lucha por liberar a México del crimen organizado, es una lucha en la que está en juego el futuro de nuestros hijos. Se trata de recuperar espacios que la delincuencia organizada consideraba como propios.
El titular del Ejecutivo ha realizado una convocatoria y una exigencia a todos los ciudadanos sin excepción a sumarse en esta lucha.
El Presidente Calderón ha hecho referencia a la tarea que cada actor, poder o sector de la sociedad le corresponde en esta lucha que es de todos los mexicanos.
El Poder Judicial al participar de manera decidida para terminar con la impunidad con la cual los delincuentes salen de las prisiones.
Es un llamado también al Poder Legislativo para que en función de su responsabilidad legisle y con ello vaya cerrando el paso al crimen organizado.
A los gobernadores y alcaldes a coordinarse de manera efectiva con el Gobierno Federal para sumar capacidades.
A los ciudadanos los llama a denunciar los delitos, a avisar a las autoridades de las operaciones criminales y a no solapar, la existencia de estas organizaciones.
Debemos sumarnos entonces a este llamado que hace el Jefe del Estado Mexicano para hacer parte activa de esta Estrategia Nacional Contra la Delincuencia.
El "ya basta", expresado por el señor Presidente, es una invitación a todos a apoyar al Gobierno en esta lucha por poner un alto a la delincuencia.
Frente al crimen organizado sociedad y Gobierno debemos entendernos como aliados y trabajar juntos para formar un frente común.
El mejor escenario para el crimen organizado es, sin duda, un escenario de falta de coordinación, de desunión, de cobardía o de apatía, ya sea del Gobierno o de la sociedad.
Compartimos el compromiso y la convicción de que nuestros niños y jóvenes pueden crecer en un México seguro, libre de corrupción e impunidad. Por ello es indispensable hacer un esfuerzo conjunto, quitar la raíz, las causas del crimen organizado.
Ahora más que nunca es preciso contar con la participación de toda la sociedad sinaloense; digamos juntos "ya basta" en Sinaloa, y digamos "ya basta" en todo México.

INTERVENCIÓN DEL PROCURADOR GENERAL EDUARDO MEDINA MORA

Este día venimos a Culiacán a una reunión de trabajo particularmente significativa. Los elementos de las dependencias que forman parte del gabinete de seguridad del gobierno federal, vamos a unirnos a las fuerzas de seguridad y de justicia de Sinaloa para que entre todos podamos crear un frente más amplio, más fuerte y más poderoso en contra de la inseguridad y la violencia en las comunidades sinaloenses.

En apoyo del Operativo Culiacán-Navolato que hoy se instala formalmente, la Procuraduría General de la República desplegará 50 funcionarios: ministerios públicos, fiscales y peritos, tanto del despliegue territorial de la PGR en Sinaloa, como de las áreas centrales.

Las últimas semanas han sido muy violentas en Sinaloa, con muertes y ejecuciones que mostraron mayor despliegue de armas, saña y capacidad de fuego. Las bandas del crimen organizado que agobian la tranquilidad de las familias y comunidades de Sinaloa, buscan intimidar rivales, cobrar traiciones, proteger sus niveles de influencia local y controlar la plaza, pasando para ello por la muerte de agentes de seguridad municipal, estatal y federal, y también de ciudadanos obedientes de la ley.

Esta historia no es nueva. Este problema, ciertamente, no es importado. En otros países, como Colombia e Italia, que también vivieron muchos años de violencia inusitada y daños graves al tejido social, por el efecto corrosivo de la impunidad y corrupción del crimen organizado, los supuestos “benefactores sociales” rápidamente dieron a conocer su faz sanguinaria, cuando se afectaron sus intereses claves.

Los sicarios se matan entre ellos por la lucha del mercado y por el control de sus territorios y, al hacerlo, masacran cada día la paz, la tranquilidad y la confianza de toda la sociedad. Pasó en otras tierras y está sucediendo en nuestro México, está sucediendo en Sinaloa.

La estrategia que despliega el Estado Mexicano, el Gobierno del Presidente Felipe Calderón, les ha causado fuertes y severos daños a las células del crimen organizado que operan desde estas tierras.

Se les ha reducido significativamente y se les ha secado prácticamente el abasto de cocaína y pseudofedrína proveniente de aliados y contactos internacionales, y la desarticulación sistemática de sus redes logísticas y de operación, les ha minado sus capacidades de siembra, cosecha, acopio, transporte y distribución de marihuana.

El trabajo conjunto y bien articulado de las autoridades financieras y de justicia de México, Colombia, Estados Unidos y países de Centroamérica ha logrado impactar redes y vínculos dedicados al lavado de dinero, y al financiamiento de muchas de sus actividades.

El trabajo sistemático para el intercambio de información, proveniente de inteligencia policial, de las investigaciones y procesos judiciales a nivel nacional e internacional, así como una de la mejor comprensión de la dinámica del mercado ilegal de las drogas y de sus principales variables, nos permite tener una visión estratégica más completa, más profunda y ciertamente de mayor alcance.

Todo ello converge en más detenidos, en más sujetos a proceso penal y en sentencias más duras contra los miembros de la delincuencia organizada. Quienes forman parte de los grupos delictivos de esta región, saben muy bien que la acción del Estado es hoy más fuerte, y más decidida en su contra. Por ello, al combinarse la lucha por mercados y plazas y la dureza y convicción de las acciones del Ejército, de la Armada de México, de la Policía federal y de los fiscales de la Federación en su contra, la reacción mostrada es de violencia y también de desesperación.

No nos engañemos ni veamos espejismos. La acción del Estado ha tenido ya una respuesta. Desde hace un año hemos venido sufriendo las muertes de policías preventivos, judiciales y ministeriales de todos los niveles, de elementos de la Marina, del Ejército Mexicano, la del comisario general Edgar Eusebio Millán, antes la del inspector José Nemesio Lugo, y de varios de los directivos y mandos de seguridad pública y justicia, de varios municipios de estados del país.

Es cierto, muy cierto, que la impunidad y tolerancia social se han asentado a lo largo de los años a través de la corrupción, de la capacidad de corromper elementos de las instituciones y de coptar, por las buenas o por medio de la violencia, a los actores que ellos estiman claves para la protección y desarrollo de sus actividades ilícitas.

Este modelo de reproducción del crimen organizado está en crisis. La violencia que muestran es un signo de debilidad, de desesperación, de frustración, los acuerdos y vínculos en que sustentan su dominio territorial se están rompiendo. Sus alianzas internacionales les han perdido confianza y les han retirado su crédito. Les hemos asegurado drogas, armas, dinero y elementos.

Las autoridades de hoy estamos comprometidas y tenemos la decisión de actuar a fondo en su contra, decisión que nace de una voluntad presidencial firme, de una visión estratégica distinta y de un profundo compromiso con la paz, la tranquilidad y confianza de las familias mexicanas y, por supuesto, de las familias y comunidades de Sinaloa. Por esto, es importante que la sociedad asuma que la violencia de hoy se nutre también de la tolerancia a lo ilícito, de la tolerancia y aceptación a lo ilegal como forma de vida y como patrón de ascenso social aceptable y tolerable. En Sinaloa, en estas tierras, es imprescindible que superemos la tolerancia al falso oropel de la subcultura de lo ilegal, del dinero fácil y de uso de armas de fuego, como parte del paisaje. Aprovechemos la coyuntura y unamos las voces en contra de la violencia y en contra de la corrupción e impunidad, ya que ello distorsiona las formas honestas de vida e inhiben el pleno desarrollo de las capacidades económicas, sociales, artísticas y culturales de Sinaloa, de los sinaloenses. Los mexicanos unidos, los sinaloenses unidos, sin duda podremos triunfar en esta batalla. Muchas gracias.