Al Senado, dinosaurios, juanitas y televisos/JENARO
VILLAMIL
Revista Proceso # 1844, 4 de marzo de 2012
La nueva cara del PRI se ve peor que su viejo rostro: en
las listas de candidatos plurinominales al Senado y a la Cámara de Diputados la
dirigencia nacional priista incluyó a representantes del más rancio
sindicalismo –como los responsables del Pemexgate,
por ejemplo–, a varias mujeres que, según sus antecedentes, se convertirán en
“juanitas” y a personeros de las dos grandes empresas de la televisión. Otros
sectores de ese partido quedaron marginados, se enojaron y ya comenzaron
protestas que podrían devenir en una crisis tricolor.
Una soterrada rebelión se gesta en el PRI luego de
saberse que dirigentes de sectores como el Movimiento Territorial y el Frente
Juvenil Revolucionario, legisladores con arraigo estatal y organizaciones
adherentes al partido fueron marginados de las listas de aspirantes
plurinominales al Senado y a la Cámara de Diputados para privilegiar al viejo
corporativismo sindical, a personajes vinculados con las dos grandes
televisoras y presumiblemente para incluir a “juanitas”, es decir candidatas
que una vez electas renuncien para cederle su curul a un suplente varón.
Mientras el conflicto interno crece, la dirigencia
nacional y el aspirante presidencial Enrique Peña Nieto hicieron las paces con
el mandatario Felipe Calderón, luego de una reunión privada que con él sostuvo
Pedro Joaquín Coldwell, presidente del CEN del PRI, el pasado 27 de febrero.
La “guerra declarativa” entre el PRI y el gobierno
federal se suspendió. Apenas el 23 de febrero Joaquín acusó a Calderón de
convertir la institución presidencial en “una encuestadora patito”, en
referencia al presunto estudio demoscópico de Los Pinos que colocó a la
aspirante presidencial panista Josefina Vázquez Mota sólo cuatro puntos abajo
de Peña Nieto.
Y las demandas interpuestas por el PRI en la Fiscalía
Especializada para la Atención de Delitos Electorales (Fepade) contra María
Luisa Calderón Hinojosa, hermana del presidente, no se volvieron a mencionar.
A su vez el
gobierno federal dejó de “filtrar” avances de investigaciones ministeriales
contra los exgobernadores priistas de Tamaulipas (Manuel Cavazos Lerma, Tomás
Yarrington y Eugenio Hernández Flores) y contra el sobreendeudamiento en
Coahuila durante el gobierno de Humberto Moreira, exdirigente
nacional del PRI.
Este partido también decidió no incorporar a sus listas a
la Cámara de Diputados o al Senado a los exmandatarios más señalados por
presuntos casos de corrupción, como Hernández
Flores, Fidel Herrera, Ulises Ruiz, Mario Marín y Moreira. El exdirigente
nacional priista declinó ser considerado en las listas “por razones
estrictamente personales”. Informó que haría “una maestría en historia”,
afirmó Joaquín.
Otros exgobernadores sí estarán como aspirantes
uninominales al Senado, como René
Juárez, de Guerrero; Patricio Martínez, de Chihuahua; Félix González Canto, de
Quintana Roo; Teófilo Torres, de San Luis Potosí; Enrique Burgos, de Querétaro;
Ismael Hernández Deras, de Durango; y Manuel Cavazos Lerma, de Tamaulipas, a
quien Peña Nieto defendió luego de que se filtrara a la prensa que la
Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada
(SIEDO) lo investigaba por presuntos vínculos con el crimen organizado.
No sucedió lo
mismo con Mario Marín. El 10 de enero El Góber Precioso
reapareció en un mitin con Peña Nieto y la estructura territorial del PRI. Dos
días después el mexiquense descartó en conferencia de prensa que exista en este
momento “acuerdo ni mayor relación” con el exmandatario poblano.
La semana pasada Pedro Joaquín negó cualquier negociación
“secreta” entre Los Pinos y el PRI, mientras Peña Nieto festejó que Calderón se
hubiera comprometido a conducirse imparcialmente. Y las coordinaciones del
tricolor en la Cámara de Diputados y en el Senado suspendieron la discusión
sobre la interferencia presidencial en el proceso electoral.
Joaquín negó que uno de los acuerdos fuera marginar de la
contienda al candidato de las izquierdas, Andrés Manuel López Obrador, para
concentrarse en una disputa bipartidista PRI-PAN.
“Me parece un poco paranoica la declaración (de Jesús
Zambrano, dirigente nacional del PRD) de que el presidente nos llamó a dar una
explicación y él deduce que es para armar un complot contra el PRD”, afirmó
Joaquín.
Un día después de culminada la reunión de la Comisión
Política Permanente del PRI para aprobar las listas plurinominales de
aspirantes a diputados y senadores, se divulgó una encuesta de GEA-ISA y
Milenio TV donde Peña Nieto lleva sólo siete puntos de ventaja a Josefina
Vázquez Mota.
Los viejos rostros
El rostro del “PRI del cambio” no se ve en las listas de
candidatos plurinominales, donde reviven personajes como los dirigentes
petroleros Carlos Romero Deschamps y Ricardo Aldana –protagonistas del
escándalo Pemexgate que le costó una multa al tricolor de mil millones de
pesos– o cuotas para la CTM, como el senador Carlos Aceves del Olmo, o el
veterano dirigente cetemista del Estado de México Armando Neyra Chávez, quien
ocupa el tercer lugar en la lista al Senado.
Las plurinominales incorporan a excandidatos priistas
perdedores como Manuel Añorve Baños, de Guerrero, y Javier López Zavala, de
Puebla; y personajes polémicos como Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre, dirigente
de los pepenadores del Distrito Federal, o el líder de Antorcha Campesina,
Brasil Acosta Peña.
El PRI también garantiza posiciones seguras a personajes
vinculados a las dos grandes televisoras: Tristán
Canales y Jorge Mendoza, exdirectivos de TV Azteca. Canales va en el lugar 13
de la lista plurinominal al Senado y Mendoza, actual senador, está en el tercer
lugar de la circunscripción 2 para la Cámara de Diputados.
También aparecen Arely
Gómez González Blanco, hermana del vicedirector de Noticias de Televisa,
Leopoldo Gómez, a quien el PRI impulsó infructuosamente como consejera general
del IFE y se coló al octavo lugar de la lista al Senado; o Hanna de la
Madrid Téllez, hermana de Jessica de la Madrid, exnovia de Enrique Peña Nieto y
artífice del primer contrato millonario de Televisa con el exgobernador. Hanna
de la Madrid va por vía doble: como candidata a diputada federal uninominal y
plurinominal, en el octavo lugar de la cuarta circunscripción.
Con tal de cumplir la llamada “cuota de género” (50%
varones y 50% mujeres) existen tres candidatas al Senado que aparecen tanto en
las fórmulas de mayoría como en las plurinominales. Son Guadalupe Flores
Valdez, exdirigente agraria de Tamaulipas que aparece como compañera de fórmula
de Cavazos Lerma y en el lugar 12 de la lista plurinominal; Hilda Flores
Escalera, en el décimo lugar de la lista al Senado y compañera de fórmula del exalcalde de Torreón Braulio Manuel
Fernández Aguirre; y María Isabel Aguilar Morales, en el lugar 14 de la
lista plurinominal y compañera de fórmula de Enrique Burgos.
También se incorporó a la esposa de Jorge Hank Rhon,
María Elvia Amaya Araujo, en el octavo lugar de la primera circunscripción; a
Elsa Patricia Araujo de la Torre, hermana de Hugo Andrés Araujo, en el cuarto
lugar de la circunscripción 2, y a María Elena Barrera, alcaldesa con licencia
de Toluca, que va a la Cámara de Diputados tanto por la vía uninominal como en
el segundo lugar de la lista plurinominal de la quinta circunscripción.
Nueve de los 33 actuales senadores del PRI quedaron en
las plurinominales para San Lázaro. Por ejemplo el actual coordinador Manlio
Fabio Beltrones, que encabeza la lista de la primera circunscripción; Jesús
Murillo Karam, exgobernador de Hidalgo; el bajacaliforniano Fernando José
Castro Trenti; Francisco Agustín Arroyo Vieyra, exaspirante al gobierno de
Guanajuato; Jorge Mendoza Garza, exdirector de TV Azteca; Eloy Cantú Segovia,
empresario regiomontano, y Carlos Aceves del Olmo, de la CTM.
El retorno de Gamboa Patrón
A la cabeza de la lista de aspirantes al Senado aparece
Emilio Gamboa Patrón, actual dirigente de la CNOP y coordinador de la bancada
priista en la Cámara de Diputados en la anterior legislatura. Aspira a
coordinar a los senadores priistas.
Políticos marginados de estas listas, consultados por
Proceso, le atribuyen a Gamboa ser el artífice principal de los “amarres” y las
negociaciones para incorporar a figuras vinculadas con la telebancada, a los
sindicatos más desprestigiados y a representantes de grupos de interés.
Fuera de las listas al Senado quedaron figuras como
Francisco Rojas, actual coordinador de los diputados federales del PRI; el
exgobernador mexiquense Emilio Chuayfett, quien también perdió en la fórmula de
mayoría por la entidad que gobernó Peña Nieto; Canek Vázquez, dirigente del
Frente Juvenil Revolucionario y exsecretario privado del senador Beltrones;
Carlos Flores Rico, dirigente nacional del Movimiento Territorial, y la
senadora María de los Ángeles Moreno, exdirigente nacional del partido.
A hurtadillas
Los integrantes de la Comisión Política Permanente del
PRI se reunieron en la hacienda hidalguense Mineral de la Reforma el pasado 29
de febrero para definir las listas a diputados federales y senadores por la vía
plurinominal. La dirigencia priista decidió salir de la Ciudad de México a fin
de evitar las protestas que ya habían empezado afuera del PRI capitalino.
En menos de dos horas se discutieron y aprobaron las
listas. Gamboa Patrón fue uno de los cabilderos más activos antes y durante ese
cónclave, según confirmaron varios priistas consultados.
Pedro Joaquín Coldwell admitió que hubo dos
inconformidades durante la sesión.
Una encabezada por priistas de Yucatán que querían
modificar la lista. El senador Cleominio Zoreda, exaspirante a la gubernatura
de esa entidad, quedó fuera de la lista de la tercera circunscripción. En la
sesión dijo que había un acuerdo previo con la actual gobernadora yucateca,
Ivonne Ortega Pacheco, para incluirlo.
Los yucatecos fueron marginados de los primeros lugares
de la tercera circunscripción, donde aparecen personajes como Simón Valanci
Buzali, concesionario de Radio Chapultepec; Jorge del Ángel Acosta, dirigente
de la sección 30 del sindicato petrolero, o el líder azucarero Arnoldo Ochoa
González; y los oaxaqueños Martín J. Vázquez Villanueva y María de las Nieves
García Fernández, que negociaron aceptar su derrota en las fórmulas para el
Senado a cambio de que los incorporaran en las listas plurinominales.
Otra protesta fue la de cinco consejeros del Frente
Juvenil Revolucionario que votaron contra el dictamen de la lista plurinominal
al Senado. Su dirigente, Canek Vázquez, declaró ante la prensa que el actual
Comité Ejecutivo Nacional “enterró” las propuestas de esta organización.
Carlos Flores Rico, dirigente nacional del Movimiento
Territorial, no aceptó quedar en el sitio 15 de la lista plurinominal al
Senado. Criticó que se hubiera marginado a este organismo de la mayoría de las
listas. Mientras al sindicato petrolero le dieron más de cuatro posiciones, al
movimiento sólo una en la lista de la Cámara de Diputados.
Al respecto Joaquín argumentó que este gremio “representa
aproximadamente 200 mil trabajadores, entre gente de base, eventuales y
jubilados. Es decir, más de 1 millón de personas, tomando en cuenta a sus familias.
De cada peso que se invierte, que se gasta del presupuesto de egresos del país,
de la federación, 40 centavos, por lo menos, vienen del petróleo.
“Por eso el
partido ha considerado que debe dar una oportunidad de representación
senatorial, y en otros cargos de diputados, a los representantes del gremio
petrolero.”
El jueves 1, en entrevista con Carmen Aristegui en MVS
Radio, Gamboa hizo una encendida defensa de los protagonistas del Pemexgate en
2000, cuando él fungió como coordinador de la campaña de Francisco Labastida,
perdedor ante Vicente Fox.
“Se les buscó, se
les analizó, se les investigó y gozan de absoluta libertad… Fueron acusados 16
miembros de la campaña del candidato Labastida y ninguno fue a la cárcel”,
indicó.
Cinco años después el Pemexgate derivó en una multa de
unos 100 millones de dólares al PRI y de 258.3 millones de dólares a
exdirectivos de Pemex, entre ellos a Rogelio Montemayor, acusados de presunto
desvío de fondos de la paraestatal para la campaña presidencial priista.
Gamboa también negó que existiera una telebancada o pago
de favores a las dos televisoras dominantes con la incorporación de sus
exfuncionarios a las listas. El actual dirigente de la CNOP fue uno de los
principales impulsores de la Ley Televisa en el Senado, en marzo de 2006, y
como secretario de Comunicaciones y Transportes en el sexenio de Carlos Salinas
de Gortari fue el artífice de la privatización de Imevisión concretada en 1993
–de la que fue beneficiario Ricardo Salinas Pliego– y de la entrega de 62 concesiones
más a Televisa para que concretara su tercera cadena nacional.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario