10 sept 2014

El cardenal Norberto Rivera alza la voz /FA

El cardenal Norberto Rivera alza la voz /FA
Publicado en La Otra Opinión, 9 de septiembre de 2014;
  • Hizo un llamado al gobierno de Enrique Peña Nieto para que emita posicionamiento por el asunto de Irak.

 Lugar y fecha: domingo siete de septiembre de 2014 en la Basílica de Guadalupe, principal Templo mariano de América.

Oficiante: Arzobispo Norberto Rivera Carrera.
Convocantes al servicio religioso; fieles de la arquidiócesis y dirigentes de distintas denominaciones, sobretodo integrantes del Consejo Interreligioso de México (CIM); asistieron esta vez Sayedna Antonio Chedraoui, de la Iglesia Ortodoxa de Antioquía, y Su gracia Alejo Antonio, de la Iglesia Ortodoxa de América; asimismo miembros de la comunidad judía en México; del Centro Islámico Ahlul Bayt; de Casa Tíbet México; de la Sociedad Internacional para la Conciencia de Krishna y del Sínodo Luterano de México, entre otros; todos ellos integrantes del CIM
El motivo: pedir por la paz en Irak, tal y como lo ha pedido el papa Francisco.
La nota en algunos medios es que Norberto se atrevió a criticar  la “tibieza” del l gobierno de Peña Nieto ante crímenes en Irak.
¿Qué dijo realmente en La Basilica?
Una cabeza publicada en la web del Sistema Informativo de la Arquidocesis de México, señala: “México debe pronunciarse “sin tibieza” ante crímenes en Irak: Card. Rivera.
Recomiendo que mejor leamos parte de la homilía tomada de la web, dijo Rivera Carrera, señalo qie no podemos permanecer indiferentes ante la tragedia de los cristianos perseguidos por grupos extremistas islámicos en Irak. “Son miles de cristianos los que, a causa de su fe en Jesucristo, han sido desterrados de su pueblos, privados de sus bienes y amenazados con ser asesinados”

Y agregó: “Este día –domingo siete-, he querido peregrinar, a nombre de la Arquidiócesis de México, a los pies de Nuestra Señora de Guadalupe, Reina de la Paz, para unirme a la apremiante súplica del papa Francisco, de orar por todos los cristianos que sufren persecución en el mundo, especialmente, por la tragedia de nuestros hermanos en la fe del pueblo de Irak.”
E hizo referencia a San Pablo, cuando señala que “si un miembro sufre, todo el cuerpo sufre. En la Iglesia de Jesucristo, todos formamos una comunidad de fe vivificada por el Espíritu Santo, de tal manera que ningún hermano nos puede ser indiferente; y no se trata de una simple solidaridad o compasión humanas, sino de una comunión profunda que trasciende los lazos afectivos y culturales; es una comunión sobrenatural de fe y amor..”
Y agregó: “Hermanos, no podemos permanecer indiferentes ante la tragedia de los cristianos perseguidos por grupos extremistas islámicos en Irak. Son miles de cristianos los que, a causa de su fe en Jesucristo, han sido desterrados de su pueblos, privados de sus bienes y amenazados con ser asesinados; se cuentan ya por cientos los que han sido brutalmente asesinados, y miles viven bajo la amenaza de perder la vida si no renuncian a su fe en Jesucristo y abrazan el islam.”
¿Y qué hace Occidente ante esta tragedia?, se pregunta el de Tepehuanes, Durango.
Y el mismo responde –de acuerdo a la homilía publicado en la web-
“ Afortunadamente ha roto el silencio; ya diez países se han comprometido a actuar...” sin mencionarlos se refiere a países como EU que han emitido posicionamiento.
Y aquí aborda el tema de México:  “Cuanto nos alegraría  una posición clara de México ante estos horrendos crímenes de lesa humanidad, la voz de México debería hacerse oír sin ambigüedades y sin tibieza, ante una tragedia que no admite silencios ni demoras.”
Hasta ahí parte de su sermón.
No vemos ningún problema, al contrario. Las iglesias deben alzar la voz oportunamente
Y esperemos que no se le quiera sancionar al Primado, no vemos con todo respeto ningún violación a la ley en la materia, como algunos quizá digan. Y es que basta ver el contexto y leer completa la homilía para opinar correctamente.
Una columna política señala que los dichos de Rivera no gustaron al gobierno:
“Muy mal cayeron en el gobierno federal las opiniones del arzobispo primado de México, el cardenal Norberto Rivera Carrera, quien dijo que el gobierno mexicano debe asumir una postura clara en el conflicto en Irak ante el asesinato y persecución de cristianos. Don Norberto aseguró que “nos alegraría una posición clara de México ante estos horrendos crímenes de lesa humanidad; la voz de México debería hacerse oír sin ambigüedades y sin tibieza, ante una tragedia que no admite silencios ni demoras”. Sin embargo, en la cancillería las declaraciones del jerarca católico causaron malestar, pues aseguran que en el marco de Naciones Unidas el gobierno de México, acompañado de otras naciones, trabaja de distintas formas en la búsqueda de una solución a ese conflicto y que precisamente en ese foro ha expresado su abierta condena a los hechos.”. (Bajo Reserva de El Universa).
Obviamente que la secretaria de Relaciones Exteriores, que encabeza José Antonio Meade Kuribreña,  no dijo nada oficialmente; Gobernación tampoco.
No hay nada que decir. Los líderes religiosos en México tienen amplia liberta de opinión, y hay algunos asegunes que deben abordar con prudencia.
Esta vez coincidimos con Norberto!, es evidente que decidió seguir los pasos de su jefe el papa Francisco en este tema, y esperemos que lo haga en lo demás, por ejemplo en forma modesta de vivir. Ahí debe seguir los pasos de Francisco.
 La homilía de 1996
Y es que en octubre de 1996, el gobierno mexicano cometió un error al amenazar con aplicar contundentemente la ley en la materia por una homilía en la catedral metropolitana, donde el obispo- todavía no era cardenal- hacia una critica al gobierno del Presidente EZPL y hablaba de la desobediencia civil.
¡ Aquello fue un escandaló con reacciones de todas las fuerzas políticas!
¡Qué sucedió entonces?
Dijo Rivera Carrera desde el púlpito –lo del pulpito es un decir, ya nadie lo usa- que  “siendo la iglesia continuadora de Jesús en la historia, podemos concluir que puede y debe meterse en política como lo hizo Jesús”.
Para muchos aquello fue una provocación, y con ello se tocó el tema de los límites de acción de la Iglesia, y generó la primera polémica sobre religión y política.
De entrada, lo dicho por el prelado fue considerado como el primer punto de quiebre entre la Iglesia católica y el gobierno luego del reconocimiento jurídico.
En respuesta, Gobernación le envió un extrañamiento en la que advirtió que si reincidía se haría merecedor de una sanción, incluso el cierre de la catedral.
Las Reacciones no se hicieron esperar;  en las Cámaras de Diputados y de Senadores se suscitaron debates, pros y contras: críticas y apoyos al prelado; discusión sobre si violó o no el artículo 130 constitucional y la Ley de Asociaciones Religiosas y Culto Público. (lo tengo todo documentado).
La mayoría de Diputados y Asambleístas de los  partidos: PRI, PRD y PT  coincidieron, al hacer un llamado a los ministros de la Iglesia Católica a sujetarse a la ley y no violar el principio de separación Estado-iglesia al intervenir en política, y un largo etc.
El único partido que defendió lo dicho por el Arzobispo Primado de México fue el PAN y algunos  miembros del PRD.
En lo personal me toco vivir esa etapa. Era un servidor publico en esas oficinas de Asunto Religiosos, que dirigía don Rafael Rodríguez Barrera – ya difunto lamentablemente- y le externé una opinión una vez que leí la homilía de entonces.
La verdad es que no vi ninguna falta a la ley; en cambio otros vieron las cosas diferentes y se lanzaron contra el arzobispo Primado de México.
Las relaciones entonces quedaron dañadas y Rivera Carrera paso a ser una figura con un bajo perfil – como era en Tehuacán, Puebla-, a ocupar excelentes espacios, tanto en los medios impresos como electrónicos. Fue la famosa homilía del domingo 20 de octubre de 1996 le que marco un antes y un después
Incluso tuvo que salir al quite el presidente de la República –EZPL- el 24 de octubre en una entrevista concedida a la cadena televisiva Univisión, Y aunque él había ordenado al Secretario de Gobernación la sanciones correspondientes, negó que existiera un conflicto entre ambos instituciones. Minimizó el hecho y dijo que “lo que está ocurriendo, es que hace unos años hubo una reforma constitucional (1992) que le dio identidad jurídica y reconocimiento a las iglesias”. De ahí que “hay un nuevo entorno para la propia acción y actuación de la iglesia y estamos viendo un período de cambio y adaptación a las nuevas circunstancias”.

Eso fue hace años..

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